que auguraba calor. Perfecto para las fotografias.
De Courtney y Alex no habia ni rastro, pero Katie confiaba en que estuvieran por ahi, haciendo el amor como locos para reconciliarse. Cualquier cosa con tal de que la boda siguiera adelante.
– Estas frunciendo el ceno -dijo Jackson, acercandose a ella por la espalda y rodeandola con los brazos.
– Estoy pensando que Courtney y Alex estan locos. ?No deberian haber resuelto sus problemas antes de pensar en casarse?
– Seria lo logico, pero no -Jackson le quito el portafolios de las manos-. ?Que tal van los preparativos?
– Estoy haciendo grandes progresos -lo miro, y luego aparto la mirada-. Ariel se ha ido.
Jackson le dio la vuelta para que lo mirara.
– Tienes que olvidarte de Ariel. Yo ya lo he hecho.
– Pero es tan…
– ?Si?
Le resultaba imposible pensar cuando el la miraba a los ojos asi. Como si ella fuera interesante e irresistible y, en fin, maravillosa.
– ?Como eras de pequeno? -pregunto.
– Solitario -le puso un mechon de pelo detras de la oreja-. Me gustaban los ordenadores mas que la gente y siempre estaba encerrado en mi habitacion. Mi madre intento de todo para que jugara con los ninos del vecindario, pero a mi no me interesaba. No me sentia a gusto, ni sabia que decir para que me aceptaran.
– ?Mucho cerebro y pocas habilidades sociales?
– Exacto. Entre en la universidad a los dieciseis anos.
– El verano que nos conocimos -dijo ella, burlona-. Cuando estuviste tan encantador.
– Tu me amenazaste.
– Por puro orgullo.
El esbozo una sonrisa.
– Si le hubiera hecho caso a mi corazon en aquel momento…
Ella se rio.
– Vamos, por favor. Yo no te interesaba.
– Hubo una chispa.
– Mas bien un rayo laser de odio.
– Quizas habria sido preferible que nuestras madres esperaran para presentarnos.
Katie asintio y luego aparto la mirada. ?Como habrian sido las cosas si Jackson y ella se hubieran conocido mas tarde? ?Despues de que ella saliera del instituto, o durante su primer curso en la universidad, cuando era ya mas guapa y mas delgada, y le interesaban mas los chicos?
– Me habrias impresionado -reconocio.
– Tu a mi tambien.
Jackson se inclino como si fuera a besarla. Katie se relajo en sus brazos. Pero antes de que pudiera dejarse llevar, oyo una risa conocida.
– La tia Tully -musito-. Se supone que tengo que impedir que se acerque a Bruce.
Por lo visto, los padres del novio no habian resuelto sus problemas. Katie ignoraba si Tully y Bruce se habian limitado a coquetear o habian llegado a mayores. Y, sinceramente, tampoco queria averiguarlo.
Se oyeron pisadas en el patio. Katie se volvio y vio a una pareja abrazandose apasionadamente. Estaban a varios metros de distancia, pero se veia claramente como se tensaban sus cuerpos, con que ardor se besaban, y con que pasion agarraba el el trasero de Tully.
A Katie le dio un vuelco el estomago.
– Ay, Dios -murmuro-. Esa no es la madre de Alex, ?no?
– Lo siento, pero no. Es Tully, no hay duda.
– ?Que hacemos?
– Son personas adultas.
Katie lo miro.
– ?Estas diciendo que no es responsabilidad nuestra?
– Algo parecido.
– Entonces deberiamos huir.
– Sigilosamente -la tomo de la mano y se la llevo de alli.
En lugar de volver al hotel, rodearon el edificio y cruzaron el camino que llevaba a la rosaleda. Alli habia un emparrado con varias sillas y bancos. Jackson espero a que se sentara en un banco; luego acerco una silla y se sento frente a ella. Puso los pies de Katie sobre sus rodillas, le quito los zapatos y comenzo a masajearle los dedos.
– ?Que tal tu rodilla? -pregunto.
– Bien. Un poco agarrotada, pero bien -miro hacia el hotel-. No se si hemos hecho bien dejando asi a Bruce y Tully.
– ?De veras querias meterte en esa conversacion?
– No. Pero la madre de Alex se va a enfadar -sacudio la cabeza-. No, a enfadarse, no. Lo va a pasar mal.
– Estas dando por sentado que es la primera vez.
Katie lo miro.
– Tully hace estas cosas a menudo. Se aprovecha de los hombres.
– No, perdona. No se aprovecha de ellos. Ellos saben lo que hacen. Puede que Tully les muestre algo que desconocian. O puede que la utilicen como una excusa. Pero, en cualquier caso, son responsables de sus actos.
Katie no lo habia pensado.
– Todo el mundo dice que Tully es una fuerza de la naturaleza. Que nadie puede resistirse a ella.
– Yo si.
– Tu eres distinto.
– No. Solo estaba asustado.
Katie se rio.
– ?Insinuas que no es tu tipo?
– Seguramente me mataria. No creo que pudiera aguantar su ritmo.
Siguio masajeando sus pies. Katie sintio que un calorcillo se extendia por su cuerpo; de pronto tenia ganas de confesar sus verdaderos sentimientos. Pero no podia decirle que se estaba enamorando de el. No queria que se asustara.
– Yo creo que saldrias airoso -le dijo.
– Agradezco tu confianza, pero no me interesa esa competicion. Te prefiero a ti.
– Buena respuesta.
Capitulo 10
Despues de unos minutos mas de masaje, Jackson volvio a ponerle los zapatos y se sento junto a ella en el banco. La rodeo con el brazo y ella se acurruco a su lado. Se estaba a gusto alli, penso. Se sentia a salvo.
– Hablame de tu casa -dijo.
– Esta a las afueras de Los Angeles.
– ?No esta en Silicon Valley?
– Intente evitar el cliche -dijo el-. En Los Angeles hay mucha gente con talento, y eso buscaba cuando cree mi empresa.
– ?Llevas mucho tiempo alli?
– Siete anos. Estamos pensando en cambiar de sitio. Queremos mudarnos a una zona mas tranquila. Todo el mundo se esta casando y teniendo hijos. Antes hablabamos de las novedades del ultimo videojuego. Ahora hablamos de parques y colegios.