Tuf. Parecia lo mas logico. Naturalmente, el no era un cibertec pero si era un hombre inteligente que habia pasado practicamente toda su vida de adulto manipulando los mas variados tipos de ordenadores.

Haviland Tuf se acerco al banco de trabajo y deposito con delicadeza a Champinon bajo la micropantalla, conectando luego la consola. Al principio los controles le resultaron ininteligibles pero siguio estudiandolos con insistencia.

Despues de unos minutos estaba totalmente concentrado en ellos, tan absorto que no se dio cuenta del gorgoteo que empezo a oirse detras de el, cuando el fluido amarillo de la cuba que contenia al dinosaurio, aspirado por una bomba, fue bajando lentamente de nivel.

Kaj Nevis se abrio paso a traves de la subestacion buscando algo que matar.

Estaba enfadado, enfadado consigo mismo por haber sido tan impaciente y tan poco cuidadoso. Anittas podia haber sido util y Nevis ni tan siquiera habia pensado en la posibilidad de que el aire de la nave estuviera lleno de plagas. Naturalmente, habria tenido que acabar matando al maldito cibertec, pero eso no habria resultado dificil. Ahora, todo se estaba complicando. Nevis tenia la sensacion de estar a salvo dentro del traje, pero no se encontraba tranquilo. No le habia gustado nada enterarse de que Tuf y los otros habian logrado abordar la nave. Tuf sabia mucho mas sobre el condenado traje que el, despues de todo, y quiza tambien conociera cuales eran sus puntos debiles.

Kaj Nevis ya habia logrado localizar sin ayuda uno de esos puntos debiles: el aire estaba empezando a terminarse. Un traje presurizado moderno, como el de Tuf, llevaba en sus filtros unas bacterias que convertian el di oxido de carbono en oxigeno, tan rapidamente como un ser humano podia convertir el oxigeno en di oxido de carbono, con lo cual no habia ningun peligro de que el aire se terminara a menos que los malditos bichos microscopicos se murieran. Pero este traje de combate era primitivo. Su provision de aire era bastante grande pero no resultaba ilimitada. Los cuatro tanques en la espalda del gran traje poseian una buena capacidad, pero el indicador del casco, si lo habia interpretado correctamente, le decia que uno de los tanques ya estaba vacio. Aun le quedaban tres, cierto, y con eso debia tener tiempo mas que suficiente para librarse de los demas, siempre que lograra encontrarles. De todos modos, Nevis no estaba tranquilo. El aire que le rodeaba era perfectamente respirable, cierto, pero no pensaba quitarse el casco ni un segundo, despues de lo que le habia ocurrido al cibertec. La parte organica de Anittas se habia corrompido con una rapidez que Nevis todavia encontraba dificil de creer y la gelatina negra que habia devorado al cibertec desde el interior era lo mas horrible que Kaj habia visto en toda su existencia, aunque en ella habia presenciado bastantes cosas nada agradables. Kaj Nevis habia llegado a la decision de que preferia morir de asfixia antes de quitarse el traje.

Pero ese peligro podia ser eliminado. Si la maldita Arca habia podido ser contaminada tambien podia ser limpiada. Encontraria la sala de control y se las ingeniaria para conseguirlo, bastaria con un solo sector limpio. Naturalmente, Anittas habia dicho que Rica Danwstar se encontraba ya en la sala de control, pero Nevis no pensaba dejarse asustar por ello. De hecho, sentia cierto entusiasmo ante la idea de encontrarse con ella.

Escogio una direccion al azar y se puso en marcha, mientras sus pies metalicos retumbaban sobre el suelo. Que le oyeran, no le importaba. Le gustaba este traje.

Rica Danwstar se habia instalado en el asiento del capitan y estaba examinando las lecturas que habia logrado proyectar en la pantalla principal. El asiento, grande y cubierto de un plastico muy comodo, le daba la sensacion de estar en un trono. Era un buen sitio para descansar, pero el problema era que lo unico que podia hacer era descansar. Resultaba claro que el puente habia sido disenado para que el capitan se mantuviera en su trono y les diera ordenes a los demas oficiales. En el puente superior habia nueve estaciones de control y en el pozo inferior habia otras doce y serian esos oficiales los encargados de efectuar la programacion de los aparatos y de oprimir todos los botones necesarios. Como no habia sido lo bastante previsora para hacer que la acompanaran nueve subordinados, Rica no tenia otro remedio que ir de un lado a otro del puente y de una estacion a otra para intentar que el Arca se pusiera de nuevo en funcionamiento.

