Fisk porque lo consideraban un hombre piadoso que compartia sus valores y que protegeria a sus nietos.

?Por que votaba el senor Fisk a favor de una empresa criminal de otro estado?

La secretaria judicial es la encargada de asignar los casos que se admiten a revision en el tribunal supremo entre los nueve jueces, que no poseen control alguno sobre dicho proceso. Todos saben que de cada nueve casos uno acabara en su mesa. Trabajan en grupos de tres jueces durante seis semanas, tras las que los pequenos jurados vuelven a redistribuirse.

En casi todos los casos que llegan al tribunal supremo, los abogados solicitan una exposicion oral, aunque pocas veces se les concede. Los jueces oyen a los abogados en menos del 5 por ciento de las apelaciones.

Dada la cuantia de la indemnizacion, los tres jueces que presidian el caso de Jeannette Baker contra Krane Chemical Corporation lo consideraron suficientemente importante para conceder una audiencia a los abogados, que comparecieron el 7 de febrero: Jared Kurtin y su tropa, y todo el bufete de Payton amp; Payton.

El caso habia sido asignado al juez Albritton hacia meses.

Ron Fisk no tenia trabajo ese dia en el tribunal y por eso no estaba alli. Tony Zachary se paso por la sala por curiosidad, pero se sento en la ultima fila y no hablo con nadie. Decidio tomar notas y llamar a Barry Rinehart en cuanto la vista hubiera acabado. Tambien habia un vicepresidente de Krane en la ultima fila haciendo lo propio.

Cada parte disponia de veinte minutos para llevar a cabo su exposicion, tiempo controlado por un reloj digital que iba marcando los segundos. El secretario judicial les aviso: estaban prohibidos los alegatos prolijos. Jared Kurtin fue el primero, y no tardo en llegar al meollo de la apelacion de su cliente. Krane siempre habia defendido que no existia ninguna relacion medica razonable y creible entre el DeL y el cartolyx encontrado en sus propiedades y los canceres que padecian tantos ciudadanos de Bowmore. Krane jamas admitiria que se habian llevado a cabo vertidos ilegales, pero, hipoteticamente hablando, aunque asumiera que se filtraran residuos toxicos en el suelo y que estos acabaran en el agua, no existia una «relacion causal» entre los productos quimicos y los canceres. Si, de acuerdo, se habia especulado mucho. Solo habia que mirar la incidencia del cancer en Bowmore o los conglomerados de cancer. Sin embargo, la tasa de incidencia del cancer varia de manera considerable de una zona a otra y, lo mas importante, hay miles de carcinogenos en el aire, en la comida, en las bebidas, en los productos del hogar, la lista es interminable. ?Quien puede asegurar que el cancer que acabo con la vida del pequeno Chad Baker procedia del agua y no del aire? ?Acaso pueden descartarse los carcinogenos encontrados en las comidas preparadas que la senora Baker habia admitido consumir durante anos? Es imposible.

Kurtin estaba en forma, y los tres jueces lo dejaron hablar durante diez minutos. A dos ya los tenia en el bolsillo, aunque no al juez Albritton, quien finalmente pregunto:

– Senor Kurtin, disculpeme, pero ?habia mas fabricas o plantas en la zona que fabricaran pesticidas o insecticidas?

– No, que yo sepa, senoria.

– ?Significa eso que no?

– La respuesta es no, senoria. No habia mas fabricas en el condado de Cary.

– Gracias. Con todos los expertos con que cuentan, ?encontraron cualquier otra fabrica o planta donde se procesara o se deshicieran del dicloronileno, el cartolyx o el aklar?

– No, senoria.

– Gracias. Cuando afirma que en otras partes del pais tambien se dan altos porcentajes de casos de cancer, no estara insinuando que alguno de esos lugares supera quince veces la media nacional, ?verdad?

– No, no lo insinuo, pero si cuestionamos que la supere en quince veces.

– Bien, entonces, ?estipularia usted una incidencia de cancer mayor a doce veces la media nacional?

– No creo que…

– Eso es lo que su experto dijo en el juicio, senor Kurtin. La incidencia en Bowmore supera en doce veces la media nacional.

– Si, creo que es correcto, senoria.

– Gracias.

No hubo mas interrupciones, y Kurtin acabo pocos segundos despues del timbre del cronometro.

