– ?Tienes el articulo que me comentaste? -pregunto Christopher.
Decker asintio y echo mano a su maletin, del que extrajo una copia de
– Creo que esto le va a interesar, subsecretario -dijo Christopher dirigiendose a Milner.
– Es de la edicion de ayer -empezo Decker-. Aparece en la pagina dieciseis y situa la informacion en Jerusalen.
Mientras mas de medio mundo concentra su atencion en la tragedia que asola Oriente, en Israel, dos hombres -de los que uno asegura ser el apostol Juan, de dos mil anos de edad, y el otro, «el que llega con el espiritu y el poder de Elias»- profetizan el acaecimiento de una tragedia aun mas terrible. Lideres de una secta muy importante y activa en Israel conocida como Koum Damah Patar (KDP) aseguran que la Tierra esta muy proxima a sufrir una serie de terribles cataclismos, como la lluvia de fuego, la colision de un meteoro o asteroide gigantesco contra la Tierra, que envenenara la tercera parte del agua dulce del planeta y eclipsara una tercera parte del Sol y las estrellas.
Aunque la mayoria de israelies considera la actividad de estos hombres poco mas que irritante, algunos se toman muy en serio sus palabras y aseguran que son los responsables de la sequia que vienen sufriendo Israel y el resto de Oriente Proximo los ultimos diecisiete meses. Sus seguidores creen que uno de ellos, aquel al que llaman rabi Yochanan -Juan en hebreo-, es nada menos que el mismisimo apostol Juan del Nuevo Testamento cristiano, quien, a pesar de no aparentar mas de cincuenta y tantos anos, tiene de hecho mas de dos mil. El otro hombre, que se dice venido, como lo hizo Juan Bautista antes que el, «con el espiritu y el poder de Elias», es un antiguo rabino jasidico llamado Saul Cohen. Al igual que el sumo sacerdote de Israel, Chaim Levin, Cohen fue uno de los seguidores del rabino neoyorquino Menachem Scheerson. Cohen fue repudiado por la comunidad judia hace casi veinte anos, cuando empezo a pregonar que Jesus era el Mesias judio.
Juan y Cohen, ataviados con tunicas de sayal o tela de saco, proclaman por las calles de los pueblos y ciudades de Israel su mensaje sobre la ira de Dios contra la Tierra. A su aspecto descuidado se suma el hecho conocido de que apenas se lavan y de que acostumbran a cubrirse la cabeza de ceniza y hollin, igual que en la antiguedad lo hacian quienes estaban de duelo. A pesar de la insistencia de la prensa, se niegan a conceder entrevistas y en su lugar recitan sin fin sus amenazas.
Los miembros del KDP, cuyo numero al parecer se eleva exactamente a ciento cuarenta y cuatro mil, se han convertido en una constante molestia para el resto de compatriotas israelies y tambien para los turistas, y se les acusa de ser los principales responsables de la caida del ya debilitado sector turistico del pais. Estas personas se dedican a abordar a sus confiadas victimas, las acusan de actos o pensamientos que su secta considera inmorales, y luego proceden a amenazar con la maldicion eterna a quienes no muestren arrepentimiento. Incluso se han atrevido a asaltar con su arenga al sumo sacerdote Levin.
Aunque la pertenencia al KDP parece que se limita a hombres judios solteros, el grupo cuenta con numerosos seguidores. A los miembros se les puede identificar facilmente por la caligrafia hebrea de color rojo que lucen en la frente. En Israel son muchos los que opinan que los KDP poseen poderes psiquicos, y la mayoria afirma que los que les abordaron poseian informacion personal muy detallada sobre sus vidas. Al ser entrevistados, los miembros han probado ser en su mayoria muy poco cooperativos y han preferido hacer una demostracion de sus poderes adivinatorios sobre el que suscribe este articulo.
Fuentes internas del KDP, no obstante, aseguran que el grupo cree que los tan difamados Albert Faure, embajador de Naciones Unidas, y el general Charles Brooks son la imagen espiritual del primero y el segundo de los «jinetes del Apocalipsis», a los que hace referencia el libro del Apocalipsis del Nuevo Testamento. El hambre, que ha provocado la muerte de millones de personas, se dice que representa al tercer jinete, mientras que el cuarto podria estar representado simbolicamente por los diecisiete meses de guerra que culminaron en el devastador intercambio nuclear.