El trabajo era tedioso y prolongado. Cada vez que introducia sus ordenes en una subestacion equivocada no se producia ningun resultado util, pero a medida que iba avanzando, paso a paso, estaba logrando entender el funcionamiento del puente. Al menos, eso le parecia.

Y, al menos, estaba a salvo. Ese habia sido su primer objetivo, dejar cerrado el ascensor para que nadie mas pudiera utilizarlo y sorprenderla. Mientras estuviera aqui arriba y ellos estuvieran abajo, Rica tenia la carta ganadora en sus manos. Cada sector de la nave tenia su propia subestacion y cada una de las funciones especializadas, desde la defensa hasta la clonacion pasando por la propulsion y el almacenamiento de datos, tenia su propia sub conexion y su puesto de mando. Pero, desde aqui arriba, podia controlarlo todo y dejar sin efecto las ordenes que otra persona pudiera introducir en los sistemas. Siempre que se diera cuenta de ello, claro, y siempre que lograra averiguar como hacerlo… ese era el problema. Solo podia encargarse de una estacion cada vez y solo podia hacerla funcionar cuando lograba entender al fin la secuencia de ordenes adecuada. Cierto, lo estaba consiguiendo a base de pruebas y errores, pero su avance resultaba lento y mas bien torpe.

Se dejo caer en su trono acolchado y examino la pantalla, sintiendose orgullosa de si misma. Al parecer habia logrado obtener un informe completo sobre la situacion de la nave. El Arca ya le habia dado un informe de averias en los sectores y sistemas que habian permanecido sin funcionar durante mil anos, esperando unas reparaciones que se encontraban mas alla de la capacidad de la nave. Ahora le estaba explicando cual era la programacion actual en curso.

El listado biodefensivo resultaba especialmente aterrador y no parecia terminar nunca. Rica no habia oido hablar en su vida de casi ninguna de las enfermedades a las que se habia dado rienda suelta para recibirles, pero todas ellas parecian muy desagradables a ?juzgar por sus nombres. Anittas, de ello no cabia duda, debia formar parte en esos instantes del gran programa que estaba mas alla del universo. Su siguiente objetivo, el mas obvio, debia ser el incomunicar el puente con el resto de la nave, someterlo a radiacion, desinfectar lo y buscar un medio para introducir en el aire no contaminado. De lo contrario, dentro de uno o dos dias como mucho, su traje iba a resultarle mas bien incomodo.

En la pantalla aparecio un mensaje:

BIODEFENSA FASE UNO (MICRO)

INFORME COMPLETO

BIODEFENSA FASE DOS (MACRO)

INFORME EN CURSO

Rica fruncio el ceno. ?Macro? ?Que diablos queria decir eso? ?Plagas enormes?

BIOARMAS PREPARADAS y DISPONIBLES: 47

A continuacion la pantalla mostro una criptica informacion consistente en una larga serie de especies indicadas por sus numeros. La lista resultaba aburrida y Rica se inclino nuevamente en el trono del capitan. Cuando la lista hubo terminado en la pantalla aparecieron mas mensajes.

TODOS LOS PROCEDIMIENTOS DE

CLONACION TERMINADOS

AVERIAS EN CUBAS: 671,3312,3379

TODAS LAS AVERIAS HAN SIDO REPARADAS

CAMPO DE ESTASIS DESCONECTADO

CICLO DE APERTURA EN CURSO

Rica no estuvo muy segura de que ese mensaje le hubiera gustado. Ciclo de apertura, penso. ?Que iba a salir de alli una vez abierto? Por otro lado, Kaj Nevis seguia andando suelto por ahi y si este dispositivo defensivo de segunda fase era capaz de causarle molestias, distraerle o acabar con el, todo ello redundaria en beneficio suyo. Por otra parte, tenia por delante la pesada tarea de buscar la forma de librarse de todas las plagas actuales y no le hacian falta mas problemas. Los informes empezaron a desfilar por la pantalla a un ritmo mas veloz.

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