—No hay necesidad: he visto lo suficiente. Ella es la persona.
Indigo recurrio a Leando de nuevo.
—?Leando, tienes que decirme de que se trata todo esto! Tu tio habla de comprobaciones, y Karim me dice que yo soy «la persona». En nombre de la Madre, ?que significa esto?
Leando y Mylo intercambiaron una mirada, luego Mylo asintio con la cabeza de forma casi imperceptible. Leando se sento junto a Indigo.
—Lo siento si te hemos asustado —dijo—, pero teniamos que estar seguros de ti antes de atrevernos a ir mas adelante, y la opinion de Karim era la unica en la que podiamos confiar. Ahora que ha confirmado nuestra creencia, puedo explicar mas cosas.
»El ano pasado, poco despues de la invasion y la derrota de nuestro Takhan, Karim, bajo su apariencia de buhonero en el Templo de los Marineros, se encontro con una extranjera cuya presencia en Simhara, segun le dijo su instinto, tenia una gran significacion. Utilizo sus poderes de adivinacion para ahondar mas en la cuestion, y lo que descubrio lo persuadio de venir a vernos. El y mi tio son antiguos amigos, y Karim conocia nuestro descontento. Nos dijo que esa extranjera, una mujer que ahora vivia en palacio, era vital para nuestra causa. —Se detuvo, volvio a mirar a Mylo y recibio una nueva y leve indicacion de que siguiera adelante—. En resumen, que ella tenia la llave para la derrota y destruccion del usurpador.
Boquiabierta, Indigo se quedo mirando a Karim. Estaba perpleja y se sentia mortificada de pensar que el ciego era capaz de adivinar tanto en un breve encuentro casual; y ello le hizo preguntarse de nuevo, llena de inquietud, que mas podria haber descubierto Karim sobre ella.
Se dirigio al ciego, escogiendo las palabras con sumo cuidado.
—Maestro Karim, no soy experta en las cuestiones arcanas, ni en el arte de la adivinacion. ?Podeis explicarme que os llevo a tal conclusion sobre mi?
La mirada que Karim le devolvio fue desconcertante, ya que parecia como si, a pesar de su ceguera, sus ojos la retaran llenos de ironia.
—Otros confian en las estrellas o en los augurios para guiarse, mi senora —respondio—. Pero yo he seguido un camino que me permite ver lo que hay en tu
Estaba siendo deliberadamente enigmatico, penso ella, y eso le preocupo.
—Senor, yo... —empezo a insistir, pero el la interrumpio.
—No, mi senora; no hay nada mas que te pueda decir ahora, aparte de que se que eres digna de confianza. De momento, date por satisfecha con esto.
Indigo cedio, consciente de que seguir arguyendo resultaria inutil. Karim volvio la cabeza hacia la ventana y olfateo el aire.
—Se esta haciendo tarde —anuncio—. Huelo como la marea regresa al puerto. Deberiamos terminar nuestro asunto deprisa, Mylo; no seria muy sensato enviar a la dama de regreso a palacio a una hora que pudiera despertar demasiada curiosidad.
—Si. —Mylo se volvio hacia Indigo—: Indigo, te hemos retenido excesivamente. Pero antes de que te vayas, tengo algo que decir. Karim nos ha dicho que podemos confiar en ti,
y esa es toda la garantia que necesitamos. No obstante, me doy cuenta de que no podemos esperar que tu, por tu parte, confies en nosotros. Leando me ha hablado de tus dudas y las comprendo. Te pido tan solo que consideres lo que voy a decirte, y que lo que oiras no sera repetido fuera de las paredes de esta habitacion.
—No lo sera, senor —repuso Indigo en voz baja—. Leando sabe que, como minimo, soy neutral a vuestra causa. Esbozo una ligera sonrisa—. Y ha tenido buen cuidado de explicarme el precio de la traicion. Tengo en bastante estima mi vida.
Leando le devolvio la sonrisa un poco avergonzado, y Mylo asintio:
—Mi sobrino carece a veces de sutileza, pero... muy bien; creo que todos comprendemos la posicion en que estamos. Creo, Indigo, que estas enterada de nuestras intenciones de sacar al usurpador Augon Hunnamek del trono de Khimiz y poner a la Infanta, la autentica soberana de nuestro pais, en su lugar.
Indigo asintio con la cabeza.
—Eso es lo que me ha contado Leando —dijo—. ?Pensais, supongo, asesinarlo?
