lamiendo y chupando.
La respiracion de Emily se volvio cada vez mas jadeante y sus movimientos mas freneticos. Cuando Logan sintio que ella estaba a punto de llegar al extasis, introdujo dos dedos en su interior y succiono el excitado boton que coronaba el sensible sexo de la joven.
Emily lanzo un grito de asombro y se aferro a los hombros de Logan mientras palpitaba en torno a sus dedos. El levanto la cabeza y supo que jamas habia visto nada mas bello, erotico o excitante que Emily poseida por la pasion.
Cuando los espasmos de la joven se apaciguaron, las crueles exigencias de su cuerpo abrumaron a Logan. Retiro los dedos de su sexo y, antes de que pudiera pensar en las innumerables razones por las que no deberia hacer aquello, se deslizo sobre ella y coloco su ereccion en la calida cuna de sus muslos.
Respirando entrecortadamente, se apoyo en los codos y bajo la mirada. Su miembro estaba entre ellos, anidado contra el monte de Venus de Emily. El deseo -desnudo, salvaje, implacable y diferente a cualquier cosa que hubiera experimentado antes -martilleaba en su cuerpo, arrancandole hasta el ultimo vestigio de pensamiento coherente. Tenia que poner fin a esa tortura. Tenia que hundirse en aquella calida y cenida funda. Tenia que sentir como aquella aterciopelada suavidad le rodeaba. Terminar con aquella profunda soledad, con aquella dolorosa necesidad que le obsesionaba desde hacia tres meses.
Cerro los ojos y se rozo contra ella. Fragmentos de oscuro placer lo atravesaron como un rayo y, con el corazon retumbandole en el pecho, se dispuso a penetrar en ella. En ese momento se quedo paralizado ante la increible sensacion de los dedos de Emily cerrandose en torno a su miembro. Abrio los ojos y bajo la vista. Vio que sus dedos palidos le acariciaban. Levanto la mirada hacia su rostro. Los hermosos ojos de la joven todavia mostraban la expresion nublada de una mujer satisfecha, y Logan se ahogo en esa mirada.
Emily volvio a acariciarlo y el no pudo evitar empujar contra esa mano. Habia pasado demasiado tiempo y habia estado al borde del extasis lo que le parecia una eternidad, por lo que no pudo contenerse ni un instante mas. Empujo de nuevo y se estremecio ante el climax que le atraveso, atormentando su cuerpo con una oleada de convulsiones.
Cuando finalmente cesaron, Logan apoyo su frente en la de ella y lucho por controlar su jadeante respiracion. Por controlarse a si mismo. Durante varios largos segundos inhalo la esencia de Emily que se estremecia bajo el.
Entonces la realidad -y el sentido comun -regresaron con la fuerza de un golpe en la cabeza. Logan se quedo paralizado.
Maldita sea, ?que condenada locura le habia poseido? Si ella no le hubiera tocado, y si el no se hubiera derramado en consecuencia, habria arrebatado la virginidad a la joven. Sin duda alguna, habia comprometido su reputacion por completo.
Logan no era un hombre temerario, pero habia algo en Emily que le hacia sentir de esa manera. Que lo impulsaba a actuar de ese modo. Que le hacia decir y hacer cosas que normalmente no haria. No era perfecto, pero intentaba vivir honradamente y, desde luego, no tenia la costumbre de ir levantandoles las faldas a jovenes inocentes.
Se aparto de ella con un gemido, dando un respingo para sus adentros al ver la prueba de su liberacion brillando sobre el vientre de Emily. No habia sufrido tal perdida de control desde que era un muchacho imberbe. Pero tenia que agradecer a Dios que la caricia de Emily hubiera provocado eso, pues, de otra manera, ella habria dejado de ser virgen. Aunque tecnicamente seguia siendolo, Emily habia perdido gran parte de la inocencia en sus manos. Y en su boca. Y, por lo que a el concernia, el hecho de que no hubiera completado el acto dentro de su cuerpo era irrelevante. Su intencion habia sido hacerlo, y habia estado a un suspiro de penetrarla.
Se culpo a si mismo. ?Que demonios le pasaba? Pero incluso mientras se hacia esa pregunta, ya sabia la respuesta. Emily era lo que le pasaba, esa mujer a la que deseaba con una pasion que no entendia ni habia sentido antes. Pero a pesar de saberlo se sentia culpable y responsable por sus propias acciones. No era culpa de ella que casi le dejara paralizado por la lujuria. Emily era una educada joven de la aristocracia, y el se habia abalanzado sobre ella con una absoluta falta de delicadeza, tratandola como si fuera una furcia barata.
