a imaginar por que ibas tu a querer un cuadro tan horrible que consiste simplemente en un monton de garabatos desordenados.
Nathan alzo los ojos y la inmovilizo con la mirada.
– ?Era exactamente asi? ?El mismo tamano, el mismo numero de garabatos, todos de identica longitud?
– Es lo mas parecido a lo que recuerdo. Me temo que no soy buena pintora.
– Por decirlo de algun modo, si me permites el comentario.
Victoria le lanzo una penetrante mirada.
– Aunque fuera el mismisimo DaVinci, me temo que no preste tanta atencion al dibujo como al contenido de la carta. ?Reconoces el cuadro?
– No, aunque no es de sorprender. Sin duda lo que tu padre dibujo, bajo la apariencia de un cuadro, era un mapa que presumiblemente senalaria la ubicacion de las joyas.
– ?En serio? -Una sensacion de excitacion la recorrio de la cabeza a los pies-. ?Lo supones simplemente porque los mapas ocultos son la clase de cosas que emplean los espias, o lo sabes con certeza?
– Los mapas ocultos son nuestra especialidad, por su puesto -dijo Nathan con tono seco-, pero lo se a ciencia cierta a partir de lo que he podido descifrar de la carta de tu padre.
Ella se inclino sobre el escritorio.
– ?Has descifrado la nota? ?Tan rapido? ?Como lo has conseguido? ?Me ensenaras como lo has hecho? ?Que dice?
Los labios de Nathan se contrajeron ante semejante bateria de preguntas.
– Si, la he descifrado. Y lo he hecho tan deprisa no solo porque la descodificacion era mi punto fuerte, sino porque ademas soy de una brillantez insobrepasable.
– Hum. Siento decirte que la palabra «insobrepasable» no existe, doctor Brillante.
Nathan desestimo el comentario con un gesto de la mano.
– Pues deberia existir. En cuanto a ensenarte como lo he hecho, me temo que no va a ser posible, porque el Manual Oficial del Espia senala claramente que un espia no puede, bajo ningun concepto, por muy engatusado, torturado o besado que sea, revelar ninguno de los codigos empleados por la Corona.
– ?Engatusado, torturado o besado?
Nathan dejo escapar un profundo suspiro.
– Todo ello forma parte de nuestra linea de actuacion, te lo aseguro. En cuanto a lo que decia la nota… -Su voz se apago y su expresion se torno sobria.
– ?Que pasa? -pregunto Victoria al tiempo que una sensacion de temor le recorria la espalda.
Por respuesta, Nathan empujo hacia ella una hoja de papel vitela.
– Aqui tienes el mensaje descodificado. Victoria tiro de la nota hacia ella y leyo las palabras pulcramente escritas.
El corazon de Victoria palpito en lentos y dolorosos latidos y levanto los ojos hacia el.
– ?Sabes si mi padre esta realmente ileso? -pregunto, orgullosa al reparar en la firmeza de su voz.
Nathan la observo durante unos segundos antes de responder.
– ?Realmente? No. Asegura estar bien, y conozco a tu padre, Victoria. De todos los hombres que conozco es sin iluda el que cuenta con mas recursos. Con los anos ha logrado abortar varios ataques pergenados contra el.
Victoria llego a sentir que la sangre se le retiraba del rostro.
– Si lo que pretendes es tranquilizarme sobre su seguridad, no me parece que sea este el modo mas acertado.
– Estoy siendo sincero contigo. Tu padre sabe cuidar de si mismo. Dado que en la nota no indica que este herido, estoy seguro de que no lo esta.
– ?Como se yo que es esto exactamente lo que mi padre codifico en la nota? ?Que no has pasado nada por alto?
La mirada de Nathan parecio atravesarla.
– No tienes forma de saberlo. Si sigues empenada en ayudarme, supongo que simplemente tendras que confiar en mi.
?Confiar en el? ?En un espia? ?Un hombre que se ganaba la vida contando elaboradas mentiras? ?Un hombre que sin duda estaba buscando el modo de encontrar su valija de joyas sin ella? ?Un hombre que podia afectar adversamente su auto control con una simple mirada? ?Que se habia mostrado capaz de aprovecharse del hecho de poder estar a solas con ella? Estaria loca si decidia confiar en el. Aun asi… habia en Nathan algo que le inspiraba confianza y fe. Y, en cuanto al hecho de estar a solas con ella, lo cierto es que su conciencia le exigia reconocer que se habia aprovechado de la situacion tanto como el. Y, al parecer, su padre consideraba a Nathan un hombre digno de confianza. De lo contrario jamas la habria deja do a su cuidado.
La intensa mirada de Nathan la sofoco y bajo la mirada hacia la nota.
– ?Como diantre has descifrado este mensaje a partir de la carta de papa?
– Ya te lo he dicho: soy de una brillantez insobrepasable.
– Querras decir que nada sobrepasa a tu brillantez.
– Exactamente, gracias.
– ?Quien es el tal Baylor?
– Un hombre a sueldo, y lo cierto es que no le preocupaba demasiado quien le contratara… si nosotros o los franceses. Jugaba en ambos bandos y daba su informacion al mejor pagador. Era uno de los hombres mas habilidosos y con menos escrupulos con los que me haya podido encontrar en mi vida. Cuando deje de prestar mis servicios a la Corona, Baylor era buscado tanto por los franceses como por los ingleses.
– ?Como consiguio informacion sobre las joyas? ?Podria haber estado implicado en su desaparicion?
Nathan se encogio de hombros.
– Es posible. Aunque Baylor era como una rata, ocultandose entre las grietas, descubriendo datos y vendiendolos despues a las partes interesadas. Quiza diera con la informacion accidentalmente e intentara venderla cuando tu padre lo encontro.
Victoria miro el dibujo que ella misma habia hecho.
– No se parece a ningun mapa que haya visto.
– ?No puedes recordar nada mas?
Victoria nego despacio con la cabeza.
– No. Creia que era un cuadro de briznas de hierba, aunque segun la nota descifrada, es una formacion rocosa.
– Si, pero ?cual? Hay docenas de ellas en esta finca.
– ?Por donde empezamos entonces?
– Dibujare un mapa cuadriculado de la propiedad y registraremos zona por zona. Y no te permito que hables de esto. Con nadie.
Victoria arqueo las cejas al oir el tono perentorio empleado por Nathan.
– ?Ni con tu hermano ni con lord Alwyck?
– Con nadie.
– Pero ?por que? Ya estan al corriente de la existencia de la nota. Y saben que tambien yo se de su existencia.
– Porque asi lo ha pedido tu padre. -Senalo dos palabras escritas en el extremo inferior de la nota-. «Ve con cuidado» era un codigo secreto entre tu padre y yo. Significa que no debe hablarse del asunto con nadie. -Su mirada se clavo en la de ella-. Desafortunadamente, y dado el estado de las circunstancias, tu ya estas al