– Si.

– ?Extasis?

– Si.

– ?Como sabeis que era extasis?

– Bueno… -vacilo Maximo-. Se supone que…

– ?Soleis tomarlo a menudo?

– No -dijeron al unisono los dos chicos.

Probablemente demasiado rapido, aunque…

– ?Que efecto os causo? -continuo el interrogatorio.

– Era como… si tuviera un millon de hormigas dentro -dijo de nuevo Cinta, dispuesta a hablar-. Mi cuerpo era una maquina, capaz de todo. Un estado de exaltacion total.

– Yo queria a todo el mundo -reconocio Maximo-. Un rollo estupendo. Me dio por reirme cantidad.

– Si, eso -convino Santi-. Era como estar… muy arriba, no se si me entiende. Arriba y muy fuerte.

– ?Y ahora?

No hizo falta que respondieran. El bajon ya era evidente. Fueran o no habituales, podian tener nauseas, cefaleas, dolor en las articulaciones…

– ?Que le paso exactamente a Luciana?

– Empezo a subirle la temperatura del cuerpo.

– No -Santi detuvo a Cinta-. Primero se mareo, y luego vino lo de los calambres musculares.

– Fue todo junto -apunto Maximo-. Yo me asuste cuando vi que dejaba de sudar. Entonces comprendi que le venia un golpe de calor.

– ?Asi que sabeis lo que es eso?

– Si.

– ?Y aun asi, os arriesgais?

Era una pregunta estupida, improcedente. Lo comprendio al instante. Miles de chicos y chicas lo sabian, y sin embargo todas las semanas se jugaban la vida tomando drogas de diseno. Despues de todo, solo alguien moria de vez en cuando.

Solo.

– ?Que paso despues? -siguio el doctor Pons.

– Lo que le hemos contado -dijo Cinta-. Empezo con las convulsiones, el corazon se le disparo y…

– ?Teneis aqui una pastilla de esas?

– No.

Suspiro con fuerza. Hubiera sido demasiada suerte. Con una pastilla al menos sabria que llevaba Luciana en el cuerpo. Un analisis de sangre no bastaba. Habia que analizar el producto.

Ni siquiera sabian contra lo que luchaban.

– A nosotros no nos hizo nada -manifesto Santi-. ?Por que si a ella?

– Eso no se sabe, por esta razon es tan peligroso. Os venden quimica pura adulterada con yeso, ralladura de ladrillos, materiales de construccion como el «Agua-plast» e incluso venenos como la estricnina. A veces son mas benevolos y simplemente se trata de un comprimido de paracetamol, que no es mas que un analgesico. Pero de lo que se trata es de que, luego, cada cuerpo humano reacciona de una forma distinta. De hecho, no hay nada, ninguna sustancia, capaz de provocar una reaccion como lo que le ha sucedido a Luciana, un coma en menos de cuatro horas; pero si alguien sufre del corazon, tiene asma, diabetes, tension arterial alta, epilepsia o alguna enfermedad mental o cardiaca, que a veces incluso se ignora por ser jovenes y no estar detectada, la reaccion es imprevisible. Incluso beber agua en exceso, pese a que se recomienda beber un poco cada hora, puede llevar a esa reaccion. En una palabra: el detonante lo pone la persona.

Dejo de hablar. Los tres le habian escuchado con atencion. Pero el resultado era el mismo. Cerca de alli una chica de dieciocho anos se debatia entre la vida y la muerte, al filo de ambos mundos, perdida, tal vez eternamente, en una dimension desconocida. Quiza por ello esperaba la ultima pregunta.

La formulo Cinta.

– Se pondra bien, ?verdad, doctor?

Y no tenia ninguna respuesta para ella. Ni siquiera un minimo de optimismo en que basarse.

10

(Blancas: h4)

Al salir del despacho del doctor Pons se quedaron unos segundos sin saber que hacer o adonde ir. Luego, de comun acuerdo aunque sin mediar palabra alguna, encaminaron sus pasos en direccion a la salita en la que habian esperado las noticias acerca del estado de Luciana.

No sabian a ciencia cierta por que seguian alli, pero lo cierto es que no se les paso por la cabeza marcharse. Era como si ya formaran parte del hospital, o del destino de su amiga.

Vacilaron al ver que en la sala habia otras dos personas, esperando tambien noticias de otros enfermos. Entonces fue cuando vieron aparecer a Eloy; venia corriendo, congestionado aun por la prisa que se habia dado en llegar desde su casa a aquella hora.

Maximo lleno sus pulmones de aire. Santi se quedo quieto. Cinta fue la unica en reaccionar yendo, directamente, al encuentro del recien llegado para abrazarse a el.

Volvio a llorar.

– ?Que… ha pasado? -pregunto Eloy alarmado.

Cinta no podia hablar. Fue Santi quien lo hizo.

– Esta en coma.

– ?Que? -Eloy se puso palido.

– Ha sido una putada, tio -manifesto Maximo.

– Pero… ?cuanto tiempo…?

– Esta en coma -repitio Santi-. ?Jo, tu, ya sabes!, ?no?

La idea penetro muy despacio en su mente. Fue como si se diera cuenta de que Cinta estaba alli, entre sus brazos. La apreto con fuerza, para no sentirse solo, ni tan impotente como se sentia en ese instante.

– ?Que dicen los medicos? -logro romper el nudo albergado en su garganta.

– Que hay que esperar. Las cuarenta y ocho horas siguientes son decisivas -le respondio Santi.

Eloy apreto las mandibulas.

– ?Que mierdas habeis tomado? -alzo la voz de pronto.

No hubo una respuesta inmediata. Fueron los ojos de Eloy los que actuaron de sacacorchos.

– Nada, tio, solo un estimulante -parecio defenderse Maximo.

– ?Para que? ?Mierda! ?Para que?

– Oye, si hubieras estado alli, tu tambien lo habrias hecho, ?vale?

– ?Yo? ?Si ni siquiera fumo!

– ?Que tiene que ver esto con el tabaco? Lo tomamos para ver que pasaba y estar en forma y no cansarnos y…

– ?Y para ver que pasaba, cono! -acabo Santi la frase de Maximo.

– Por favor… no os peleeis… por favor -suplico Cinta.

– Yo no habria tomado nada -insistio mirandola-. Ni la habria dejado a ella. ?Lo habeis hecho por eso, porque no estaba yo?

– Ha sido una casualidad -Santi dejo caer la cabeza abatido.

– ?Y una mierda! -grito Eloy.

– Estabamos con Ana y Paco, bailando, y entonces… -Cinta volvio a verse dominada por la emocion. Las lagrimas le impidieron continuar hablando. Se abrazo de nuevo con fuerza a Eloy y balbuceo un desesperado-: Lo siento… Lo siento… Lo siento…

Ya no encontro ninguna simpatia ni consuelo en el. La aparto bruscamente de su lado.

Вы читаете Campos de fresas
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату
×