Pamela Aidan
Solo quedan estas tres
Serie Fitzwilliam Darcy, Un Caballero, N? 3
Titulo original: These Three Remain
© De la traduccion: 2009, Patricia Torres Londono
A Michael, mi marido.
En suma, subsisten la fe, la esperanza y el amor;
solo quedan estas tres.
Pero la mayor de todas ellas es el amor.
1
– ?Arre, arre! -La voz de James, el cochero, resono con su tono familiar mientras arreaba a los caballos que tiraban del carruaje de Darcy, para que cruzaran la puerta que salia de Londres, tomando el camino hacia Kent. Darcy se relajo sobre los cojines verdes forrados de terciopelo, mientras el vehiculo rodaba con suavidad, bajo el experto latigo de James. Le lanzo una mirada furtiva a su primo, que estaba sentado frente a el, con la nariz hundida en el
– ?Has visto esto, Fitz? -Richard le dio la vuelta al periodico y senalo energicamente con el dedo uno de los articulos.
– Si, ha sido una de las
– Al suelo, tropa. Una tormenta se aproxima por el horizonte… -Richard se llevo la mano a la frente, como si quisiera protegerse de la esperada reprimenda.
– Un reproche bien merecido -afirmo Darcy con un resoplido.
– Si, pero apelo a tu naturaleza bondadosa y amable… -siguio diciendo Richard. Su primo volvio a resoplar, pero no pudo contener una sonrisa-. Y culpo enteramente a tu amigo.
Darcy solto una carcajada al oir aquello.
– ?
– Fue
– ?Excesivamente!
– Un hombre muy simpatico, ciertamente, ?y bien informado! Siempre habia pensado que era un tipo superficial y frivolo. Y nunca habia podido entender el carino que le tenias, Fitz. Una personalidad muy distinta a la tuya.
– El no era asi en la universidad. De hecho, era muy diferente.
– Si tu lo dices. -Fitzwilliam se encogio de hombros y se recosto contra los mullidos cojines del lando-. Y estoy tentado a creerte despues de anoche. Antes no comprendia muy bien por que lo habias autorizado a visitar a Georgiana mientras estamos ocupados en nuestra peregrinacion a Rosings; sin embargo, ahora reconozco que ha sido una estupenda decision.
Darcy asintio con la cabeza.
– Si, la aprobacion de Brougham sera muy valiosa cuando Georgiana se presente en sociedad el ano proximo.
– Oh, de eso tambien estoy seguro -afirmo Richard de manera enfatica. Darcy lo miro con curiosidad y entonces su primo dejo el periodico y se lo puso sobre las rodillas-. ?No has notado lo amable que es Georgiana con Brougham? El la hace reir con una facilidad enorme y son capaces de conversar durante horas, o lo harian, si las normas sociales no lo impidieran. Aparte de nosotros dos, nunca habia visto que Georgiana se sintiera comoda en compania de otros hombres, especialmente desde… -Richard apreto los labios de repente y, tras de un extrano lapso de silencio, continuo-: Pero tu amigo lo ha logrado y lo ha hecho bastante bien… -Richard dejo la frase inconclusa, cuando vio la expresion que asomaba al rostro de Darcy-. ?De verdad no lo habias notado?
– ?No hay nada incorrecto en ello, Richard! Nada que se pueda considerar como un interes particular de Brougham por Georgiana -replico Darcy con irritacion, asegurandole a su primo, y a el mismo, que las insinuaciones que podian desprenderse de las observaciones de Fitzwilliam eran totalmente absurdas-. Y por parte de Georgiana tampoco hay un afecto que supere el carino normal que se siente por un amigo de la familia.
– ?Claro que no hay «nada incorrecto», Fitz! ?Por Dios! -Fitzwilliam hizo una retirada estrategica y se volvio a concentrar en el
No, el habia estado mas interesado en su propia tranquilidad, despues de regresar de su desafortunado viaje a Oxfordshire en busca de