– Supongo que se morira -dijo Sam con tristeza, y agarro la caja como si fueran los ultimos minutos de vida para Lionel-. Todo se muere.
Jackson miro a Molly y esta se encogio de hombros.
– Los padres de Sam murieron en un accidente de coche hace seis meses -le dijo. Le habria gustado advertirselo a Jackson, pero ya no era posible-. Desde entonces, su vision de la vida es muy pesimista.
Jackson asintio y dijo:
– Lo comprendo. Siento lo de tu familia, Sam.
– Le he dicho a Sam que puede que Lionel viva muchos anos.
– Yo tuve una rana cuando tenia ocho anos -dijo Jackson pensativo y enfrentandose a la situacion con aplomo-. Vivio dos anos conmigo y despues se escapo en busca de un rana hembra. Quiza Lionel haga lo mismo.
Sam lo miro con incredulidad. Se hizo un silencio.
«Que arranque el helicoptero», pense Molly. El silencio era desesperante. Pero Jackson y Sam se miraban como si fueran dos contrincantes en un ring de boxeo.
– Sam, te dire algo mas que quiza te guste saber -miro al nino a los ojos. Molly quedaba completamente excluida. Jackson solo se centraba en Sam-. Cuando yo tenia diez anos, mi madre murio -le dijo-. Yo pense que habia llegado el fin del mundo, y, como tu, esperaba que todo lo que me rodeaba muriera tambien. Espere y espere, aterrorizado. Pero ?sabes que? No murio nadie mas hasta que cumpli veintiocho anos. Un vejestorio.
Sam se quedo callado un momento. Al final, dijo:
– Veintiocho es la edad que tiene Molly.
Jackson miro a Molly y ella percibio una sonrisa tras su seria mirada.
– Ya te lo he dicho. Un vejestorio. Mi abuelo murio cuando yo tenia veintiocho anos, pero entre los diez y los veintiocho no murio nadie. Ni siquiera una rana.
– ?De veras?
– De veras -sonrio el-. Asi que a lo mejor tambien tienes esa suerte.
– A lo mejor no.
– Pero a lo mejor si.
Sam se quedo pensativo.
– Solo me queda Molly. Y Lionel.
– A mi me parece que los dos estan muy sanos.
– Si…
– ?Los alimentas bien? Lionel parece rellenito, y Molly tambien.
– ?Hey! -exclamo Molly, pero no le importaba lo que habia oido. Era la primera vez que sentia que Sam se relajaba-. Eso es una tonteria -dijo esbozando una sonrisa.
– Comer bien es importante -dijo Jackson-. No puede pasarse por alto. Eso, y hacer mucho ejercicio. Espero que no dejes que Molly vea mucho la television.
Sam estaba sonriendo y la tension habia desaparecido como si hubieran hecho magia.
– Le gustan los programas de amor y esas cosas.
– Eso es muy poco saludable. Yo lo pararia de golpe.
– Jackson puso una sonrisa tan amplia que Molly supo enseguida por que las mujeres se enamoraban de el. ?Por como estaba tratando a Sam ella tambien estaba a punto de enamorarse! ?Deseaba abrazar a aquel hombre!-. ?Quieres entrar en mi helicoptero? -le pregunto Jackson al nino tendiendole la mano.
Sam se quedo pensativo durante un instante, y despues, como si hubiera tomado una importante decision, le dio la mano a Jackson.
– Si, por favor -le dijo.
Molly no podia dejar de sonreir. Jackson, se fijo en su sonrisa y penso: «va a ser un fin de semana estupendo».
El no esperaba tanta eficiencia. Desde el momento en que entro en la oficina de Trevor Farr, Jackson sospecho que si queria averiguar algo sobre la propiedad de Hannah Copeland, tendria que averiguarlo el mismo. Pero la preparacion de Molly lo sorprendio gratamente. Tan pronto como despego el helicoptero, ella le entrego las escrituras, el plano de obra, la lista de empleados…
– ?Como ha conseguido todo esto?
– Hacemos lo mismo para todos nuestros clientes.
– ?Y por que sera que no me lo creo?
