mismo asesino. No queria ni siquiera considerar el hecho de que podia haber mas de ellos ahi fuera.
– Necesitamos llegar hasta la ultima victima. Coge los sandwiches y los comeremos en el coche.
Lo hizo, y rapidamente cogieron los abrigos y salieron de la casa.
Simone maldijo mientras se daba cuenta de que no tenia coche…
Lo habian dejado en Toulouse cuando habian ido a la tienda de Liza.
Estaba volviendose hacia Xypher cuando capto algo extrano en el viento. Era un ligero olor a almizcle… No era familiar. Levantando la cabeza, inhalo profundamente tratando de identificarlo, luego se avergonzo de lo que habia hecho.
– No soy parte perro ahora, ?verdad?
Xypher rio.
– No, pero tus glandulas olfativas, como todo lo demas, son mas sensibles. Puedes oler un espectro mas ancho que antes. Por esa razon, querrias evitar Bourbon Street.
– Gracias. Por un minuto, tuve miedo de que me fuera a volver alguna clase de lunatica oledora de entrepiernas.
El aspiro bruscamente.
– Sabes, es la ereccion mas rapida que he tenido nunca.
Simone hizo una pausa mientras se daba cuenta de que ahora podia sentir la dolorosa pesadez de su ingle.
– Si, -dijo, su voz una octava mas profunda-. Es normal, tambien.
– No estoy segura de que me guste esta renovacion mia.
– Confia en mi, nena. Te va a gustar el sexo demoniaco mucho mas que el humano. Puedo mostrarte cosas que haran que tu cabeza gire como la de Linda Blair [12] .
Le echo una mirada indignada.
– Esa no es forma de meterse en mis bragas, Xypher. ?Ew! Malas imagenes.
Antes de que Xypher pudiera responder, el olor se intensifico. Simone se giro para ver a un hombre alto y rubio a comienzos de la veintena viniendo hacia ellos. Algo en sus rasgos le recordo a Dev del Santuario.
– Licantropo.
La palabra salio como un bajo grunido.
Xypher asintio.
– Los demonios se tienen una antipatia antinatural los unos de los otros. Puede ser superada, pero no es facil. Los Were-Hunters son una rama de sus primos Daimon, que es el por que estas sintiendo esa rafaga de adrenalina que te hace querer atacarle. Es tu instinto proporcionandote un estimulo extra en caso de que tengas que luchar.
El hombre se detuvo mientras les miraba. Ladeo la cabeza como si pudiera sentirles de la misma manera que podian sentirle a el.
– ?Peltier? -llamo Xypher.
Fue hacia ellos lentamente, midiendoles con cada paso.
– Kyle. Soy el mas joven.
Xypher estrecho su mirada sobre el.
– ?Que estas haciendo aqui?
– Estaba visitando a un amigo.
Xypher no estaba seguro sobre eso. Pero claro, la sospecha era su segundo nombre.
– Eres un Katagaria en forma humana durante las horas de luz… como es que…-Paro mientras entendia.
Los Katagaria eran animales que podian tomar forma humana. Durante la luz del dia, especialmente mientras eran tan jovenes como este Were, estaban relegados a su forma animal hasta que el sol se ponia.
Kyle Peltier era mas de lo que parecia.
– Ha sido agradable encontrarte, Kyle, -dijo Xypher secamente-. Dale recuerdos a Carson.
– Lo hare. -Dijo Kyle antes de dirigirse por la calle hasta donde una moto Ninja esperaba. Monto y arranco sin mirar atras.
– ?Que no me estas contando? -Pregunto Simone.
– No estoy seguro. Es una sensacion extrana… -Pero no podia situarla. Sinceramente, se sentia como un Dimme, pero no tenia sentido. Si el Dimme era algo como sus primos Gallu, ella habria estado buscando en lugares oscuros durante las horas diurnas. No aqui fuera en casa abiertas y definitivamente no estaria cerca de un Katagaria.
Tan pronto como la Dimme hubiera captado el olor, habria salido corriendo.
Sacudio la cabeza para aclararse. Tenia que estar imaginando cosas.
Empujando esos pensamientos fuera, se volvio hacia Simone.
– Ok, tengo todos mis poderes intactos. No se adonde vamos, pero tu si ?correcto?
– Si.
Bien. Iba a mostrarle como transportarse a traves del cosmos con sus poderes. Con un poco de suerte, no acabarian en Alaska.
– Piensa en el lugar a donde vamos. Imaginalo perfectamente en tu mente.
Ella lo hizo.
Xypher la envolvio en sus brazos y cerro los ojos. Un instante despues, estaban en las sombras de un callejon. Oia a la policia hablando entre ellos, vio al fotografo y a Tate moviendose alrededor de un cuerpo cubierto.
Echo una ojeada alrededor para asegurarse de que no serian vistos antes de solidificarse.
Una lenta sonrisa se extendio por la cara de Simone.
– ?He podido hacerlo yo sola?
– Podras hacerlo. Pero llevara un monton de practica. Y se cuidadosa haciendolo. A veces tus ropas se quedan atras.
Su cara palidecio.
– Eso seria increiblemente malo.
– Para ti, si. ?Para mi? Se me pone la piel de gallina. -La barrio con una mirada caliente que encendio su sangre.
Pero no le dejaria saberlo.
Sonriendo ampliamente, malvadamente, le dio un sandwich, luego se dirigieron hacia Tate quien les miraba desde donde estaba situado el cuerpo.
Tate fruncio el ceno ante su comida.
– ?Comer en la escena de un crimen?
Haciendo una mueca ante la salpicadura de sangre en las paredes de alrededor y a la sangre en la calle, Simone le devolvio el sandwich a Xypher.
– No voy a comer.
Tate la miro boquiabierto.
– Uauh, finalmente eres sensible. Jamas supe si esa parte estaba en ti.
Simone estaba sorprendida tambien. Siempre habia estado orgullosa de no ponerse enferma en las escenas de crimenes. Pero el olor de la sangre seca era fetido para su nariz. El color era una sombra mas profunda de lo normal. Era casi como si pudiera saborear la sangre y marearla extremadamente.
A Xypher por otra parte no le afectaba en absoluto.
– Asi que, ?que tenemos? -pregunto ella, respirando profundamente asi no perderia la dignidad.
Tate dejo salir un largo y cansado aliento.
– Bien, su cabeza esta perdida asi que no creo que tengamos que preocuparnos por si se levanta y anda otra vez. Esto no es Sleepy Hollow.
Xypher fruncio el ceno.
– ?Sleepy Hollow?
Simone sacudio la cabeza.
– Una famosa historia sobre un jinete sin cabeza que cazaba victimas.
– Eso es enfermo.
Simone arqueo una ceja.