La Luna se ha derrumbadocomo un perro herido sobre los campos.Pretende un silenciode fondo de mar.Se muere lentamente,igual que las ninasque no suenan.
VIII
Clavo mi punal en el paisaje,y le pregunto al vientopor ese lugar exacto,apenas una manchade luz, su cerco intransitable.La fatalidadtambien sigue sus tacticas.
XIX
El fulgor llena de mapas el espacio.Arde y arrasacon su fuerza de cristales y, gritos.Y un sollozo se oxidaalla lejos,encima de la sabana.
XX
La entrana de la nieve,?suena con el estio?El mundo es un jilgueroque no entiende.Al alba,canta su desaliento.
XXI
Mis ojos deambulanbajo el anis de la Luna.Miro el cielo,que ya no enciende las ciudades.Sus hebras de amor y muerteson la piel ulceradade un muertoal que nadie mas besa.
XXII
Tu dijiste que siemprenos amariamos,hasta sentirla carne de los labioshecha una madejade venillastronchadas de silencio.Yo dije: interroguemosal Solpor sus asuntos de brasero.