Como creia que no seria capaz de permanecer en silencio si Luke la acariciaba otra vez, sobre todo despues de ver lo que le habia provocado solo con acariciarle los pechos con la lengua, decidio que lo mejor era esperar otra oportunidad. Una oportunidad en la que no hubiera publico ni posibilidad de interrupcion.
Esperar no deberia ser tan dificil, pero al verlos marchar desde la clinica, penso que podria morirse.
Tenia que admitir que el deseo se habia apoderado de ella con cada movimiento. Ya habia decidido que no habia nada de malo en que eso sucediera de vez en cuando. Nada malo con tener una relacion sexual satisfactoria para ambos.
Entonces, ?por que le molestaba la idea de que solo fuera sexo y nada mas? ?Por que se preocupaba con la idea de estar con un hombre que no la amaba y que, probablemente, nunca la amaria?
Porque empezaba a estar enamorada. Eso era.
Y era lo bastante anticuada como para pensar que, si ella se enamoraba, el tambien deberia enamorarse.
Capitulo 10
La semana paso volando. Una de las noches, Faith salio a cenar con el personal de la clinica. Otra, vio una pelicula con Shelby. Paso una tarde en la biblioteca, leyendo por placer, y otra, haciendo la compra, algo que era mas complicado que antes teniendo en cuenta su nueva condicion de diabetica.
Controlar el nivel de azucar en sangre era mas dificil de lo que nunca habria imaginado. E incluso, con todo el tiempo que dedicaba a ello, no conseguia tenerlo controlado.
El virus de la gripe habria sido mucho mejor.
Y respecto a por que evitaba a Luke, la clave era el dolor que este le producia. No un dolor fisico, sino uno mucho peor, dolor de corazon.
El sabado, Luke aparecio en la clinica y no dijo nada acerca de que no se hubieran visto en toda la semana. Trabajaron juntos durante todo el dia, pero el no hizo ningun intento de entrar en el almacen con ella ni de verla a solas.
?Habria cambiado de opinion? ?Y por que a ella no le parecia bien?
Aquella noche, cuando todo el mundo se habia marchado, Faith se dio un bano de espuma con olor a jazmin. Solo habia una cosa que pudiera mejorar su estado de animo, bueno, dos. El chocolate.
Y Luke.
Pero no podria tener ninguna de las dos.
Cuando sono el timbre, le dio un vuelco al corazon. Se quedo quieta dentro del agua, pero llamaron de nuevo. Salio de la banera y se cubrio con una toalla. Se dirigio a la puerta y encendio la luz del exterior.
Luke estaba alli. Al verlo, se le acelero el corazon y un fuerte deseo se apodero de ella. Deseo mezclado con dolor. Todo a la vez.
De pronto, sintio que debia retirar la barrera que habia entre ellos y abrio la puerta para que Luke entrara. Pero se dio la vuelta, sabiendo que, si lo miraba, el descubriria sus sentimientos, su deseo, su esperanza, su confusion…
Desde detras, el le acaricio el cabello y apoyo la cabeza sobre su hombro, de modo que sus rostros se rozaron.
– ?Quieres que me vaya? -Ella permanecio callada-. ?Faith?
Faith cerro los ojos y nego con la cabeza. No queria que se marchara. Pero tampoco queria que se enterara de lo que estaba pensando para que no saliera huyendo.
Luke le acaricio el brazo mojado y suspiro, tan cerca de su oido que hizo que se le pusiera la piel de gallina.
– Te he sacado del bano.
Ella asintio.
– No quiero convencerte de nada -susurro.
Faith se volvio y apoyo las manos contra la puerta para no tocar a Luke.
– Fue idea mia.
– Si -sonrio el-. Entonces, ?por que me da la sensacion de que has cambiado de opinion?
Faith habia cambiado de opinion. Ya no solo queria sexo salvaje durante los fines de semana, sino algo mas, pero ?como iba a decirselo a un hombre que solo se comprometia con sus pacientes? No podia explicarselo, asi de sencillo.
– Todavia te deseo -susurro ella.
Al oir sus palabras, los ojos de Luke se encendieron con ardor. El saco el buscapersonas del bolsillo y lo tiro sobre el sofa. Despues, hizo lo mismo con el telefono movil.
Ella lo miro y se acerco al telefono portatil que estaba en la mesa. Lo agarro y lo escondio bajo un almohadon. Al cabo de un momento, hizo lo mismo con el telefono de Luke y su buscapersonas.
El sonrio.
Ella sonrio tambien, y se lanzo a sus brazos.
– Nunca me habia reido mientras desnudaba a una mujer -admitio, y le mordisqueo el cuello.
Ella echo la cabeza hacia atras para dejarle espacio.
– No vas a tener que trabajar duro para desnudarme.
– ?No? -miro la toalla.
– No -se quito la toalla y la dejo caer al suelo.
Luke respiro hondo y se quito la camisa con las manos temblorosas.
– Todavia te llevo ventaja -dijo ella, desnuda, contemplando su torso musculoso cubierto de vello varonil.
– Lo se -dijo el. Se quito los zapatos, se desabrocho los pantalones y dejo visible su ereccion.
– Oh, cielos -susurro ella, incapaz de retirar la mirada. Hacia mucho tiempo que no veia un hombre en una situacion como esa.
Luke la rodeo con los brazos y la aupo. Ella se humedecio los labios y se fijo en su boca.
– ?Vamos a…?
– Si.
?En mi habitacion?
– Si.
– ?Esta vez vamos a llegar hasta el final?
– Sin duda. ?Alguna otra pregunta?
– Si. ?Podrias darte prisa?
– A lo mejor la primera vez, pero no la segunda. Ni la tercera -se encamino por el pasillo-. Te quiero en la cama, Faith. Tumbada, de manera que pueda acariciar y besar todo tu cuerpo -la dejo en la cama y le acaricio el entrecejo. Oh-oh. Parece que estas un poco tensa -le acaricio las piernas-. Eso no me gusta -cuando llego a la altura de los muslos, ella se estremecio-. ?Tienes frio? -ella nego con la cabeza-. Bien -con cuidado, le separo las piernas y respiro hondo.
Ella tambien.
Continuo recorriendo su cuerpo con las manos, hasta llegar a la parte superior de los muslos. Faith arqueo el cuerpo, y cuando el toco el centro de su feminidad, gimio de placer.
– Eres preciosa, perfecta -con cuidado, inclino la cabeza.
Ella sintio su calida respiracion y se quedo paralizada. De pronto, se sentia insegura.
– Um, Luke…
– Shh…
– Pero… -al primer roce de su lengua sintio que iba a estallar.
Al segundo, estallo.
Luces brillantes, el corazon a punto de salirsele del pecho, eso es lo que sentia mientras experimentaba un orgasmo salvaje.
Finalmente, quedo tendida sobre la espalda, mirando al techo, agarrando las sabanas y con las piernas abiertas por los hombros de Luke.