Mary Grace estaba espectacular. Puede que los hombres se vieran limitados a trajes negros o azul marino, camisas blancas, corbatas sin gracia y relucientes zapatos negros, el atuendo diario, habitual y aburrido, pero para las mujeres no habia ninguna norma establecida. Mary Grace llevaba un vestido alegre que le llegaba justo por encima de las rodillas y una chaqueta a juego de media manga. Zapatos de tacon de aguja. Mucha pierna, aunque ocultas para los tres jueces una vez subia al estrado.

Retomando el hilo donde el juez Albritton lo habia dejado, se lanzo a un ataque contra la defensa de Krane. Durante veinte anos como minimo, la compania habia estado vertiendo ilegalmente toneladas de carcinogenos de grupo 1 en el suelo. Como causa directa de estos vertidos, el agua de boca de Bowmore habia acabado contaminada por esas mismas sustancias cancerigenas, ninguna de las cuales se fabricaban, vertian o ni siquiera se encontraban en cantidades significativas en ningun otro lugar del condado. La gente de Bowmore bebio el agua igual que los tres miembros de ese jurado habian bebido agua esa manana.

– Se han afeitado, se han lavado los dientes, se han duchado, han utilizado el agua de la ciudad para el cafe y el te. La han bebido en casa y aqui, en el trabajo. ?Alguno se ha parado a pensar en el agua? ?De donde viene? ?Si es segura? ?AIguno de ustedes se ha detenido a pensar por un solo momento si su agua contenia carcinogenos? Seguramente no. La gente de Bowmore tampoco.

Como resultado directo de beber agua, la gente enfermo. La ciudad se vio arrasada por una oleada de cancer jamas vista en el pais.

– Y, como siempre, esta selecta y responsable compania de Nueva York -aqui se volvio y senalo con la mano a Jared Kurtin-Io nego todo. Nego los vertidos, el encubrimiento, nego haber mentido, incluso nego sus propias negaciones. Y lo mas importante, nego cualquier causalidad entre sus carcinogenos y el cancer. De hecho, tal como hoy hemos oido, Krane Chemical echa la culpa al aire, al sol, al medio ambiente, incluso a la mantequilla de cacahuete y al pavo en lonchas que Jeannette Baker compraba para alimentar a su familia.

»Al jurado le gusto mucho esa parte del juicio -continuo Mary Grace, para unos asistentes que aguardaban en silencio-. Krane vertio toneladas de productos quimicos contaminantes en nuestro suelo y en nuestra agua, pero, eh, echemosle la culpa a la mantequilla de cacahuete Jif.

Tal vez fuera por respeto hacia la mujer, o quiza fue su reticencia a interrumpir una exposicion tan vehemente, el caso es que ninguno de los tres jueces dijo nada.

Mary Grace termino con un rapido repaso a la ley. La legislacion no les exigia que demostraran que el del encontrado en los tejidos de Pete Baker procediera directamente de las instalaciones de Krane. Hacer eso elevaria el estandar de prueba a prueba clara y convincente y la ley solo exigia una preponderancia de la prueba, un estandar menos riguroso.

Cuando se le acabo el tiempo, se sento junto a su marido.

Los jueces dieron las gracias a los abogados y a continuacion pasaron al siguiente caso.

La reumon de invierno de la ALM tue deprimente. Todo el mundo acudio. Los abogados litigantes estaban nerviosos, profundamente preocupados, incluso asustados. El nuevo tribunal habia revocado las dos primeras sentencias a favor del demandante que tenia pendientes nada mas empezar el ano. ?Iba a ser aquello el principio de una mala racha? ?Habia llegado el momento de dejarse llevar por el panico o ya era demasiado tarde?

Un abogado de Georgia ayudo a ensombrecer aun mas el ambiente con un resumen de la lamentable situacion de su estado. El tribunal supremo de Georgia tambien estaba compuesto por nueve miembros, ocho de los cuales eran leales al gran capital y revocaban sistematicamente las sentencias de demandantes heridos o fallecidos. Habian revocado veintidos de los ultimos veinticinco fallos. A resultas de esto, las aseguradoras ya no estaban dispuestas a pactar, ?para que? Ya no temian a los jurados porque eran duenas del tribunal supremo. Tiempo atras, en la mayoria de los procesos se conseguia un acuerdo antes de llegar a juicio y para un abogado litigante eso significaba un numero de causas manejable. En esos momentos no habia manera de llegar a un acuerdo y el abogado de la parte demandante tenia que llevar todos los casos a juicio. E incluso, aunque obtuviera un veredicto favorable, todavia tenia que enfrentarse a una apelacion. En consecuencia, los abogados aceptaban menos casos y cada vez habia mas personas con lesiones, con reclamaciones legitimas, que no estaban siendo

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