Ella lo miro con una media sonrisa. En realidad, aquella era el tipo de propiedad que a ella le gustaba vender… una granja con mucho terreno. Habia estado trabajando hasta las tres de la manana, pero habia conseguido hacerle a Jackson una presentacion de primera. Como en los viejos tiempos.
– Deje de ponerme en entredicho y lea -le ordeno ella, y el obedecio. Pero cada vez estaba mas pendiente de Sam y de Molly. Parecian una mujer y un nino enfrentandose al mundo, y su presencia lo afectaba como hacia mucho que no lo afectaba nada.
«Solo es una relacion de negocios», se recordo, «y Sam no tiene nada que ver conmigo».
La granja de Copeland era un lugar maravilloso. El piloto sobrevolo una amplia extension de tierra. La finca comenzaba en una zona estrecha y se expandia en una vasta lengua de tierra que llegaba hasta el mar.
– Toda la lengua de tierra pertenece a la granja -le dijo Molly, y el sonrio y le mostro el mapa que ella le habia dado.
Pero ni los mapas ni las fotos hacian justicia al lugar. El mar rodeaba la tierra con su agua azulada. La playa era de arena dorada, y las colinas y las praderas, con los animales pastando placidamente, parecian lugares exuberantes y maravillosos.
Desde el helicoptero se veian torrentes de agua que bajaban hasta el mar entre los arboles. Tambien habia cascadas y pequenos islotes. Cuando descendieron hacia tierra, vieron como un grupo de canguros saltaba para ponerse a cubierto, y Jackson penso, «esto es el paraiso».
Aunque fuera un lugar paradisiaco, no podia olvidar que era un negocio. Era el futuro para Cara y para el. No podia tomar decisiones con el corazon, debia tomarlas con la cabeza.
– Parece que esta bien conservado -dijo el, pero su comentario le parecio ridiculo. Miro a Molly y a Sam y se percato de que ambos lo miraban asombrados.
– ?No has visto esa cascada? -pregunto Sam-. ?Es maravillosa? ?No crees que es maravillosa?
– Maravillosa -admitio el, y Molly sonrio.
– Con Sam aqui, no tengo que hacer de vendedora -miro como la helice del helicoptero se detenia-. Es mas, creo que no tengo que hacer de vendedora en ningun caso. Si tiene el dinero, este lugar se vendera solo -dijo bromeando-, Y si no tiene el dinero, puedo proponerle un plan de financiacion muy interesante.
– Estoy seguro de ello -dijo el con frialdad, pero impresionado. Ella habia hecho sus deberes.
– No hay ninguna otra propiedad como esta en el mercado australiano -le dijo ella-. No se para que quiere este Sitio… pero sea para lo que sea, estoy segura de que Birranginbil cubrira sus necesidades.
– ?Birranginbil?
– ?No sabe que Birranginbil es el nombre de la granja? -sonrio ella-. Ahora, pregunteme por que no lo he puesto en letras grandes al principio de la presentacion que le he entregado.
El la miro pensativo, Parecia que tenia mucha seguridad en si misma y, de pronto, se le ocurrio que Molly estaba haciendo algo que le encantaba. A pesar de que Trevor fuera espantoso, la mujer que trabajaba con el era una autentica profesional.
Jackson sonrio y se unio al juego.
– Bueno, digame lo que significa.
– Lugar de sanguijuelas -se rio al ver la expresion de su rostro, y la de Sam-. ?No me diga que tiene miedo de unas pocas sanguijuelas! -ella rebusco en su bolso y saco una pequena lata-. Hay que ir preparado. Eso es lo que nos ensenaron en la escuela de venta inmobiliaria. Sal. Si hay sanguijuelas, con esto estoy preparada para enfrentarme a ellas.
– ?Guau! -el estaba cada vez mas impresionado. ?Era muy buena vendedora!
– ?De verdad que hay sanguijuelas? -pregunto Sam con voz temblorosa y Molly lo abrazo.
– Si, pero solo en lo profundo del pantano. Los estuarios de alrededor de la playa estan limpios, y los embalses que hay cerca de la casa son perfectos para nadar.
