en su casa, rodeada por
Z levanto su cabeza. Su torso. Se levanto. Con voluntad, que alguna vez fue la unica gracia que tenia, y vino al rescate otra vez. Esto tiro mas de la droga, lo enfoco, lo limpio mejor que los vomitos.
– Ire por Phury -dijo a sus hermanos-. Ustedes tengan cuidado con el trabajo.
Hubo una breve pausa. Entonces Wrath dijo.
– Asi sea.
CAPITULO 46
Bella se sento en una silla Louis XIV, sus piernas cruzadas en los tobillos, sus manos en su regazo. Un resplandor chisporroteo en una chimenea de marmol a la izquierda, y habia una taza de Conde de te Gris en su regazo. Marissa estaba atravesada en un delicado sofa, preparando un hilo de seda amarilla para una malla de bordado. No habia ningun sonido ni movimiento.
Bella penso que iba a gritar.
Se levanto de un salto, activada por el instinto. Zsadist… Zsadist estaba cerca.
– ?Que es eso? -dijo Marissa.
Aporreando la puerta principal a lo lejos parecia un tambor, un momento despues Zsadist entro en el salon. Estaba vestido para su trabajo, armas en sus caderas, dagas atadas en una correa en su pecho. El derecho doggen en sus talones parecia terriblemente asustado.
– Dejadnos -le dijo a Marissa-. Y llevate a tu criado.
Cuando la hembra vacilo, Bella aclaro garganta.
– Esta bien. Es… Vete.
Marissa inclino la cabeza.
– No estare lejos.
Bella se sostuvo en el lugar cuando por fin salieron.
– Te necesito -dijo Zsadist.
Ella entrecerro los ojos. Dios, aquellas palabras que habia querido oir. Que cruel que hubieran llegado tan tarde.
– ?Para que?
– Phury tomo de tu vena.
– Si.
– Te necesito para encontrarlo.
– ?Esta perdido?
– Tu sangre esta en sus venas. Te necesito.
– Para encontrarlo. Oi eso. Dime por que. -La breve pausa que siguio la enfrio.
– El
Su aliento dejo sus pulmones. Su corazon se paro.
– ?Como…?
– No tengo tiempo para explicarte. -Zsadist avanzo, mirandola como si fuera a tomar sus manos, pero entonces se paro-. Por favor. Tu eres la unica que puede encontrarlo, porque tu sangre esta con el.
– Por supuesto… por supuesto lo encontrare para ti.
Esto era la cadena de lazos de sangre, penso. Ella podria localizar a Phury en todas partes porque se habia alimentado de ella. Y despues de que ella habia estado en la garganta de Zsadist, el seria capaz de rastrearla por la misma razon.
El puso su cara directamente en la suya.
– ?Quiero que me pongas dentro de cincuenta yardas de el, no mas cerca, entendido? Y luego te desmaterializas derechito aqui.
Ella lo miro a los ojos.
– No te defraudare.
– Desearia que hubiera otro modo de encontrarlo.
– Sin duda lo haces.
Ella dejo el salon y consiguio su abrigo, luego estuvo de pie en el vestibulo. Cerro sus ojos y extendio la mano en el aire, perforando primero las paredes de la entrada del camino, despues la estructura externa de la casa de Havers. Su mente expulsada sobre los arbustos, el cesped, a traves de arboles y casas… Por coches, camiones y edificios y a traves de parques, rios y corrientes. Mas lejos todavia a las tierras de labranza y a las montanas…
Cuando encontro la fuente de energia de Phury, un dolor la asalto, como si fuera lo que el sentia. Cuando se balanceo, Zsadist agarro su brazo.
Ella lo aparto.
– Lo tengo. Oh, Dios… es el.
Zsadist agarro su brazo otra vez y la obligo.
– Cincuenta yardas. No mas cerca. ?Esta claro?
– Si. Ahora me voy.
Ella salio por la puerta principal, desmaterializandose y tomo forma a aproximadamente a veinte yardas de distancia de una pequena cabana en los bosques.
Sintio que Zsadist la tomaba por el codo.
– Vete -silbo-. Sal de aqui.
– Pero…
– Si quieres ayudar, marchate asi no me preocupare por ti.
Bella examino su cara y se desmaterializo.
Zsadist se acerco furtivamente a la cabana de troncos, agradecia el aire frio que le ayudo a despejarse un poco mas de la morfina. Cuando se aplano contra una pared aspera, no envaino la daga y miro detenidamente en una de las ventanas. No habia nadie, solo algo rustico, un mobiliario de mierda y un ordenador.
El panico se apodero de el, como una lluvia fria que corria por su sangre.
Y luego oyo el sonido… un golpe. Entonces otro.
Habia una dependencia mas pequena sin ventanas aproximadamente veinticinco yardas atras. Corrio y escucho solo una fraccion de segundo. Entonces cambio su cuchillo por una Beretta y derribo la puerta.
La vista ante el era su propio pasado: un macho encadenado a una mesa, golpeado en carne viva. Un psicopata demente estaba de pie sobre la victima.
Phury levanto su cara destrozada, con sangre que relucia en los labios hinchados y su nariz. El
Zsadist apunto su arma al hijo de puta, pero el asesino tenia razon delante de Phury; el error de calculo mas leve y la bala iban a perforar a su gemelo. Z dejo caer el canon, apreto el gatillo, y la clavo en la pierna, rompiendo su rodilla. El bastardo grito y cayo al suelo.
Z fue por el. Excepto que cuando agarraba al no muerto, otro disparo sono.
El resplandor del tiro llego al hombro de Z. sabia que le habia dado uno bueno, pero no podia pensar en esto ahora. Se concentro en la adquisicion del control del arma del lesser, que era la misma cosa que el HP trataba de hacer con la Sig de Z. Lucharon en el suelo, con cada tentativa de conseguir un apreton en el otro, a pesar de la sangre que era el engrase entre ellos. Los punetazos fueron lanzados, las manos agarradas y las piernas azotadas. Ambos brazos se perdian en la lucha cuerpo a cuerpo.
Aproximadamente a los cuatro minutos de lucha la fuerza de Z comenzo a decaer a una velocidad alarmante. En ese momento, estaba en el suelo, el
En la calma del enfrentamiento, el