Skunk.

– Estoy trabajando. No hagas preguntas.

Sonriendo, divertida por sus rarezas, Bethany arranco, justo cuando cruzaba otro coche. Luces cegadoras. Un chirrido de frenos y el pitido de un claxon.

– ?Mierda! -dijo-. Conduces como una loca, joder.

– ?Me has dicho que lo siguiera!

– Que no nos vea.

Ella aminoro la marcha. El MG se alejo por la carretera. Luego se detuvo en un semaforo. Bethany se paro detras de el. Skunk vio la parte de atras de la cabeza del conductor. Pelo largo y oscuro. Parecia una mujer.

– ?Cuando vas a contarme de que va todo esto? -pregunto Beth.

– Tu siguela. Guarda las distancias.

Al Multimillonario de Tiempo le preocupaba los faros que tenia justo detras. ?Estaba siguiendole ese coche? ?Era la policia? El semaforo se puso verde y acelero, manteniendose estrictamente por debajo del limite de cincuenta kilometros hora. Aliviado, el coche de detras se quedo, luego avanzo muy despacio.

Volvio a detenerse detras de el en el semaforo siguiente, en el cruce con Old Shoreham Road. Estaba parado justo detras de una farola y vio que solo era un Peugeot 206 viejo, pequeno y asqueroso. No era un coche de policia, seguro. Solo una puta y un imbecil a su lado. Nada de que preocuparse.

Cinco minutos despues, se detuvo en la calle junto a la casa de Cleo Morey y aparco en doble fila al lado del Volvo salpicado de cagadas de pajaro. Saco su Prius del sitio donde lo habia aparcado antes y estaciono el MG en el. ?Perfecto! La zorra no tendria motivos para sospechar nada.

Skunk, de pie al final de la calle, oculto entre las sombras, observo la curiosa maniobra con interes. No tenia ni idea de que estaba pasando. Ni tampoco que hacia la mujer tanto tiempo dentro del MG, toqueteando algo, con el Prius aparcado en doble fila, bloqueando la calle.

Entonces se bajo del coche y Skunk vio que se habia equivocado, era un tio con barba. Lo vio meterse en el Prius y marcharse.

Luego Skunk regreso al Peugeot, aparco a poca distancia y marco el numero del agente Paul Packer.

– ?Eh, colega! -dijo Packer-. ?Que pasa?

– He encontrado el coche.

– De acuerdo. Tengo un problemilla que me llevara un par de horas… Me han llamado para un trabajo. ?Puedes esperar?

– ?Cuanto?

– Un par de horas, maximo.

Skunk miro el reloj del Peugeot. Eran las once menos diez.

– Pero no mas -dijo-. No puedo esperar mas tiempo.

– Dime el sitio. Lo preparare todo.

Skunk le dijo donde estaba. Luego colgo y se volvio hacia Bethany.

– Quitate las bragas.

– ?No llevo! -dijo ella.

Capitulo 100

Grace consulto su reloj. Las 23.07. Luego miro el indicador de velocidad. Iban a una velocidad constante de 217 kilometros por hora. Las luces pasaban con rapidez y la oscuridad se precipitaba sobre ellos. Estaba concentrado en los automoviles de delante, intentando que Glenn no se metiera en lios. Cuando se acercaban a un coche, intentaba comprobar que no fuera la policia. Era complicado porque habia muchos vehiculos camuflados en este tramo de carretera, pero conocia algunas de las senales reveladoras que habia que buscar -las mejores pistas eran dos figuras dentro, un coche limpio ultimo modelo de cuatro plazas y antenas externas- y tambien sabia que no habia muchos tan tarde por la noche, a esas horas se preferia utilizar coches patrulla, que suponian una presencia policial visible.

