pasar el resto de su vida visitandonos a la carcel y rechazando entrevistas de la prensa sensacionalista, o viendo como convierten su vida en una pelicula truculenta.
– Todo eso significaria que O'Connell habria ganado -intervino Hope-. Aunque estuviese muerto, nos habria arruinado y el «si no puedo tenerla» se cumpliria de una manera perversa. Ashley quedaria marcada para siempre.
Catherine apreto los labios; ella ya sabia todo eso. Dio una palmada y dijo:
– Bien, debe de haber algun modo de eliminar a O'Connell de la vida de Ashley antes de que suceda algo peor.
La palabra «eliminar» disparo la mente de Scott.
– Creo que tengo una idea -dijo.
Las cuatro mujeres lo miraron. El se levanto y dio unos pasos.
– Para empezar, deberiamos devolverle su propia medicina.
– ?A que te refieres? -pregunto Sally.
– Me refiero a acosar al acosador. Averiguemos todo, y quiero decir todo, lo que podamos sobre ese cabron.
– ?Para que? -pregunto Hope.
– Debe tener algun punto vulnerable. Lo golpearemos ahi.
Catherine asintio. En todos ellos debia de haber una vena implacable: era solo cuestion de encontrarla y emplearla.
– Muy bien -respondio Sally-, pero ?como lo golpearemos?
Scott midio sus palabras.
– No podemos matarlo -dijo-, pero debemos eliminarlo. Y hay alguien que puede hacerlo por nosotros de un modo en el que todos, sobre todo Ashley, salgamos intactos, sin un solo aranazo.
– No se a quien te refieres -respondio Sally.
– Tu misma lo has dicho, Sally. ?Quien puede eliminar a alguien de la sociedad durante cinco, diez, veinte anos o toda la vida?
– El estado de Massachusetts.
Scott asintio.
– Es solo cuestion de encontrar un modo de hacer que el estado elimine a Michael O'Connell. Todo lo que tenemos que hacer es proporcionarle un motivo.
– ?Cual? -pregunto Ashley.
– El crimen adecuado.
– ?No ves la genialidad en el plan de Scott? -pregunto ella.
– Yo no emplearia esa palabra -respondi-. «Estupidez» y «temeridad» me parecen mas adecuadas.
Ella reflexiono.
– Muy bien, cierto a primera vista. Pero eso es lo que resulta unico en el pensamiento de Scott: va completamente contra la logica. ?Cuantos catedraticos de historia de una pequena facultad liberal y prestigiosa se convierten en delincuentes?
No respondi.
– ?O una consejera estudiantil y entrenadora? ?Una abogada de provincias? ?Y una estudiante de arte? ?Que podria ser mas insensato que ese peculiar grupo decidiera cometer un delito? ?Y elegir a alguien que pudiera recurrir a la violencia?
– Sigo sin saber…
– ?Quien mejor para salirse del marco de la ley? Sabian lo que hacian gracias a Sally y su experiencia juridica. Y Scott estaba muy bien preparado para convertirse en un criminal gracias a su epoca de Vietnam. Su mayor problema era el tabu moral contra el delito inherente a su estatus social.
– Yo pensaba que habrian llamado a la policia.
– ?Que garantia tenian de que el sistema legal funcionaria para ellos? ?Cuantas veces has abierto el periodico y leido sobre alguna tragedia motivada por un amor obsesivo? ?Cuantas veces has oido a la policia quejarse: «No podiamos intervenir…»?
– Aun asi…
– Las palabras que sin duda no quieres que tallen en tu tumba son «Si solo hubiera…».
– Ya, pero…
– No puede decirse que su situacion fuera unica. Las estrellas de cine y los famosos de la tele saben lo que es el acoso, pero tambien las secretarias de las grandes empresas e incluso las madres que llevan a sus pequenos al parque. La obsesion puede cruzar todo tipo de barreras economicas y sociales. Pero su respuesta si fue unica. Su objetivo era salvar a Ashley. ?Podia haber un motivo mas noble? Ponte por un instante en su piel. ?Que habrias hecho tu?
Esa fue su pregunta mas simple y, al mismo tiempo, mas dificil de responder.
Ella inspiro hondo.
– Lo unico que importaba era si podrian salirse con la suya.
33 Algunas decisiones dificiles
Scott se sentia rebosante de energia. Miro a las mujeres a su alrededor y febrilmente empezo a imaginar planes, todos impulsados por la ira que abrigaba hacia Michael O'Connell. Sally se agitaba incomoda, y el supuso que la abogada que habia en ella se disponia a sopesar sus propuestas, a analizarlo todo con lupa. «Vera todos los peligros implicitos en mi propuesta», penso. Ojala comprendiera que serian peligros menores comparados con la amenaza que pendia sobre Ashley.
Pero, para su sorpresa, Sally asintio con la cabeza.
– Lo que haga falta -dijo con frialdad-. Deberiamos estar dispuestos a lo que haga falta. -Se volvio hacia Catherine y Hope-. Creo que estamos a punto de cruzar una linea, y quiza querais reconsiderar si implicaros o no. Despues de todo, Ashley es hija de Scott y mia, y es nuestra responsabilidad. Hope, has sido su segunda madre, y Catherine su unica abuela real, pero aun asi no sois de su sangre y…
– Sally, cierra tu punetero pico -le espeto Hope.
La habitacion quedo en silencio. Hope se levanto y se coloco junto a Scott.
– He estado implicada en la vida de Ashley, para bien o para mal, desde el dia en que tu y yo nos conocimos -dijo-. Y aunque ultimamente no estemos nada bien y nuestro futuro sea dudoso, eso no afecta a mis sentimientos hacia Ashley. Asi que vete al infierno. Yo decidire lo que estoy dispuesta a hacer sin necesidad de que tu me sometas a interrogatorio.
– Y yo tambien -anadio Catherine.
Sally se hundio en su asiento. «Lo he fastidiado todo. ?Que demonios me pasa?», penso.
– ?Es que no entiendes nada del amor? -le espeto Hope.
La pregunta quedo flotando en el aire. Hope miro a Scott.
– Muy bien -le dijo-, explicanos exactamente que tienes en mente.
El dio un paso al frente.
– Sally tiene razon -dijo-. Estamos a punto de cruzar una linea. Las cosas van a volverse muy peligrosas a partir de ahora… -De pronto veia riesgo en todo, y eso le hizo vacilar-. Una cosa es hablar de hacer algo ilegal. Otra muy distinta es correr ese riesgo. -Miro a Ashley-. Carino, este es el momento en que te levantas y sales de la habitacion. Me gustaria que fueras arriba y esperaras a que mama o yo te llamemos.
– Pero ?que dices? -salto Ashley-. Esto tiene que ver conmigo. Es mi problema. ?Y ahora, cuando estais pensando en hacer algo para ayudarme, esperas que os deje a solas? Menuda tonteria. No pienso irme. Estamos hablando de mi vida.
De nuevo el silencio se apodero de todos, hasta que Sally hablo.
– Si, lo vas a hacer. Ashley, carino, escucha: es necesario que estes aislada legalmente de lo que decidamos hacer. Asi que no puedes ser parte de la planificacion. Probablemente te tocara hacer algo, no lo se, pero desde luego no formar parte de una conspiracion criminal. Tienes que estar protegida. Tanto de O'Connell como de las