Le palpito un musculo en la mandibula y, sin mas contemplaciones, alargo el brazo para coger su chaqueta y saco un panuelo del bolsillo. Emily se incorporo sobre los codos y observo en silencio como el le limpiaba la prueba de su pasion. Cuando termino, Logan le alzo el corpino para cubrirle los pechos y le bajo las faldas hasta los tobillos. Luego le tendio los arrugados calzones. Cogio la camisa y se puso en pie. Le dio la espalda para que la joven acabara de arreglarse con un minimo de intimidad.
Despues de meterse la camisa por la cabeza, se la remetio en el pantalon y se lo abrocho. Acababa de ponerse la chaqueta cuando oyo el susurro de las faldas de Emily a su espalda. Respiro hondo y se dio la vuelta.
La imagen de la joven con el pelo despeinado, los labios hinchados por sus besos y los ojos enormes, le encogio en corazon. Y le hizo sentir todavia mas bastardo de lo que ya se sentia.
– Senor Jennsen… ?Esta… bien?
Logan se rio sin humor.
– Despues de lo que acaba de ocurrir entre nosotros, ?no crees que podrias tutearme y llamarme Logan? Porque yo si tengo intencion de llamarte Emily.
Ella se humedecio los labios y asintio con la cabeza.
– Muy bien, Logan. ?Estas… bien?
Aquella pregunta inflamo su temperamento, llenandolo de rabia, pero mas por si mismo que por ella. Por haber permitido que la situacion se descontrolara de esa manera. Por haber perdido el control. Por olvidarse de todo excepto de ella, y de la fogosa pasion y el profundo deseo que la joven le inspiraba. Habia sido un error entrar en la casa, una equivocacion entrar en la biblioteca. Habia sido incorrecto tocarla. Lo sabia, pero lo habia hecho de todas maneras. Y ahora tenia que pagar las consecuencias.
Y a un precio elevado.
– En realidad no, no estoy bien.
– Si. De eso ya me doy cuenta. ?Estas… enfadado?
Logan asintio con la cabeza.
– Lo estoy, pero no contigo. Solo conmigo mismo.
– Porque lamentas lo que ha ocurrido entre nosotros.
No era una pregunta, y el no podia negarlo. Pero de alguna manera era incapaz de decirle que lamentaba haberla tocado. Besado. Sentirla derretirse entre sus brazos. Logan se paso las manos por la cara. Santo Dios, realmente estaba perdiendo el juicio.
– ?Donde aprendiste a besar de esa manera? -se limito a preguntar porque no estaba preparado para decir lo que tenia que decir.
– He leido mucho sobre el tema.
– ?Leido? Santo Dios, ?los britanicos teneis manuales sobre esto?
– No, pero suelo leer sobre besos y todo lo relacionado con eso en los libros de la Sociedad Literaria de Damas. -Antes de que el pudiera pensar una respuesta, Emily agrego: -Y he aprendido de ti.
– Pues eres muy buena, seguro que ha habido otros.
– No. -Emily alzo la barbilla como si lo desafiara a dudar de ella. -Solo tu.
Algo que se parecia mucho al alivio inundo a Logan. «Solo tu.» Pero aquellas palabras solo servian para reforzar la decision que habia tomado. Algo que el jamas habria hecho por ninguna razon y que no tendria que hacer ahora si se hubiera limitado a quedarse en el infierno helado de ahi fuera. Pero no. En lugar de eso habia entrado en la biblioteca o en lo que simplemente deberia llamarse el maldito Templo de la Tentacion.
– Ya veo. -Logan se aclaro la garganta, tomo aire y dio un paso hacia ella. Extendio los brazos y tomo las manos entre las suyas y, por razones que no podia entender, se sintio mejor ahora que la estaba tocando. Mirandola fijamente, le dijo: -No era mi intencion que las cosas llegaran tan lejos.
Ella miro al suelo y asintio con la cabeza.
– La mia tampoco. -Volvio a levantar la mirada y, cuando sus ojos se encontraron, Logan sintio un vuelco en el corazon. -Pero cuando comenzaste a besarme… a tocarme… -Emily se encogio de hombros en un gesto impotente. -No estoy segura de que fue lo que paso.
Una sensacion de jubilo, de agradecimiento por que no le hubiera ocurrido solo el, lo atraveso, irritandolo aun mas.