El cuerpo de Gracie era tan calido. Noto el dulce aroma de su cuerpo, mezclado con un ligero olor a vainilla.
– Lo siento -susurro ella-. En realidad no estoy tan destrozada.
– Te creo -afirmo el. Le froto suavemente la espalda. Ella le rodeo la cintura con los brazos y lo miro con los ojos llenos de lagrimas. La necesidad que Riley sintio de besarla fue casi insoportable…
– Pam
– ?Como?
– Pam. Acaba de meterse en su coche.
– Oh. ?Oh! -exclamo Gracie, incorporandose-. Tenemos que seguirla.
– Ya estoy en ello.
Riley espero hasta que Pam se hubo puesto en marcha para seguirla.
– Podria ir a cualquier parte -dijo Gracie-. Espero que no se dirija a la autopista. Ya ha oscurecido y podriamos perderla a ella tambien.
– No la perderemos. Pam jamas prestaba mucha atencion cuando iba conduciendo. Dudo que eso haya cambiado.
Despues de algunos minutos, Pam se detuvo en un pequeno motel que habia cerca del mar. Riley aparco al otro lado de la calle.
– ?Por que habra venido aqui? -pregunto Gracie- Oh… ?Crees que va a reunirse aqui con Zeke? ?En un motel? Es tan sordido… Ademas, ?por que no va el simplemente a su casa?
– Reconocerian el coche.
– Ah, claro. Y aqui nadie se fijaria en el.
– Tenemos que comprobarlo.
Los dos se bajaron del coche y se dirigieron al motel. Gracie llevaba la camara en la mano. Avanzaban con cautela, moviendose en las sombras. Cuando estuvieron cerca del edificio, comprobaran que Pam habia salido del coche.
– Debe de haber entrado en una de las habitaciones -dijo Gracie-. Tenemos que descubrir en cual. Podriamos mirar simplemente por las ventanas. Muchas de ellas las tienen abiertas.
– Supongo que la de Pam sera precisamente de las que esten entrecerradas.
– Tienes razon.
Antes de que pudieran tomar una decision, las luces se apagaron de repente. La oscuridad se apodero de ellos de un modo tan repentino que los desconcerto por completo.
– No te muevas -dijo Riley, buscando instintivamente la mano de Gracie- Tenemos que regresar al coche
Los dedos de ella se entrelazaron con los suyos. Riley noto la otra mano en la espalda.
– Guiame tu -susurro-. Yo voy detras de ti…
A pesar de que sabia que debian salir de alli, Riley deseaba darse la vuelta, tomar a Gracie entre sus brazos y besarla hasta que ella perdiera el aliento. Si aquel apagon no le hubiera dado mala espina, habria cedido a sus impulsos.
– Esta aqui -afirmo, mientras se dirigia instintivamente al coche.
Justo en aquel momento la noche exploto con un brillante fogonazo de luz. Riley levanto inconscientemente la mano para repeler un posible ataque pero, inmediatamente, se dio cuenta de que la persona habia desaparecido. Oyo que alguien habia echado a correr y un portazo. Todas las luces del complejo volvieron a encenderse al tiempo que un coche salia rapidamente del aparcamiento.
– ?Que ha sido eso? -pregunto Gracie.
– Alguien acaba de hacernos una foto. Lo que me gustaria saber es quien habra sido y por que.
Capitulo 6
– No he sido yo -afirmo Gracie rapidamente.
– Eso ya lo se. El flash ha saltado delante de nosotros -replico el, con una cierta impaciencia. Entonces fruncio el ceno como si estuviera considerando las posibilidades y la condujo al coche.
Gracie se pregunto si el se habria dado cuenta de que aun iban de la mano. Le gustaba lo calidos y fuertes que eran los dedos de Riley. Si ella estuviera interesada en el, aquel paseo habria sido bastante emocionante. Sin embargo, no habia ni interes ni emocion. Simplemente sentia una vaga curiosidad por lo amable que Riley era con ella y en ocasiones le parecia muy guapo. Nada mas.
Regresaron a su casa. Riley entro con ella sin que Gracie lo invitara, lo que podria haber supuesto un punto mas de emocion. Por supuesto no era asi.
– Quiero saber lo que ha sido eso -dijo el, mientras entraban en la cocina y Gracie empezaba a parar cafe-. ?Nos han tendido una trampa o se trataba simplemente de un tarado al que le ha dado por apagar las luces y sacar fotos para divertirse?
– Las dos posibilidades me parecen completamente alocadas -comento ella, sacando un pequeno pastel-. ?Como nos iban a tender una trampa?
– Tal vez Pam nos condujo a ese motel con un proposito. La foto. Tiene que serlo. ?Y por que?
Riley comenzo a pasear de arriba abajo por la cocina. Entonces se detuvo para estudiar las listas que Gracie tenia prendidos en la pared.
– ?Que es esto? -le pregunto-. Trescientos sesenta puntos. Setenta rosas, diecisiete pequenas, veintitres medianas y treinta grandes -dijo, leyendo la lista
– Es lo que tengo que hacer para un pastel que tengo que preparar esta semana -respondio ella, mostrandole un dibujo del pastel en cuestion-. Es ay sencillo. Solo son tres pisos adornados con puntos y rosas. Yo siempre hago los adornos primero. El pastel es lo mas facil.
– Hablando de pastel -comento el, senalando el que ella habia sacado-. ?Estas guardando ese para una ocasion especial?
– Los cuchillos estan en el cajon -respondio ella, con una sonrisa-. Sirvete -anadio. Entonces saco dos platos, dos tenedores y dos tazas de cafe
– Pareces muy tranquila -observo el, cuando los dos tuvieron pastel y cafe y estuvieron sentados la mesa.
– ?Sobre lo que ocurrio? No estoy segura de que haya nada por lo que estar preocupado. Sin embargo, lo de Pam si es muy raro. ?Por que iba a ir ella a un motel? Sigo pensando que podria haberse reunido con el en su casa.
– Tal vez todo esto no tenga nada que ver con Zeke. El hecho de que Pam estuviera hablando con el podria ser simplemente que queria contratar un seguro.
– Trata de decirle eso a Alexis.
– ?Quieres decirme el secreto de tu exito? – pregunto Riley, despues de darle un bocado al pastel-. Jamas he probado algo tan delicioso.
– Lo siento, pero no. Ademas, no me pareces la clase de hombre que hornee pasteles.
– En eso tienes razon -afirmo. Entonces, senalo el articulo de la revista
– Todavia no lo soy, pero me estoy haciendo un hueco. Esta bien. Supone mas trabajo, pero puedo soportarlo, al menos por el momento.
– ?Has pensando un poco mas en la expansion?
– No he tenido tiempo. Creo que seria muy emocionante tener una gran empresa dedicada a la confeccion de pasteles, pero luego me acuerdo de lo mucho que me gusta hablar con mis clientes para tratar de descubrir el pastel perfecto para ellos y prepararlo despues. No se si quiero perder eso. Ni si a la gente le interesa que les haga su pastel una empresa grande
– Hay muchas opciones entre hacerlo todo tu sola o ser una multinacional.
– Aun no he decidido lo que voy a hacer. Tal vez deberiamos haber metido tu coche en el garaje -comento, al darse cuenta de lo que la gente podria pensar si veian el coche de Riley delante de su casa.
– ?Acaso te preocupa tu reputacion?