este tan cerca de ti sin tocarte. Ademas, estas en deuda conmigo, por mi reciente contusion.
Ella se froto los ojos.
– ?Reciente contusion?
– Mi nariz. Me golpeaste mientras dormias.
– No lo hice.
– Estas en lo cierto. En realidad, me golpeaste la nariz con el codo.
Ella le aparto el pelo de los ojos y le toco la nariz, que le habia golpeado accidentalmente.
– Oh, por dios. Creo que tendre que besarte la herida y compensarte.
Su mirada fue malvada y calida mientras se trepaba sobre su cuerpo.
– Tengo otra herida que precisa de tus besos.
Ella miro entre sus cuerpos para ver su ereccion.
– Mmm, parece una herida bastante grande, ?no crees?
Xypher la beso, su corazon desbocado por la forma en que ella lo provocaba con malicia. El realmente adoraba lo novedoso de la accion.
La gente le temia. El los enfurecia.
Nadie jamas habia reido o jugado con el.
Y en ese momento fue donde llego a la conclusion mas impactante de todas.
Muy profundamente, en un lugar que nunca antes habia mirado, el sentia ese amor arder. Le quemaba y le dolia, y haria cualquier cosa en el universo y tal vez mas, para mantenerla a salvo. Ese conocimiento lo ensalzo.
Y lo aterrorizo en lo mas profundo de su alma.
?No! La negacion lo recorrio como un bramido. No queria amar a nadie. El amor era para los tontos descerebrados.
Echando un vistazo a su brazo leyo las palabras que habia grabado ahi…
Le habia entregado su amor a Satara y ella se lo habia arrojado en la cara y lo habia atacado por su estupidez. Pero Satara jamas lo habia tratado de esta manera. No habia habido risas. Ni besos carinosos. Nada de sonrojos matutinos y caricias que lo enternecieran hasta lo mas profundo de su corazon.
Y a pesar del horror de su reciente descubrimiento sobre Simone, estaba el conocimiento de que en realidad, el nunca habia amado a Satara. Habia tenido tantos deseos de conocer el amor que habia retorcido el concepto para adecuarlo a una relacion en la que no tenia cabida.
Esta vez el amor lo habia sorprendido y lo habia aporreado en la cabeza de la forma mas inesperada. Esas emociones lo tomaron por sorpresa, no fueron conjuradas por alguna carencia que el tuviera.
Cuando conocio a Simone, y la empujo dentro de su coche, ella no era mas que un titere.
Ahora, ella era su mundo.
Y no habia nada que no fuera capaz de hacer por ella. ?Como demonios habia pasado eso? Si, no habia forma de negarlo. El insignificante impostor, que no habia sido querido por nadie, le habia entregado su corazon a una humana
Simone gimio al sentir un cambio en el toque de Xypher. Era tierno y dulce. Casi reticente.
Y al mismo tiempo era dominante. Sus manos vagaban por su cuerpo, dandole placer y haciendola suspirar.
Levantando su mano, le beso los nudillos cubiertos de cicatrices. Luego tomo la punta de su dedo indice en su boca para succionarlo suavemente.
Xypher rodo con ella, colocandola sobre el. Sonriendo, Simone monto a horjacadas sobre su cintura y lo miro con una expresion de ternura.
El nunca habia visto nada tan hermoso o acogedor.
– Amame, Simone.
– ?Que?
– Hazme el amor.
Simone asintio. La necesidad afloraba en los ojos de el. Algo le decia, que para el representaba mas que solo un acto fisico. Intentando demostrarle que ella jamas lo lastimaria, lo beso suavemente en los labios mientras se deslizaba sobre el.
Xypher echo su cabeza hacia atras, mientras ella se movia lentamente contra sus caderas. Era una tortura exquisita. Lenta y constante. Tan feroz, que todo lo que el podia hacer era estremecerse.
Estaba indefenso ante su mujer y sus candidos encantos.
La luz ilumino su cuerpo, haciendola resplandecer. Ella se inclino sobre el, permitiendo que las puntas de su cabello le rozaran el abdomen y pecho, mientras lo montaba suavemente.
Mordiendose el labio, elevo sus caderas, penetrando mas profundo en ella. Necesitando sentirla tanto como fuera posible.
Simone sonrio ante la belleza de Xypher. Recorrio su musculoso pecho con las manos, ahuecando y acariciando la enrojecida carne. No se imaginaba volver a una vida en la que no pudiera ver su rostro todos los dias. Eso la mataria.
En un abrir y cerrar de ojos, ella se habia acostumbrado a que el fuera una presencia constante en su vida.
No queria que se marchara nunca.
Normalmente, estar rodeada todo el tiempo, la ponia de mal humor. Aun con Tate. Pero Xypher era como Jesse. Aunque pudiera ser fastidioso, era encantador y a ella no le importaba en lo absoluto.
Sus ojos la quemaban, el tomo su mano entre las suyas y se la llevo a la boca para mordisquearle el costado. Dios, esos labios eran hermosos. Inclinandose hacia adelante, ella paso la lengua sobre la barba de su menton. Era tan aspero y masculino. Ella adoraba la sensacion de picor en la piel.
Xypher la envolvio en sus brazos y elevo las caderas, para acompanar sus embistes.
La calidez de su cuerpo y el tacto de su piel contra la de ella, era mas de lo que ella podia soportar. Ella se corrio, mirandolo a los ojos, en un cegador momento de abrasadora paz.
Xypher emitio una risa gutural al sentir su climax y observar el placer reflejado en sus facciones. Adoraba la forma en que ella se sentia entre sus brazos, la forma en que sus cejas se juntaban un instante antes de que ella se corriera. Y el sonido de sus ronroneos de satisfaccion mientras los espasmos contraian su cuerpo contra el.
Enterrando el rostro en su hombro, el jadeo al sentir llegar su propia liberacion. Oprimiendo su cuerpo contra ella, la sostuvo muy cerca mientras se liberaba dentro de ella.
Ella se derrumbo sobre el. El la mantuvo ahi, trazando las lineas de su espalda mientras el aliento de ella caia sobre su pecho.
– Que perfecta forma de comenzar el dia.
La beso en lo alto de la cabeza.
– Si, lo fue.
Simone suspiro satisfecha, estirandose como una gatita recien nacida junto a el.
– Ahora no quiero levantarme. Quiero quedarme aqui en tus brazos por el resto del dia… ?crees que Jesse podria impartir mis clases?
El se rio entre dientes.
– Creo que verle intentarlo podria ser realmente entretenido.
– Bueno, te pediria que lo hicieras tu, pero eso le quitaria el proposito a mi idea de quedarme aqui… ?me pregunto si podria jubilarme tempranamente y vivir en las calles? ?Que opinas al respecto?
– Vivir en las calles, no creo que funcione. No tendriamos suficiente privacidad para lo que quiero hacer contigo.
Ella sonrio.
– Muy buen punto.
Su reloj despertador comenzo a sonar.
Xypher gruno ante el ruido ensordecedor.