– Debe de haber sido esta noche durante la cena. -Se meso los cabellos-. Deberia haberlo sospechado, tendria que haber imaginado que haria algo asi, pero no queria creer que pudiera ser tan estupido.
– ?Quien?
Victoria se quedo inmovil ante la mirada torturada que vio en los ojos de Nathan.
– Colin -respondio el con la voz impregnada de angustia-. Ha estado aqui. Esta noche. Le he visto en el cesped, yendo hacia el bosque. Cuando he registrado su habitacion, he encontrado esto.
Victoria cogio el papel vitela que el le ofrecia y fruncio el ceno al ver las palabras y el dibujo que no logro reconocer.
– ?Que es esto?
– El mapa y la nota falsos que nos robaron.
Victoria sintio que se le desorbitaban los ojos al ser consciente de lo que aquello queria decir.
– Eso significa que Colin…
– Esta implicado. Solo hay dos maneras de que haya podido hacerse con la nota. Una, que contratara a aquel bastardo para que la robara. O dos que se la robara a aquel bastardo.
Victoria escudrino su mirada.
– ?Y cual crees tu que es la acertada?
– Que Colin se la robo a nuestro ladron -dijo sin dudarlo-. Mi hermano, entre sus multiples talentos, es un formidable ladron. Muy util durante nuestra epoca de espias. Y, al parecer, todavia lo es.
Victoria daba vueltas a aquellos retazos de informacion mientras seguia mirando el papel vitela.
– Es decir, que crees -dijo despacio- que Colin se cruzo con nuestro ladron, le robo la carta y el mapa y ha estado desde entonces intentando encontrar las joyas… aunque empleando para ello la informacion incorrecta… - Levanto los ojos y su mirada y la de Nathan se encontraron-. Ahora no solo tiene la carta y el mapa autenticos, y por consiguiente la informacion correcta, sino tambien nuestro mapa cuadriculado en el que aparecen senaladas todas las zonas que ya hemos cubierto.
Los rasgos tensos de Nathan se relajaron un poco y una inconfundible admiracion brillo en sus ojos. Extendio el brazo, tomo la mano de Victoria y se la llevo a los labios, depositando un calido beso en sus dedos.
– Mi querida Victoria, ?te he dicho alguna vez que adoro tu capacidad para abrirte paso entre la niebla mas espesa e ir directamente al meollo de la cuestion?
Victoria contuvo el aliento al ver la intensidad que hervia en la mirada de el y nego con la cabeza.
– No creo haberte oido mencionarlo.
– Pues dalo por mencionado. -Tras depositar otro breve beso en sus dedos, le solto la mano y empezo a pasearse delante de ella.
Victoria le observo en silencio durante un minuto entero. Era tanta la preocupacion que vio en la expresion de Nathan que no pudo por menos que sufrir por el. La siguiente vez que el paso por delante de ella, tendio la mano y se la puso en el brazo, deteniendole.
– Estas pensando que Colin tuvo algo que ver con el fracaso de la mision hace tres anos -dijo con delicadeza. Le apreto suavemente el brazo en un gesto de compasion-. Lo siento.
Nathan nego con la cabeza, ligeramente sorprendido.
– De hecho, no, no es eso lo que pienso. Cualesquiera que sean las faltas que Colin pueda cometer, es un hombre de honor e integridad. Desgraciadamente, tambien tiene tendencia a ser muy audaz. Lo que creo es que, de algun modo, se habra enterado de la verdad sobre lo que ocurrio hace tres anos y, en vez de contarmela, ha decidido solucionar las cosas sin ayuda de nadie.
– Pero ?por que no iba a explicartela? ?Por que no contar con tu ayuda?
Un musculo se contrajo en la mandibula de Nathan.
– Tan solo puedo aventurarme a imaginar, pero diria que es porque hace tres anos dudo de mi. Creo que, durante estos ultimos tres anos, por mucho que el quisiera creer en mi inocencia de cualquier fechoria, seguia manteniendo esa sombra de duda. Cuando descubrio lo que de verdad habia ocurrido, y se dio cuenta de que yo no habia traicionado la mision… -Dejo escapar un largo suspiro-. Estoy seguro de que le pudo el sentimiento de culpa. Conociendole como le conozco, creo que esta actuando por cuenta propia respondiendo a una especie de penitencia autoimpuesta. Es una forma de compensarme por su falta de fe en mi. Quiere encontrar las joyas, descubrir al traidor y limpiar mi nombre.
