como
Mas brillante, y tambien mas autentico, resultaria el referendum del Sarre, que estaba bajo control internacional desde su evacuacion por Francia en 1930. El 13 de enero de 1935, la poblacion del Sarre acudio entusiasticamente a las urnas y voto su reincorporacion a Alemania en un 91 por ciento, decision que fue respetada internacionalmente, aunque Francia plantease sus reticencias. Hitler, feliz, trato de eliminar cualquier suspicacia declarando que era la ultima cuenta pendiente que le quedaba por saldar con Francia. El 1 de marzo, el Sarre volvia al seno de Alemania.
Hitler, sin embargo, mentia. Justo con la recuperacion del Sarre comenzaba su campana internacional, que para el era sinonimo de labor de gobierno. El
«Mientras estuve en activo, tanto en el
Muestra elocuente de su desinteres por el trabajo del gabinete gubernamental es que las reuniones ministeriales fueran escasas y que la ultima se celebrara el 4 de febrero de 1938; no volvio a haber otra durante los siete anos que aun perduro el regimen nacionalsocialista. Todo el trabajo del Gobierno debia, pues, estar al servicio de los intereses exteriores de Alemania, que en el ideario expresado machaconamente por Hitler en quince anos de mitines y minuciosamente descrito en
Un sueno formidable al que dedicaba todas sus energias y argucias. En palabras de Alan Bullock,
[…] del mismo modo que el partido nazi habia sido el instrumento mediante el cual el
Para conseguirlo necesitaba de un poderoso ejercito y un armamento adecuado, por lo que estimulo los medios para conseguirlos: reclutamiento obligatorio, instruccion acelerada, politica industrial armamentistica, excelentes comunicaciones al servicio de la industria y el ejercito. Todo eso determinaria un extraordinario desarrollo de los programas de investigacion, de produccion industrial, de construccion de autopistas y ferrocarriles. La revolucion social sonada por los sectores mas obreristas del partido habia sido burlada, mas aun, fue un fraude del NSDAP, pero no habia lugar a la protesta pues los sindicatos de clase habian sido exterminados, los lideres comunistas, los socialistas y los sindicalistas estaban en la carcel o el exilio, la Gestapo y las SS lo controlaban todo y, ademas, la sociedad alemana estaba alcanzando un bienestar social superior al de los mejores dias de la Republica de Weimar.
El paro, una de las lacras de la Alemania de entreguerras que catapulto a Hitler hacia el poder, disminuyo rapidamente, hasta desaparecer por completo a finales de 1938. Mas aun, habia tantas cosas que hacer que los estudiantes, obligados a prestar tres meses de su trabajo al Estado desde 1933, vieron aumentada la cuota a seis meses en 1936. Uno de los empenos mas populares fueron las autopistas, las mejores del mundo en su epoca, por las que pronto circularian los populares
El circuito en el que se movio la economia nazi fue muy sencillo y muy eficaz para sus fines. El Estado se convertia en el gran cliente de autopistas, ferrocarriles, vehiculos y armas. Las fabricas trabajaban a plena produccion e, incluso, debieron crearse numerosas nuevas industrias para satisfacer las demandas estatales. El paro desaparecia. El pleno empleo otorgaba a todos los alemanes una aceptable capacidad adquisitiva, que se mantendria casi fija hasta el comienzo de la guerra. Los salarios no aumentaron, pero la inflacion fue insignificante debido a los controles gubernamentales de los precios. Por medio de la propaganda y el gravamen de los articulos de lujo se consiguio estimular la capacidad de ahorro de los trabajadores, que canalizaron sus economias hacia las inversiones en Deuda Publica. Ahi se cerraba el circuito y el Estado volvia a hallarse en condiciones de invertir nuevamente.
El pleno empleo permitia vivir a todos, aunque no todos vivieran mejor. La falta de libertades hacia sufrir a muchos alemanes; sin embargo, la mayoria se sentia razonablemente satisfecha con la sensacion de progreso, orden y prestigio internacional. Para ello, 1936 fue el ano clave: el 7 de marzo se remilitarizo Renania; el 9 de mayo se iniciaban los vuelos transoceanicos mediante los grandes dirigibles, correspondiendole al
Todo esto fue posible porque Hitler cubrio sus movimientos con un tupido telon de mentiras, de gestos apaciguadores, de habiles maniobras pacifistas, de sutil aprovechamiento de las debilidades y contradicciones de las demas potencias. Hitler, con su escaso bagaje cultural, con su brutalidad tabernaria, fue mucho mas astuto, decidido y sagaz analista de la situacion internacional que sus rivales, salidos de las mejores universidades europeas y placeados en los mas brillantes salones de la diplomacia continental. Inmediatamente despues de instalarse en el poder, adopto una posicion internacional pacifista procurando que todos los paises cumplieran los acuerdos de desarme y, como no lo consiguiera -tampoco esperaba lograrlo-, inicio un discurso victimista: solo Alemania estaba manteniendo los acuerdos internacionales, solo Alemania estaba inerme, sometida a un papel