Tendria que mover algunos hilos -no era una tarea facil cuando la ciudadania analizaba a la policia cada vez mas detenidamente- para evitar que Branson fuera multado y perdiera puntos del carne por las cuatro camaras que les habian fotografiado cuando salian de Londres. Cuatro camaras, tres puntos cada una -tal vez incluso mas por la velocidad con la que se habian cruzado con un par de ellas-. Al menos doce puntos del carne. Retirada instantanea.

Sonrio al pensar en aquello, imaginando las protestas de su amigo.

– ?Que te hace tanta gracia? -pregunto Branson, que tuvo que levantar la voz por encima de la cancion de rap de Bubba Sparxxx que sonaba a todo volumen en la radio-. ?Por que sonries?

Grace toleraba el estruendo porque Glenn le habia dicho que necesitaba la musica para «ponerse en situacion» y poder conducir deprisa.

– Mi vida -contesto.

Las 23.08. Habian pasado hacia rato la salida 8 y la 9 apareceria en cualquier momento. Escudrino la carretera oscura en busca de las senales.

– ?Tu vida? Creia que tu vida era triste, punto. No me habia dado cuenta de que era una comedia.

– ?Tu conduce! Estoy teniendo una de esas… ?Como las llamas tu? «Experiencias cercanas a la muerte.» Cuando toda tu vida pasa en un segundo delante de tus ojos. Asi ha sido desde que salimos de Notting Hill.

Ahora se aproximaba la senal grande azul y blanca que indicaba el desvio para el aeropuerto de Gatwick y tambien la de la salida 9. Pasaron volando. A poca distancia de alli, Grace vio la silueta del paso elevado que cruzaba la autopista.

Unos treinta segundos despues, al pasar por debajo, los ojos de Grace se movieron de su reloj al cuentakilometros del coche.

– De acuerdo, ?ya puedes reducir!

– ?Ni de cona!

Bubba Sparxxx termino, para alivio de Grace. Se inclino hacia delante para bajar el volumen, pero Branson protesto.

– La siguiente es Mobb Deep, tio. No es lo tuyo para nada, pero es mi musica.

– Si no reduces, ?voy a poner a Cliff Richard! -le amenazo Grace.

Branson aminoro, un poquito, meneando la cabeza con incredulidad.

Por un momento, Grace se desconecto de Branson y su musica, y se concentro en algunos calculos mentales. Habian recorrido poco mas de cuarenta y cinco kilometros desde el bloque de pisos de Bishop en Westbourne Grove, Notting Hill, algunos por zonas urbanas muy edificadas y otros por autovia y autopista.

Habia varias rutas distintas que Bishop podria haber tomado; un analisis de todos los radares y camaras de circuito cerrado que las cubrian podria revelar con el tiempo cual habia elegido. Habian encontrado bastante trafico a la salida de Londres y Grace sabia que en dias diferentes, a horas diferentes, se podia tener suerte o no.

Esta noche habian recorrido la distancia en treinta y seis minutos. A una velocidad legal, el trayecto habria durado cerca de una hora. Branson habia conducido como el viento y era un milagro que no les hubieran parado en ningun sitio. Con menos trafico, o por una ruta distinta, imagino que era posible bajar cinco o diez minutos ese tiempo. Lo que significaba que Bishop podria haber tardado veintiseis minutos.

Habia que contemplar diversos factores. El recibo del restaurante de Phil Taylor demostraba que la factura se habia pagado a las 22.54 de la noche del jueves. El reloj del datafono no tenia por que ser preciso al cien por cien necesariamente -era facil que estuviera unos minutos adelantado o atrasado-. Como preferia pecar de cauteloso para darle a Bishop el beneficio de la duda, imagino por el momento que iba cinco minutos atrasado. De esta forma, supuso que Bishop se habia marchado del restaurante mas o menos a las once en punto de la noche. Contemplando que no hubiera encontrado ningun atasco, pudo realizar el trayecto en taxi en quince minutos. Habia que anadir un par de minutos para que Bishop sacara el coche del aparcamiento subterraneo de su

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