clavo la mirada en una cajita ovalada de esmalte. La imagen de Emily estaba pintada en la parte superior.

– Abrela -dijo ella.

El lo hizo y sonrio al ver las nueces cubiertas de azucar y canela que habia dentro. El olor que desprendian hizo que la mente de Logan se llenara al instante con imagenes eroticas de la noche en la que le habia dado a probar una de aquellas delicias. Imagenes de su boca en la de ella. De las manos de Emily sobre su…

Logan respiro hondo. Santo Dios, si que hacia calor alli dentro.

– Forma parte de mi coleccion de cajitas esmaltadas. Pense que podria gustarte. Y que te vendria bien, asi no te olvidaras de mi.

Logan habria soltado una carcajada si el nudo de emocion que le atascaba la garganta se lo hubiera permitido. Su esposa… Su hermosa, atenta y deseable esposa hacia que quisiera arrodillarse a sus pies. Rozo la bella imagen con el dedo, imaginando que tocaba su tersa piel.

– No hay ninguna posibilidad de que me olvide de ti. Me gusta. Muchisimo. Gracias. -Se metio el regalo en el bolsillo antes de volver a hablar. -No sabia que coleccionabas cajitas de esmalte.

– Creo que hay muchas cosas que desconocemos el uno del otro.

Bien sabia Dios que habia cosas sobre el que ella desconocia. Cosas que deberia decirle, que deseaba decirle, aunque no estaba seguro de si podria hacerlo.

– Tenemos tiempo de sobra para conocernos mejor -dijo el tras aclararse la garganta.

Y eso, claro esta, era lo unico que podia decir por el momento. A menos que no le importase farfullar «te deseo tanto que apenas puedo contenerme». Maldicion, se sentia como si tuviera que morder un trozo de cuero para aliviar el dolor que le producia la intensa necesidad que recorria su cuerpo. El silencio se extendio entre ellos, y Logan se estrujo el cerebro buscando desesperadamente algo que decir, pero no, por mucho que lo intentara lo unico que podia pensar era «te deseo tanto que apenas puedo contenerme».

Tras un momento, la sonrisa de Emily se desvanecio.

– ?Te encuentras bien Logan?

«No. Porque te deseo tanto que apenas puedo contenerme.» Logan trago saliva y asintio con la cabeza.

– Perfectamente. -Aquella unica palabra sono ronca y entrecortada.

El ceno fruncido de Emily se hizo aun mas profundo.

– ?Estas seguro? Pareces… congestionado. -La joven se quito el guante y alargo la mano para tocarle la frente. El inspiro bruscamente y cerro los ojos de golpe.

– Santo Dios, estas ardiendo -dijo ella con la voz cargada de preocupacion.

«No tienes ni la menor idea.» Logan abrio los ojos. Obviamente, Emily percibio el deseo ardiente que sentia por ella, pues en el mismo momento en que sus miradas se encontraron, sus ojos se abrieron como platos y se quedo paralizada.

– Oh -susurro. -Vuelves a tener esa mirada.

Logan podia sentir como todas sus buenas intenciones se desvanecian. Incapaz de contenerse, le capturo la mano. Se la llevo a la boca. Inhalo. Santo Dios, Emily olia condenadamente bien.

– ?A que mirada te refieres?

– A la que tenias cuando me tumbaste en el suelo de la biblioteca en casa de mis padres. La misma que tenias ayer cuando me dijiste que querias arrancarme la ropa con los dientes.

El le dio un beso en la palma de la mano y contuvo un gemido. Dios, le encantaba el tacto de su piel.

– Ya veo. ?Es eso un… problema?

– No. -Emily centro la mirada en la boca que el apretaba contra su mano. -Lo cierto es que me resulta… -Su voz se desvanecio cuando el le rozo la palma con la lengua. Dios, sabia tan condenadamente bien…

– ?Te resulta que?

Emily busco su mirada.

– Excitante.

A Logan se le disparo el pulso.

– ?Como de excitante?

