Una mentira. Con lo fanatico del tema y
Crei comprender su reticencia. Y le dije:
– Esta pelicula era parte de una conspiracion para efectuar un chantaje, ?no es cierto? Y el doctor era la victima.
– Ridiculo.
– Entonces, ?que otra cosa puede ser? El no sabia que lo estaban filmando.
– Una de esas bromas pesadas de Hollywood -dijo-. Errol Flynn hacia agujeros en las paredes de sus retretes, y usaba una camara oculta para filmar a sus amigas sentadas a la taza.
– Vulgar -murmuro Larry.
El rostro de Gordon se oscurecio.
– Lamento que piense usted de ese modo, doctor Daschoff. Todo era hecho con la mejor intencion, jocosamente, como una autentica broma.
Larry no dijo nada.
– Da lo mismo -comento Gordon, caminando hacia la puerta de la sala y abriendola-. Estoy seguro de que ustedes, caballeros, tendran que regresar con sus pacientes.
Nos guio a traves de la sala negra hasta el ascensor.
– ?Que le paso a Linda Lanier? -pregunte.
– ?Quien sabe? -dijo. Luego comenzo a aleccionarnos sobre la relacion entre las normas culturales y el erotismo, y continuo su disertacion, hasta que salimos de su casa.
17
Nunca lo habia visto asi -me dijo Larry, cuando estuvimos de nuevo en la acera.
– Sus creencias estan siendo atacadas -le dije-. Le gusta pensar en su aficion como algo inofensivo, como el coleccionismo de sellos. Pero uno no usa los sellos de correos para hacer chantajes. Agito la cabeza.
– Ya fue bastante estremecedor el contemplar a Sharon pero esa segunda pelicula era muy distinta… era algo realmente malvado. Ese pobre tipo metiendola y sacandola, sin saber que estaba haciendo su debut cinematografico.
Volvio a agitar la cabeza.
– Chantaje. Mierda, esto se esta volviendo mas y mas raro, D. Para poner peor las cosas, esta manana he recibido una llamada de un viejo companero de asociacion estudiantil, y que me cuenta lo de un tipo al que conocimos Brenda y yo en la universidad, y que tambien acabo de comecocos; terapeuta del comportamiento, con un consultorio con muchos clientes alla en Phoenix. Resulta que se tiraba a su secretaria, y esta va y le pasa las purgaciones, el se las pasa a su esposa y esta le
– Quiza los psicoanalistas esten en lo correcto -dije-, al hacer que los candidatos a serlo pasen por un analisis a largo plazo, antes de permitirles cualificarse.
– Vamos, D. Piensa en todos los analistas con los que te has topado que son autenticos tipos raros. Y todos nosotros tuvimos nuestras terapias de entrenamiento. Uno puede ser terapeutizado hasta el mismisimo ying-yang y seguir siendo un ser humano podrido. ?Quien sabe?, quiza ya seamos sospechosos desde el principio. Acabo de leer un articulo que era un estudio de los historiales familiares de psicologos y psiquiatras. Un monton de nosotros tenia madres gravemente deprimidas.
– Yo tambien lo he leido.
– Desde luego, conmigo concuerda -me dijo-. ?Que me dices de ti?
Asenti con la cabeza.
– ?Lo ves? Eso es: de ninos tuvimos que cuidarnos de nuestras mamis, y asi aprendimos a ser hiperadultos. Luego, cuando crecimos, buscamos a otros depresivos de los que cuidarnos; eso, en si mismo, no es malo, si antes hemos podido abrirnos camino por entre nuestra mierda personal. Pero, si no lo logramos… No, no hay una respuesta sencilla, D. Que el que compre se ande con muchisimo cuidado.
Lo acompane hasta la ranchera.
– Larry, ?podria la cinta de Sharon tener algo que ver con las investigaciones de Kruse?
– De ningun modo.
– ?Y que hay de los papeles de la universidad que vio Gordon?
– Falsos -me contesto-. E ilogicos: aun en esos tiempos, ninguna universidad se hubiese metido en camisas de once varas como esas. Kruse le debio ensenar algunos papeles fulleros; y Gordon se lo creyo, porque queria creerselo. Ademas, Kruse nunca uso papeleo para nada… el y el Departamento se mostraban entre si un sentimiento de mutua apatia. Ellos tomaron la pasta que el les proporciono, le dieron un laboratorio en el sotano que nadie usaba, y no quisieron nunca saber lo que estaba haciendo. Comparado con todos los otros experimentos fraudulentos que estaban haciendo los psicologos sociales, su trabajo parecia benigno.
Se detuvo, parecio preocupado:
– ?Que infierno era lo que buscaba al filmarla asi?
– ?Quien sabe? Lo unico en que puedo pensar es en algun tipo de terapia radical. Trabajando con los pecados de la madre…
Penso en ello.
– Aja. Quizas. Ese tipo de locura seria muy propia de su estilo: control total de la vida del paciente, sesiones maratonianas, hipnosis de regresion… derribar las defensas. Si en este proceso ella descubrio que su mamita era una putilla, eso la haria totalmente vulnerable.
– ?Y si lo descubrio porque Kruse se lo dijo? -pregunte-. El tenia acceso a la filmoteca de Fontaine, podria haber estado curioseando en ella y hallado la cinta de Linda Lanier. Su parecido con Sharon era asombroso…, asi que sumo una y otra cosas. Luego investigo a la Lanier, se entero de algunos detalles feos…, quizas incluso del chantaje. Sharon me conto una historia inventada acerca de unos padres ricos, sofisticados. Parece como si se hubiese estado ocultando de la realidad. Kruse pudo haberle ensenado la pelicula cuando estaba bajo hipnosis, usandola para derrumbarla del todo, para tenerla absolutamente bajo su control. Luego sugirio un modo en el que ella podria enfrentarse al trauma y superarlo, a base de hacer una pelicula propia…, una especie de teatro catartico.
– Jodido bastardo -dijo. Y luego-: Ella era una chica lista, D. ?Como podria caer en eso?
– Lista pero confundida: piensa en todas esas caracteristicas limites de las que hablamos. Y tu mismo me dijiste lo persuasivo que puede llegar a ser Kruse: consiguio que radicales partidarias de la liberacion femenina pensasen que el azotar a su esposa era algo noble. Y eso con mujeres a las que solo conocia de un modo
– O quiza -dijo el-, ya la conociese de antes.
– Quiza.
– Terapia mas cine porno. -Parecia hosco-. Nuestro estimado Jefe de Departamento es todo un principe azul.
– ?Crees que deberiamos poner a la universidad al corriente de sus metodos?
– ?Dedicarnos a gritar «?al lobo!»? -Se tironeo el bigote-. Brenda me dice que las leyes que protegen el buen nombre son muy liadas. Kruse tiene dinero…, nos podria tener anos en los tribunales; y, acabase como acabase la cuestion, nos iban a vapulear de lo lindo a lo largo del proceso. ?Estas preparado para algo asi?
– No lo se.
– Bueno, pues yo no. Deja que la universidad haga su propio jodido trabajo detectivesco.