Aaron Wiggins, su asistente personal, llego media hora mas tarde. Georgie mantuvo la puerta abierta para que pudiera entrar con su maleta mas grande y algunos conjuntos colgados en perchas.
– Ahi fuera hay una autentica zona de guerra -declaro Aaron con el entusiasmo de un chico de veintiseis anos que sigue obsesionado con los videojuegos-. Los
– Estupendo -ironizo Georgie.
Aaron era su asistente personal desde que el anterior se pasara al campo de Lance y Jade. Aaron era casi tan ancho como alto, debia de pesar ciento treinta kilos y apenas alcanzaba el metro ochenta. Su pelo aspero y castano enmarcaba una cara gordinflona adornada con unas gafas enormes y estrafalarias, una nariz larga y una boca pequena y dulce.
– Manana por la manana empaquetare el resto de tu ropa -explico-. ?Donde quieres que deje todo esto?
– Arriba. El armario de Bram esta lleno, asi que he convertido el dormitorio contiguo en mi vestidor.
Cuando llegaron al final de las escaleras, Aaron resollaba y su bolso negro se habia deslizado hasta el angulo de su codo. Georgie deseaba que se cuidara mas, pero el no hacia caso de sus indirectas. Cuando pasaron por el dormitorio de Bram, Aaron echo un vistazo al interior y se detuvo.
– Precioso. -Se referia al equipo de sonido, no a la decoracion-. ?Te importa si dejo tu ropa en tu vestidor y vengo a darle una ojeada? -pregunto.
Sabiendo cuanto le gustaban los aparatos, Georgie no pudo negarse. Aaron dejo la ropa y la maleta en la habitacion contigua y regreso a examinar el equipo electronico.
– ?Increible!
– ?Quieres celebrar una fiesta, guapo? -pregunto una voz sedosa desde la puerta.
Aaron reacciono soltando un extrano soplido.
– Soy Aaron, el asistente personal de Georgie.
Bram arqueo una de sus cejas perfectas mientras miraba a Georgie. Los asistentes personales solian ser mujeres jovenes y guapas u hombres gays muy bien vestidos. Aaron no encajaba en ninguna de esas categorias. Georgie estuvo a punto de no contratarlo a pesar de que su padre se lo habia recomendado. Sin embargo, durante la entrevista, la alarma contra incendios de su casa se disparo y Aaron arreglo el problema con tanta facilidad que ella decidio concederle una oportunidad. Aaron resulto ser alegre, listo, muy bien organizado y no tener manias acerca de las tareas que ella le encargaba. Ademas, su autoestima era tan baja como su habilidad para el arte dramatico y nunca le pedia favores, como que consiguiera que lo admitieran en un club o un restaurante de moda, cosas que su anterior asistente daba por sentadas.
Muchos chicos como Aaron se habian mudado a Los Angeles desde sus ciudades del Medio Oeste sonando con realizar efectos especiales en Hollywood, pero enseguida descubrian que conseguir un trabajo en ese campo no era una tarea tan facil. Ahora Aaron trabajaba de asistente personal para Georgie y se encargaba de su pagina Web. En su tiempo libre, jugaba a los videojuegos y engullia comida basura.
Aaron estrecho la mano de Bram y senalo el equipo de sonido, alojado en el interior de un mueble toscamente labrado cuyas puertas parecian proceder de una mision espanola.
– He leido cosas sobre equipos como ese. ?Desde cuando lo tienes?
– Lo compre el ano pasado. ?Quieres probarlo?
Mientras Aaron escudrinaba el equipo, Georgie examino la habitacion vacia que habia en un recodo del pasillo, donde habia decidido instalar su estudio. Al final, Aaron se reunio con ella y juntos decidieron que muebles necesitaria para guardar sus cosas. Despues de hacer planes para dejar su casa de alquiler y redactar un borrador de carta para sus fans de la Web, Georgie le dijo que cancelara las reuniones y citas a las que pensaba asistir antes de tomarse los seis meses de vacaciones.
Habia pensado viajar por Europa, evitando las grandes ciudades y conduciendo por las zonas rurales. Se habia imaginado visitando pueblos, paseando por viejos caminos y quizas, solo quizas, encontrandose a si misma. Pero su viaje de autodescubrimiento habia tomado un desvio mucho mas peligroso.