—Si. —Mylo sonrio con frialdad—. Un hombre como Augon Hunnamek jamas admitiria la derrota si simplemente se lo depusiera: tiene que morir. Ademas, tenemos otras razones de indole personal para derribarlo. Es probable que no lo sepas, pero nuestra familia esta emparentada en segundo grado con la familia real de Khimiz. —Un tono duro aparecio en la voz de Mylo—. El antiguo Takhan, por imperfecto que pudiera haber sido, era nuestro primo, y es por lo tanto nuestro deber, al igual que nuestro deseo, el vengarlo.
Indigo medito sobre aquello durante unos minutos. No habia estado enterada de la conexion de los Copperguild con la familia real, y la revelacion confirio peso y conviccion a lo que habia escuchado esta noche. Pero desear la muerte a Augon Hunnamek era una cosa; matarlo, otra muy diferente.
Les dijo:
—No sera tarea facil, Mylo. El nuevo Takhan esta muy bien protegido en palacio, como Leando y yo bien sabemos. Y tambien esta demostrando ser un gobernante popular; considerablemente mas popular, por lo que he oido, de lo que fue su predecesor. Si lo asesinais puede que provoqueis la colera de todo Khimiz.
—Eso es muy cierto —concedio Mylo—. Pero si existe una cualidad que esta mas inculcada en los khimizi que la supersticion, es el pragmatismo. El mismo pragmatismo que acepto el gobierno del usurpador sin una protesta, aceptara tambien su muerte, siempre y cuando no suponga ninguna amenaza para la paz y prosperidad de Khimiz. Y —su expresion se suavizo—, te olvidas de la Infanta. A pesar de que no es mas que un bebe, el pueblo la adora. Pese a lo mucho que nuestro pueblo finja apreciar al usurpador, en el fondo de su corazon sabe perfectamente que Jessamin es nuestra autentica Takhina.
Por logica, lo que decia tenia su sentido, pero Indigo era consciente de que existia un fallo terrible. Mylo creia que trataba con un ser mortal; un hombre poderoso y astuto quiza, pero mortal, y por consiguiente falible. Ella sabia la verdad. Y si la entidad malefica que era el autentico Augon Hunnamek sospechara por un solo instante la existencia de un complot contra el, entonces ninguna cantidad de discrecion o estrategia protegeria de las consecuencias a los conspiradores de las consecuencias.
Sin embargo no podia contarles la verdad a Mylo y a Leando. No se
estuviera segura de que podia confiar en ellos. E incluso entonces, se recordo sombria, ?la creerian? Incluso la supersticion khimizi no llegaba tan lejos, y no tenia ninguna prueba con excepcion de su intuitiva certeza.
Repuso, con voz ligeramente temblorosa:
—?Como pensais matarlo?
Se produjo una larga pausa. Elsender se aclaro la garganta nervioso, mientras que Leando clavaba sus ojos en el suelo. Karim sencillamente continuo sorbiendo su vino. Por fin, Mylo respondio:
—Tenemos un plan, pero todavia hay muchos detalles que deben pulirse, y no queremos precipitarnos. Todo debe estar a punto, y pensamos que... perdoname, pero pensamos que es mas sensato no revelar mas, a menos que estemos seguros de que estas dispuesta a unirte con nosotros. Por tu bien y tambien por el nuestro.
Ella asintio.
—Comprendo. Pero, ?entretanto?
—?Entretanto?
—Me habeis pedido que viniera aqui esta noche para algo mas que comprobar mi integridad. Quereis algo de mi.
—Si. Sencillamente tu garantia de que protegeras a la Infanta, hasta que estemos preparados.
Ella lo contemplo sorprendida.
—?Teneis alguna duda de ello?
Karim se agito en su asiento. Sus ojos ciegos escudrinaron la habitacion y parecieron, de forma desconcertante, lavarse en el rostro de Indigo.
—No tengas la menor duda de ello, Mylo, viejo amigo —dijo con suavidad—. La dama dice la verdad. Y aunque puede que no se atreva a admitir sus mas intimos sentimientos, nuestra causa es la suya. Puedes estar seguro de filo, y deja que esta seguridad te conceda un descanso tranquilo esta noche.
Su sonrisa fue solo para Indigo, y esta se estremecio en su interior.
—Si —dijo—. La protegere.
Se despidio de Mylo y Elsender, luego, con cierta inquietud, de Karim, y por ultimo de Leando, quien no iba a