– Quiere que viaje lo menos posible durante las dos ultimas semanas del primer trimestre. Despues, durante el segundo, viajare bastante. Y menos durante el tercero. Lisa me dijo algo sobre una serie de conciertos en Hawai, durante las Navidades, pero no creo que acepte.

Nicole tomo un aguacate y comenzo a partirlo.

– ?Por que no? ?No podeis llevaros a Amy?

– Oh, si. Y tendriamos una casa muy bonita junto a la playa para alojarnos, pero esta muy lejos, y no quiero estar viajando en esas fechas. Ya sabes. Lejos de la familia.

Nicole estaba a punto de decirle que la mayoria de su familia, su prometido y su hija, estarian con ella. Entonces lo entendio. Claire no queria estar lejos de ella. No queria dejarla sola en Navidad.

– Yo estare perfectamente -dijo-. Deberias ir.

– No es por ti -dijo Claire, aunque aquello no sonaba muy convincente-. Esta es la primera ocasion que tenemos de pasar juntas la Navidad desde que teniamos seis anos. No voy a ir a Hawai. No quiero.

– No te creo.

– Eso no puedo remediarlo.

– Estas preocupada por mi.

– Claro, pero lo superare.

Nicole intento sonreir, pero no lo consiguio. Agradecia que la gente se preocupara por ella, pero no le gustaba sentir la necesidad de comprension. Normalmente, llevaba su vida de forma que la mas capaz era ella. Los demas acudian a ella en busca de guia. Normalmente, ella no era la que recibia la compasion.

– Y hablando de superar -prosiguio Claire-, ?has hablado con Jesse ultimamente?

– Sabes que no.

– Tendras que hacerlo algun dia.

– ?Y por que? No solo se acosto con mi marido, sino que ademas se puso a vender la Tarta de Chocolate Keyes por Internet -dijo-. Estoy segura de que, si hablara con ella, tendria un millon de excusas. Nunca asume la responsabilidad de nada.

– La echaste de casa -dijo Claire en voz baja-. Tenia que ganarse la vida de alguna manera.

– Exacto. Tenia que buscarse un trabajo. Hay cientos de trabajos por ahi, pero ?intento encontrar alguno? No. Robo. Primero a Drew, y despues la tarta -respondio Nicole. Estaba empezando a tener dolor de estomago-. No quiero hablar mas de esto.

– No vas a conseguir olvidarlo hasta que encuentres la forma de reconciliarte con ella.

– A lo mejor es que no quiero volver a tener nada que ver con Jesse -respondio Nicole. La ira y el dolor se habian apoderado de ella-. La semana pasada, un chico intento robar unos donuts en la pasteleria. Cundo me enfrente a el, asumio su responsabilidad y se sintio culpable. Sabia que lo que habia hecho estaba mal. Trabajo unas horas para pagar lo que habia intentando robar. Hizo tan buen trabajo, que le ofreci un puesto en el obrador. ?Por que Jesse no puede ser asi? ?Por que no asume la responsabilidad de lo que ha hecho?

– Se que te hizo mucho dano.

– Mas que eso. Mucho mas que eso.

– Pero teneis que solucionarlo.

– Lo se -murmuro Nicole-. Al final lo hare. Pienso en ello, pero cuando lo hago me enfado tanto que no quiero verla ni hablar con ella.

– Me pone muy triste que no os lleveis bien -le dijo Claire-. Sois familia.

– No es una familia que yo desee.

– No te creo -replico Claire-. Tienes todo el derecho a estar enfadada y dolida, pero creo que es hora de que te preguntes hasta que punto te comportas asi para darle una leccion a tu hermana y hasta que punto lo haces para vengarte de ella.

Tres

Nicole se sentia tonta y azorada mientras se dirigia hacia el estadio del instituto apoyandose en el baston. Era demasiado mayor para estar en un partido de viernes por la noche… o demasiado joven. No era estudiante, y no tenia a un hijo en el instituto. Entonces, ?que estaba haciendo alli?

– Me esta bien empleado, por hablar con mis trabajadores -refunfuno para si.

Deberia haberse despedido con un gesto de la mano y haber seguido caminando, pero no. Ella tenia que pararse a hablar con Raoul al final de su primera semana de trabajo en el obrador. Le habia preguntado que tal iban las cosas, porque era tonta. Y cuando el le habia mencionado el partido de aquella noche, ella habia fingido que le interesaba.

– Podias haber dicho que no -se recordo. Cuando Raoul le habia pedido que fuera, podia haber dicho que estaba muy ocupada. Pero no lo estaba, y ella no mentia bien. En el sentido espiritual, posiblemente aquello estaba bien, pero en lo referente a como iba a pasar aquella noche, era una pesadez.

Miro a las filas de bancos que hacian las veces de asientos. No conocia a nadie, pero si tenia que elegir entre los chicos del instituto y los padres, elegia a los padres. Al menos, asi tendria la oportunidad de hablar con alguno de ellos.

– ?Nicole!

Se volvio hacia el campo y vio que uno de los jugadores corria hacia ella. Llevaba el uniforme y todo el equipo, y Nicole tardo unos segundos en reconocer a Raoul.

– Hola -le dijo, mientras se acercaba a la barandilla que separaba el campo de los asientos-. Impresionante. Pareces malo y fortachon.

Raoul sonrio.

– ?De verdad?

Ella asintio. El chico tenia un aspecto diferente. Mayor. Peligroso. Sintio el impulso de decirle que no se hiciera dano; parecia que tenia el instinto maternal a flor de pie.

– ?Vais a jugar contra un equipo dificil? -pregunto.

– Son buenos, pero les vamos a patear el trasero.

– Estoy impaciente por verlo.

Raoul sonrio de nuevo.

– Gracias por venir. Normalmente nadie viene a verme jugar. Salvo mis amigos, ya sabe. No un adulto.

Eso era ella. Una adulta.

– Te vitoreare mucho e intentare avergonzarte -bromeo.

– Bien.

Una chica muy guapa con un uniforme de animadora se acerco corriendo.

– Hola -dijo con una gran sonrisa-. Soy Brittany.

La adolescente era incluso mas guapa de cerca. Parecia el tipo de nina perfecta y muy popular en el instituto. Nicole penso en odiarla por principio.

– Nicole -dijo.

– Es mi jefa -dijo Raoul-. Ya te he hablado de ella. Brittany es mi novia.

– Me alegro de conocerte -dijo Nicole.

– Yo tambien. Espero que le guste el partido. Vamos a tener un gran ano.

Alguien toco un silbato en el campo.

– Tengo que irme -dijo Raoul-. La vere despues del partido.

Salio corriendo antes de que Nicole pudiera decirle que no iba a quedarse. Entonces recordo que no tenia el calendario social lleno, asi que, ?por que no iba a pasar el rato alli?

– No has podido resistirte, ?eh?

Nicole oyo aquella voz y sintio calor por todo el cuerpo. Lo maldijo a el por provocarla y se maldijo a si misma por reaccionar.

Miro hacia la barandilla y vio a Hawk, que estaba en la hierba.

No iba vestido deportivamente, sino que llevaba unos pantalones y un polo con los colores del instituto. Estaba

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