– Ahora entiendo por que te tomas seis meses de descanso -comento Aaron-. Buen plan. Al no tener nada en tu agenda, podras disfrutar de una larga luna de miel.
?Si, una luna de miel estupenda!
Para su luna de miel, ella y Lance habian alquilado una casa de campo en la Toscana que daba a un olivar. Despues de unos dias, Lance se puso nervioso, pero a ella le encanto aquel lugar.
Georgie apenas habia pensado en su ex marido en toda la manana, lo que constituia todo un record. Cuando Aaron se disponia a irse, Chaz paso por el vestibulo y Georgie los presento.
– Este es Aaron Wiggins, mi asistente personal. Aaron, Chaz es el ama de llaves de Bram.
Chaz deslizo sus ojos pintados con raya negra del cabello aspero de Aaron a los tensos ojales de su camisa de cuadros y de alli a su abultada barriga y sus deportivas negras. Torcio el gesto y dijo:
– Mantente alejado de la nevera, ?vale? Esta fuera de tu jurisdiccion.
Aaron enrojecio y Georgie sintio deseos de abofetear a la chica. «Si tengo que elegir entre tu y Chaz, ella gana de lejos.»
– Mientras Aaron trabaje para mi -declaro entonces-, tendra libre acceso a todas las zonas de la casa. Confio en que le haras sentirse comodo.
– Os deseo suerte -repuso Chaz y se alejo altiva con la regadera que llevaba en la mano.
– ?Que le pasa? -pregunto Aaron.
– Le cuesta un poco adaptarse a la idea de que Bram esta casado. No le hagas caso.
Era un buen consejo, pero a Georgie le costo imaginarse al bueno de Aaron aguantando el tipo frente aquella ama de llaves de veinte anos y lengua viperina.
Cuando Aaron se marcho, Georgie salio al jardin en busca de Bram. Tenian que hacer planes y el ya le habia dado demasiadas largas. Georgie siguio el sonido de agua borboteante hasta una piscina pequena de contorno irregular situada en un rincon recogido detras de un roble y unos arbustos. En un extremo de la piscina, el agua de una cascada de un metro de altura caia sobre unas piedras negras y brillantes otorgando al rincon un aire de recogimiento.
Georgie siguio caminando y, al final, encontro a Bram encerrado en su despacho. Estaba otra vez hablando por telefono. Cuando ella sacudio la manecilla de la puerta, el le dio la espalda. Georgie intento escuchar la conversacion a traves del cristal, pero no lo logro. El colgo y se puso a teclear en el ordenador. Georgie no conseguia imaginar que hacia Bram con un ordenador. Y, ahora que lo pensaba, ?que hacia fuera de la cama antes de las cuatro de la tarde?
– ?Dejame entrar!
– ?No puedo! -grito el sin dejar de teclear-. Estoy ocupado buscando formas de gastarme tu dinero.
En vez de enfadarse, Georgie se puso a cantar
– Sera mejor que no me entretengas mucho, las prostitutas que he contratado llegaran en cinco minutos.
– Gracias por decirmelo. -Entro en el despacho y senalo el ordenador con un gesto de la cabeza-. Mientras tu babeabas contemplando imagenes de animadoras desnudas yo he estado trabajando en nuestra reaparicion en el mundo. Quiza quieras tomar notas. -Se sento en el comodo sofa marron, debajo de Marlon Brando, y cruzo las piernas-. Tu tienes una pagina Web, ?no? He escrito una carta en nombre de los dos para nuestros fans.
Cuando Bram apoyo los codos en el escritorio, Georgie perdio el hilo. Skip tenia un escritorio, pero Bram no. Skip tambien tenia una buena educacion, una finalidad en la vida y una firme moralidad.
Volvio a la realidad.
– Aaron nos ha reservado mesa para cenar manana en Mr. Chow. Sera un autentico zoo, pero creo que es la manera mas rapida de que…
– ?Una carta a nuestros fans y una cena en Mr. Chow? Eso si que es pensar. ?Y que mas se te ha ocurrido?
– Una comida en el Chateau el miercoles y una cena en Il Sole el jueves. Dentro de dos semanas hay un importante acto benefico para ayudar a los enfermos de Alzheimer. Despues se celebrara un baile para recaudar fondos para obras beneficas. Comemos, sonreimos y posamos.
– Nada de bailes. Ni uno.