Victoria escruto su mirada.
– Eso es lo que sientes porque es eso exactamente lo que tu harias por el.
– Si. Lo haria.
– Apenas conozco a tu hermano, de modo que en calidad de observadora objetiva me siento en la necesidad de apuntar que, aunque podrias estar en lo cierto… es igualmente posible que estes equivocado. Puede que Colin sea el responsable de todo lo ocurrido.
– Cabe la posibilidad de que tengas razon, pero no me equivoco. Y eso significa que Colin podria estar en un grave peligro. -La tomo de la mano y la condujo hacia el escritorio de cubierta inclinada de caoba situado junto a la ventana-. Voy a reproducir la carta descifrada y la cuadricula, y quiero que tu vuelvas a dibujar el mapa. Luego los estudiaremos hasta que descubramos lo que se nos ha escapado. Hasta que averiguemos cual es el mejor lugar donde buscar. El instinto me advierte de que no tenemos mucho tiempo. No creo que podamos registrar las cinco cuadriculas que todavia nos quedan en el mapa.
Durante los treinta minutos siguientes, el unico sonido que se oyo en la habitacion, ademas del crepitar de la madera que ardia en la chimenea, era el rasgar de las plumas sobre el papel vitela. Victoria ocupo las dos horas siguientes en estudiar al detalle la serie de garabatos que habia dibujado. Pa recian un autentico galimatias. Hizo girar despacio el papel vitela, mirando las lineas desde todos los angulos hasta que se le irritaron los ojos.
– He intentado una docena de codigos distintos, pero no logro descifrar nada mas -dijo Nathan con la voz cargada de frustracion-. ?Has encontrado algo en el mapa?
– No… aunque acaba de ocurrirseme una idea. -Victoria irguio aun mas la espalda y miro fijamente las lineas-. Hasta ahora hemos dado por hecho que, por las palabras «formacion rocosa» que aparecen en la carta, este dibujo describia la formacion particular en la que estaban escondidas las joyas. Pero ?y si en realidad describe otra cosa?
– ?Como que?
– No lo se. ?Quiza un monticulo cubierto de vegetacion en la costa?
Nathan acerco su silla a la de ella y miro el dibujo con atencion.
– En tal caso, o bien hemos pasado por alto las joyas o la informacion de Baylor era erronea. -Deslizo hacia ellos el mapa cuadriculado que habia reproducido y senalo las zonas todavia inexploradas-. Todos los sectores restantes estan situados en el interior, demasiado alejados del mar. Aunque creo que quiza tengas razon cuando dices que puede que esto no sea un dibujo que refleje la formacion rocosa en si.
Ambos estudiaron las lineas con atencion, y Victoria musito:
– ?Y si se trata de una serie de caminos, o de senderos?
Nathan asintio y senalo luego un punto donde las lineas se encontraban.
– Podrian ser tres caminos que convergieran aqui.
Victoria le miro con una creciente sensacion de excitacion.
– ?Conoces algun lugar asi en la propiedad? ?Donde converjan tres caminos junto a una formacion rocosa?
Nathan se levanto y se paseo por la habitacion con las cejas unidas en un profundo ceno. Obligandose a guardar silencio para no interrumpir sus pensamientos, Victoria casi podia ver como giraban las tuercas en su cabeza mientras el escudrinaba mentalmente la vasta extension de terreno de la finca.
– Cerca de la zona situada mas al norte -mascullo Nathan. Acto seguido, meneo la cabeza-. No, alli no hay rocas. -Se detuvo junto al escritorio y volvio a estudiar el mapa cuadriculado-. Hay tantos caminos… -Sacudio la cabeza en una clara muestra de frustracion-. Pero no se me ocurre nada. Tendria que pensarlo con detenimiento… -Se detuvo de pronto y volvio la vista a los garabatos que Victoria habia dibujado-. Agua -dijo-. No son caminos de barro, sino agua. Arroyos. -Repitio la palabra «arroyos» en media docena de ocasiones, cada vez mas y mas excitado. Luego senalo en el mapa cuadriculado uno de los sectores que todavia no habian registrado y que cubria el extremo noroeste mas alejado de la finca.
– Aqui. Hay tres arroyos que convergen aqui. Esto senala la frontera entre la propiedad de mi familia y la finca de Alwyck.