Brady.
Iban a ser amigos. Solo amigos. Habia pasado mucho tiempo desde la ultima vez que se habia podido abandonar al lujo de la amistad. Si se sentia aun atraida hacia el… Bueno, aquello anadiria tan solo una pequena excitacion a sus encuentros. No podia arriesgar su corazon. Ni el de el.
Se apreto una mano contra el estomago maldiciendo la incomodidad que sentia. Saco del cajon una caja nueva de antiacidos y se tomo uno. Por muy festiva que fuera a ser la noche, resultaria algo estresante.
Tras comprobar el reloj, salio del dormitorio y bajo la escalera. Vanessa Sexton nunca llegaba tarde a una actuacion.
– Vaya, vaya -dijo Brady desde el vestibulo-. Sigues siendo la sexy Vanessa Sexton.
«Justo lo que necesitaba», penso ella. Los musculos del estomago se le tensaron un poco mas. ?Por que tenia que estar tan guapo? Miro la puerta abierta y luego lo observo a el.
– Llevas puesto un traje.
– Eso parece -comento el.
– Nunca te habia visto con traje. ?Por que no estas ya en casa de Joanie?
– Porque voy a llevarte alli.
– Es una tonteria. Yo tengo mi propio…
– Callate -le ordeno el. Entonces, la agarro por los hombros y le dio un beso-. Cada vez que te beso sabes mejor.
– Mira, Brady -repuso ella, cuando consiguio que su corazon se tranquilizara-, creo que vamos a tener que establecer unas reglas basicas…
– Odio las reglas…
Volvio a besarla. Aquella vez se tomo un poco mas de tiempo.
– Me va a encantar estar emparentado contigo -comento, con una sonrisa-. Hermanita…
– Pues no te estas comportando como un hermano.
– Ya empezare a darte ordenes mas tarde. ?Que te parece lo de la boda?
– Siempre he apreciado mucho a tu padre.
– ?Y?
– Y espero que no sea tan dura de corazon como para negarle a mi madre la felicidad de la que puede disfrutar a su lado.
– Con eso vale por el momento -afirmo el. Entonces, entorno los ojos cuando vio que ella se frotaba las sienes-. ?Te duele la cabeza?
– Un poco.
– ?Te has tomado algo?
– No, ya se me pasara. ?Nos vamos?
– De acuerdo -contesto Brady. La tomo de la mano para acompanarla al exterior-. Estaba pensando… ?por que no vamos al Molly's Hole como soliamos hacer entonces?
– Veo que sigues pensando en lo mismo -comento ella, riendo.
– ?Es eso un si?
– Es un «lo pensare».
– Tonta -bromeo el mientras le abria la puerta del coche.
Diez minutos mas tarde, Joanie salia por la puerta principal de su casa para darles la bienvenida.
– ?No te parece estupendo? -exclamo-. ?A mi me parece increible! Ahora si que vamos a ser hermanas, Vanessa. ?Me alegro tanto por ellos, por nosotras! -anadio, abrazando con fuerza a su amiga.
– ?Eh! -protesto Brady-. ?Y yo? ?A mi ni siquiera me vas a decir hola?
– Oh, hola Brady -dijo Joanie. Al ver la mirada que su hermano le dedicaba, se echo a reir y se abalanzo sobre el-. ?Vaya! ?Pero si te has puesto un traje y todo!
– He hecho lo que me han dicho. Papa me pidio que viniera elegante.
– Y lo estas. Los dos lo estais. ?Dios mio, Vanessa! ?Donde has comprado ese vestido? Es fabuloso. Yo seria capaz de matar por poder meter mis caderas en algo como eso. Bueno, no os quedeis aqui. Vamos dentro. Tenemos un monton de comida, de champan… De todo.
– Es una anfitriona estupenda, ?verdad? -comento Brady mientras Joanie entraba en el interior de la casa llamando a gritos a su esposo.
Joanie no habia exagerado con lo de la comida. Habia un enorme jamon caramelizado, con una montana de patatas asadas, una amplia seleccion de verduras y panecillos caseros. El aroma del pastel de manzana flotaba en el aire. El aire festivo que habia en la casa se acentuaba con las velas y el brillo de las copas de cristal.
Vanessa oyo que su madre reia mas libre y mas abiertamente de lo que recordaba nunca. Ademas, estaba encantadora. Comprendio que aquello era la felicidad. Por mucho que se esforzaba en recordar, no conseguia vislumbrar ninguna imagen de su madre con un aspecto verdaderamente feliz.
Mientras todos cenaban, ella comio muy poco. Estaba segura de que, en medio de aquella confusion, nadie se daria cuenta de lo poco que ella comia. Sin embargo, cuando vio que Brady la estaba observando, se obligo a tomar otro bocado.
– Creo que la ocasion requiere un brindis -anuncio el propio Brady poniendose de pie. Rapidamente miro a Lara-.Tu tendras que esperar tu turno -le dijo a la pequena-. Por mi padre, que ha resultado ser mas listo de lo que yo me habia imaginado. Y por su hermosa futura esposa, que solia mirar al otro lado cuando yo me metia en su jardin para estar con su hija -concluyo, entre las risas de los demas. Todos golpearon las copas.
– ?Le apetece postre a alguien? -pregunto Joanie. Todos respondieron con gemidos de protesta-. Muy bien, lo dejaremos por el momento. Jack, tu ayudame a recoger la mesa. Ni hablar -anadio cuando vio que Loretta se ponia en pie para ayudar-. La invitada de honor no recoge los platos.
– No seas tonta…
– Lo digo en serio.
– Muy bien. Entonces, limpiare a Lara.
– Esta bien. Mi padre y tu podeis mimarla todo lo que querais hasta que hayamos terminado. Tu tampoco - replico, cuando Vanessa empezo a levantarse-. No voy a consentir que friegues los platos en la primera noche que pasas en mi casa.
– Siempre ha sido muy mandona -comento Brady, cuando su hermana se marcho a la cocina-. ?Te gustaria ir al salon? Podemos poner algo de musica.
– En realidad, preferiria tomar un poco de aire fresco.
– Bien. No hay nada que me guste mas que dar un paseo al atardecer con una hermosa mujer -dijo Brady. Le dedico una picara sonrisa y extendio la mano.
Capitulo VI
La noche era templada y olia a lluvia. Los lilos habian florecido y su aroma flotaba como un elegante susurro en el aire. Al oeste, el sol se hundia en las montanas en medio de llamaradas rojizas. Rodearon la casa y se dirigieron hacia un campo de heno.
– Me he enterado de que tienes una alumna.
– Veo que la senora Driscoll hace correr muy rapidamente las noticias.
– En realidad me lo conto John Cory mientras le ponia la vacuna del tetanos. A el se lo habia dicho Bill Crampton, que es hermano del padre de Annie. Tiene una tienda de reparaciones en su garaje. Todos los hombres se reunen alli para contar mentiras y quejarse de sus esposas.
A pesar de las molestias que tenia, Vanessa se echo a reir.
– Al menos resulta tranquilizador saber que radio chismes sigue funcionando.
– ?Como fue la clase?
– Tiene… posibilidades.
– ?Como se siente uno al estar al otro lado?
– Muy rara. Le prometi que la ensenaria a tocar musica rock.
– ?Tu?