Ella se removio en el asiento. La mirada de el bajo a sus pechos. Los duros pezones presionaban contra la fina muselina del vestido haciendola parecer un angel lascivo y pecaminoso.

– Insoportablemente excitante.

La ereccion de Logan palpito dentro de los pantalones al escuchar su ronca admision. Santo Dios, a ese paso no sobreviviria al trayecto en el carruaje.

– He leido tu relato -murmuro el contra su mano.

Un cauto interes asomo en los ojos de Emily.

– ?Ah, si?

Cuando ella no dijo nada mas, el le pregunto:

– ?No quieres conocer mi opinion?

– Solo si quieres decirmela.

– ?Quieres que te diga la verdad?

– Por supuesto.

– Muy bien. Me ha resultado… sorprendente.

Una combinacion de dolor e irritacion brillo brevemente en los ojos de Emily que arqueo una ceja.

– ?Por que? ?Pensabas que no sabia escribir?

– No, escribes muy bien. Fue el contenido lo que me resulto sorprendente. Y sumamente… excitante. Cuando lei la escena donde la mujer vampiro seduce a su pareja, senti que se me nublaban los ojos de deseo. -Si, y se habia puesto duro como una roca. De hecho, tenia la impresion de que seguia duro desde entonces. -?Como es que conoces ese tipo de cosas?

– Quiza deberias agradecerselo a la Sociedad Literaria de Damas Londinenses.

El le mordisqueo la punta del dedo indice.

– Lo pensare.

Ahora parecia que eran los ojos de Emily los que se nublaban.

– Por supuesto, nunca he experimentado realmente la mayoria de las cosas que hace mi mujer vampiro.

– Te prometo que eso lo resolveremos pronto.

Un llamativo rubor cubrio las mejillas de Emily.

– Bueno. Pero me he imaginado haciendolas -se humedecio los labios -contigo.

Logan apreto los clientes ante el doloroso palpito en su ingle. Miro por la ventanilla y vio que al menos faltaban otros diez minutos para llegar a casa. Pero el no se veia capaz de aguantar ni diez segundos mas.

– No hay nada como aprovechar el tiempo -murmuro. Estiro los brazos para cerrar las cortinas y arranco a Emily del asiento como si fuera una margarita, sentandola en su regazo. -No puedo pasar mas tiempo sin tocarte -susurro contra la exuberante boca femenina. -No puedo esperar ni un segundo mas.

Logan le cubrio los labios con los suyos en un beso que pretendia ser breve, solo un suave roce para calmar un poco su deseo. Y habria tenido exito si ella hubiera permanecido docil entre sus brazos. Pero su esposa abrio la boca y le paso la lengua por el labio inferior.

Logan bien podria haber sido un barril de polvora que entrara en contacto con un fosforo. Su control se hizo anicos y, emitiendo un profundo grunido, la beso con todo el anhelo reprimido, el profundo deseo y la necesidad que lo inundaban, explorando con la lengua la deliciosa calidez de su boca. Le rozo el duro pezon por encima de la suave muselina del vestido mientras deslizaba la otra mano bajo el dobladillo para acariciarle la pantorrilla y el muslo.

– Separa las piernas. -Las palabras sonaron roncas contra su boca. Con la respiracion entrecortada, ella hizo lo que le pedia y se quedo sin aliento cuando sintio como los dedos de Logan se deslizaban sobre sus pliegues femeninos. El se humedecio las yemas con los jugos de la joven y los deslizo en su interior. -Estas muy mojada.

Emily gimio y separo aun mas las piernas.

– Siento que estoy asi todo el tiempo. Solo tengo que pensar en ti y… -La voz de la joven se desvanecio con un ronco gemido cuando el retiro los dedos y comenzo a juguetear con el sensible boton entre sus piernas.

– ?Te sientes mojada?

– Si… Y caliente. Como si estuviera ardiendo por dentro y tuviera la piel tensa. Yo… oh, Dios mio. Que bien me hace sentir eso… -dijo ella sin aliento, arqueandose contra la mano de Logan. -Es increible.

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