proxima.
– ?Pero y
– ?Mis relojes? Bueno, los llevo conmigo. ?Vosotras no?
Dio a las mujeres besos de igual duracion, aunque Sissy recibio un poco mas de lengua. Luego se volvio y cruzo el anden cojeando.
Viendole cojear hacia el tren, Sissy comprendio de pronto lo pequeno y fragil que habia empezado a parecer. Ahora, tambien Delores estaba llorando.
En la puerta del vagon, el Chink se volvio de pronto, se abrio bruscamente la bragueta y agito hacia ellas su pajarito.
– Ja ja jo jo y ji ji -rio.
El viejo cabron.
120
CON SISSY Y DELORES acomodadas en la cueva, el rancho en buenas manos, el Chink dando cuerda otra vez al Pueblo Reloj, La Condesa sacando orinales de postparto y Jellybean lazando nubes en las praderas del Paraiso, parece ser que las cosas se han asentado para esas entidades cuyas aventuras ha narrado este libro.
Podriamos concluir que
Despues de su partida del Lago Siwash, la bandada de grullas se detuvo muy brevemente en sus territorios de invernada de Aransas. Horas antes de que comenzase un festejo de bienvenida, emprendieron vuelo de nuevo, dejando en la estacada al Secretario del Interior, al Gobernador de Texas, a la Camara de Comercio de Corpus Christy y a miles de patrioticos amantes de las aves.
Siguiendo rumbo al sur, se detuvieron un tiempo en Yucatan, siguieron luego hasta Venezuela y almorzaron ranas-leopardo en los pantanos del Orinoco. En Bolivia, sus excrementos cayeron sobre una revolucion. En Paraguay, mancharon las catedrales de Asuncion. Las tentativas de aproximarse a ellas de los cientificos sudamericanos provocaron invariablemente su marcha. Se desviaron hasta Chile, quiza para rendir tributo al asesinado poeta Pablo Neruda. La siguiente parada fue la Patagonia.
En Estados Unidos y en Canada, habia muchas personas asustadas. El jefe de la Sociedad Audubon, empezo a emitir graznidos que sus camaradas identificaron como de somormujo y cuco. ?Serian las secuelas de la dieta de peyote o seria algo a la vez mas misterioso y mas siniestro lo que hacia actuar asi a las grullas? Discutian los naturalistas en laboratorios y salas de conferencias… y las chilladoras, cruzando el Atlantico camino de Africa, hicieron una visita a las islas Sandwich del Sur.
Despues de que cazadores furtivos congolenos abatiesen unas cuantas, las Naciones Unidas aprobo una resolucion unanime segun la cual se castigaba a todo aquel que hiciese dano a las grullas con carcel en todos los paises del mundo. Justo a tiempo, ademas, pues pronto la gran bandada blanca se lanzo a cruzar regiones densamente pobladas. Las chilladoras destrozaron una playa en el sur de Francia, desplazaron a las famosas palomas de San Marcos de Venecia y realizaron, al parecer, un pintoresco vadeo del Tamesis.
Las aves siguieron su ruta… y aun la siguen. Nadie sabe donde apareceran la proxima vez. Sus chillidos, recibidos con religioso fervor a lo largo del Ganges, apenas pudieron oirse sobre las bocinas y los chirridos de neumaticos del trafico de Tokio. Cuando escribo esto, se las supone en algun punto del interior de China, donde en otros tiempos se producian poemas sobre grullas (no chilladoras, por supuesto) al ritmo de mil por dia. Pero hoy son poquisimos los poemas sobre grullas que se escriben en China.
?Busca acaso el ave mas esplendida y grande de Norteamerica un nuevo hogar y explora el globo a la busca de un sitio donde vivir aislada y libre? Esto es una teoria. Naturalmente, han surgido leyendas sobre los viajes de las chilladoras. Una mujer de Borneo afirma haber tenido relaciones sexuales con una de las grullas. Sombras de Leda y el Canarian Honker.
Quiza las grullas chilladoras lleven un mensaje e intenten transmitirlo por todas partes. Un mensaje de lo salvaje a lo ya no salvaje. ?Es posible tal cosa?
Todo es posible. Y todo esta bien. Y puesto que bien esta cuanto termina bien, ?hemos de concluir que este es el final?
Si, casi. Falta anadir la noticia de que las grullas acaban de cruzar la frontera del Tibet. Chillando.
Septima Parte
robert K. hall
121
HA PASADO EL TIEMPO. De siete a ocho, por el tamano del vientre de Sissy.
Es medianoche en los relojes. Una medianoche de junio, lo bastante calida para dormir en el nivel superior de la cueva. Sissy y Delores suenan y, aunque sea muy extrano, pues han ido distanciandose en las ultimas semanas, comparten un sueno similar.
Delores le ha dicho a Sissy que quiere irse. No se ira hasta que llegue el nino, hasta que Sissy este bien y pueda valerse; ama a Sissy, despues de todo; pero no se siente plena con ella. Es sobre plenitud lo que ahora suena Delores: sobre los dos opuestos del Uno que, en equilibrio, le capacitan para que ambos existan y vivan. Una mujer sin su opuesto, o un hombre sin el suyo, pueden existir, pero no vivir. La existencia puede ser hermosa, pero jamas completa. Bajo la almohada de Delores esta la carta, la sota de corazones.
La hinchazon del vientre de Sissy la obliga a dormir bocarriba, posicion ideal para atraer el sueno. Tambien Sissy suena con el opuesto que pueda completarla, al que ella pueda completar. Al tener una habilidad especial con las aves, Sissy sabe muy bien que el espiritu no puede remontarse solo con un ala. Del Chink aprendio que es el opuesto de una cosa lo que la mantiene integrada. En el sueno de Sissy hay un hombre que no se niega a si mismo como Julian, sino que es el mismo hasta el limite pleno de si mismo, como ha sido ella.
Las dos mujeres estan inquietas. Delores se agita y culebrea como postal de direccion ilegible. Sissy maulla como gatito con vodka en el plato de leche. Sus labios tiemblan pero no se abren. En la cueva duerme una tercera persona. Como nacimiento es fin ademas de principio, quizas esa persona tambien suene verse completada. Despierta y da un buen golpe a Sissy. No con el pie sino con el… En la vida embrionaria, los dedos se forman como lomas radiantes sobre las superficies laterales de la mano y los segmentos del pie. Dado que esas lomas crecen mas deprisa que los cuerpos de sus segmentos, pronto se proyectan mas alla del margen como dedos definitivos. Sissy sabe desde hace tiempo que la criatura tiene sus caracteristicas. Vendra al mundo siendo medio japonesa, siwash en una treintaydosava parte y toda pulgares. Asi sea. El dedo en movimiento escribe, y tras escribir sigue moviendose. El pulgar en movimiento hace senas, y tras hacerlas, nos mueve con el.
El feto hace senales de autoestop al cuello del utero de Sissy, a su region lumbar. A su vejiga. Ni siquiera esto la despierta. Lo que por fin hace que abandone su sueno no es un gesto sino un ruido.
Un ruido extrano, sonoro aunque lejano. Los generales de su cerebro consideran los posibles origenes del ruido. Era un ruido retumbante. ?Sera quizas uno de los terremotos tanto tiempo esperados, que quebrara los