Segun las proclamaciones de los dos lideres del KDP, los sucesos que profetizan recaeran sobre las gentes de la Tierra porque la humanidad «se ha negado a respetar las leyes de Dios y a aceptar la compasion de Dios». Dicen que la razon de que el castigo anunciado provenga del cielo es que en lugar de adorar al «Dios verdadero», los hombres han adorado al Sol, la Luna y las estrellas; lo que aparentemente hace referencia a la astrologia.
En caso de cumplirse sus profecias sobre la colision de un asteroide contra la Tierra, no seria la primera vez que ocurre algo asi. Muchos cientificos aseguran que fue precisamente el impacto de un asteroide el causante de la extincion de los dinosaurios a finales del periodo cretacico, hace sesenta y cinco millones de anos. Segun la doctora Jean Spring, que participa en el programa Palomar Planet-Crossing Asteroid Survey, del Observatorio de Mount Palomar, en Estados Unidos, existen varios miles de asteroides cuyas orbitas se cruzan con la terrestre. De entre ellos, aproximadamente novecientos cincuenta son de un kilometro o mas de diametro. No obstante, la doctora se ha apresurado a anadir que las probabilidades de que un asteroide de gran tamano impacte contra la Tierra en los proximos dos millones de anos son extremadamente reducidas.
Cuando empezaron a aparecer los primeros miembros del KDP en Israel, la policia arresto a cientos de ellos bajo cargos de alteracion del orden. Pero las carceles no tardaron en llenarse. Segun fuentes del gobierno israeli, la policia ha intentado arrestar a los dos lideres de la secta, pero a pesar de contar con la ayuda del servicio de informacion israeli, han sido incapaces de infiltrarse en las filas del KDP. Ambos han salido ya a la luz, pero la policia sigue sin poder arrestarles debido a la asombrosa habilidad que tienen de esfumarse tan pronto se acerca la policia o, incluso, la secreta.
Una vez Decker hubo terminado de leer el ultimo parrafo, Christopher se levanto de su asiento y se acerco a una de las estanterias con libros.
– Escucha esto -dijo mientras regresaba a su butaca con un libro encuadernado en piel en la mano. Era una Biblia.
Y el primero dio un toque de trompeta. Y hubo granizo y fuego mezclados con sangre, y se les lanzo a la tierra; la tercera parte de la tierra se abraso, la tercera parte de los arboles se abraso, y toda [la] hierba verde se abraso.
Y el segundo angel dio un toque de trompeta. Y [algo] como un gran monte envuelto en fuego fue lanzado al mar: la tercera parte del mar se convirtio en sangre, murio la tercera parte de los seres vivos que [habia] en el mar, y la tercera parte de las naves quedo destruida.
Y el tercer angel dio un toque de trompeta. Y cayo del cielo una estrella grande, ardiendo como una antorcha: cayo sobre la tercera parte de los rios y sobre las fuentes de las aguas (el nombre de la estrella es «Ajenjo»), [2] y la tercera parte de las aguas se convirtio en ajenjo, y de los hombres murieron muchos debido a las aguas, porque se habian vuelto amargas.
Y el cuarto angel dio un toque de trompeta. Y repercutio en la tercera parte del sol, y la tercera parte de la Luna y la tercera parte de las estrellas, de forma que la tercera parte de ellos se oscurecio, el dia perdio la tercera parte de su luz, y la noche lo mismo. [3]
– Esto suena espantosamente parecido a lo que Juan y Cohen predicen -concluyo Christopher pasando de pagina.
– ?Me estas diciendo que todo eso aparece en la Biblia? -pregunto Decker.
– Si, en el libro del Apocalipsis -contesto Christopher-. Pero no es todo, hay mas.
«Y hare que mis dos testigos profeticen durante mil doscientos sesenta dias, vestidos de cilicio». Estos son los dos olivos y los dos candelabros que estan ante el Senor de la tierra; y si alguno quiere hacerles dano, de la boca de ellos saldra fuego y devorara a sus enemigos; y si alguno quisiera hacerles dano, tendra que sucumbir asi. Estos tienen el poder de cerrar el cielo para que no caiga lluvia durante los dias de su ministerio profetico, y tienen poder sobre las aguas, para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda clase de plagas siempre que quieran. [4]