precio la proxima vez que se la ensenara a alguien.

– ?Que estas pensando? -pregunto Jackson, y Molly descubrio que el la estaba observando-. Estaba pensando en subir el precio.

– ?Crees que tres millones es barato?

– Lo es, y tu lo sabes.

Jackson miro a su alrededor y tuvo que admitirlo.

– Si.

– Entonces, ?si te pido mas dinero?

– Te dire que te des una ducha de agua fria.

– Que franco -sonrio ella-. ?Pero estas de acuerdo en que es una ganga?

– Imagino que hay algunas condiciones, ?no?

– Puede que si. Si estas interesado de verdad contactare esta misma tarde con la senora Copeland y le preguntare que tiene pensado.

– Puede que una condicion sea quedarse con Doreen y Gregor.

Molly penso que podia ser una posibilidad. La pareja de ancianos habia vivido alli la mayor parte de su vida y seria muy duro para ellos tener que mudarse a otro lugar.

– ?Eso seria un problema?

– Ese tipo de obligaciones son una lata.

– Supongo que serian fieles al nuevo propietario.

– Deberian retirarse, y tu lo sabes.

Ella lo miro a los ojos.

– ?Y seras tu quien los despida? -de pronto, sintio que su respuesta era muy importante para ella. Sabia cual debia ser su respuesta, el era un despiadado hombre de negocios, pero en el poco tiempo que habia pasado con el, habia descubierto su amabilidad, y era muy importante para ella que el siguiera mostrandosela.

– Solo porque haya curado a una rana no creas que soy un hombre sensible.

– Tambien te portaste muy bien con Sam.

– De acuerdo, fui amable con Sam -admitio-. Ninguna de esas dos cosas me costaron dinero.

– Y si te hubieran costado dinero… ?lo habrias hecho?

– Depende de cuanto. Cualquier cosa que fuera mas de dos peniques la habria consultado con mi contable.

Ella se rio y se volvio hacia el sol. Hacia tiempo que no se sentia tan bien. Al menos desde la muerte de Sarah. Jackson le habia regalado ese dia, y tenia que estarle agradecida.

– ?Mantendras a Doreen y a Gregor como empleados?

– Todavia no he dicho que vaya a comprar este lugar.

– Tampoco has dicho que no.

– Puede que no lo haga.

– Si, claro -Molly sabia que lo tenia atrapado. Parecia que las cosas iban muy bien. Pero no queria presionarlo, asi que guio a su caballo hacia el rio-. Si seguimos el rio acabaremos en casa -le dijo.

– No.

– ?No?

– Acabaremos nadando -le dijo el-. Parece fabuloso.

– Parece mojado.

– ?Gallina!

– No he traido banador -dijo ella-. Y los agentes inmobiliarios respetables no se banan en ropa interior con sus clientes. No esta bien visto.

– Que lastima.

– Es una lastima -sonrio ella-. Pero no permitas que yo te lo impida.

– ?Desnudarme?

– Como si fueras mi invitado. Te prometo que no sacare una camara. Y si lo hago, sera una muy pequena.

– Sabes, no me sorprenderia nada que llevaras una junto al repelente para sanguijuelas -dijo el.

Ella solto una carcajada. El sonido de su risa era alegre, y el permanecio sentado en la silla de montar, mirandola. Cuando ella continuo avanzando, el tuvo que hacer un esfuerzo para seguirla.

?Que diablos le estaba pasando? ?No tenia ni la menor idea!

Pero al final, Molly termino nadando. No tuvo eleccion. Llego al rio antes que Jackson, y cuando el la alcanzo, se percato de que su risa habia desaparecido y de que miraba fijamente a la corriente.

– ?Que ocurre? -miro hacia donde miraba ella y lo comprendio-. Oh…

Un poco mas arriba, habian caido un par de troncos sobre el rio, y las ramas y las hojas se habian amontonado encima. Un cachorro de canguro habia saltado sobre las ramas pensando que era suelo firme y el animal habia quedado atrapado y la corriente lo arrastraba hacia el mar.

En la otra orilla, una canguro seguia horrorizada los pasos de su cachorro. Saltaba de un lado a otro, sabiendo que no debia arriesgarse, pero sin querer abandonar a su cria. El cachorro de canguro podia ahogarse en poco tiempo. Jackson miro a Molly y vio que se habia bajado del caballo y se estaba quitando las botas.

– ?Que diablos estas haciendo?

– Puedo alcanzarlo.

– El agua te arrastrara hasta el mar.

– A mi no. Soy una chica de campo… ?recuerdas? Naci y creci junto al mar Puedo nadar como un pez.

Jackson se bajo del caballo y la agarro del brazo para retenerla.

– No seas estupida, solo es un canguro -Molly trato de zafarse con fuerza, pero el la retuvo-. Molly, no.

– Puedo hacerlo. ?Solo es un canguro? Si, y tambien era solo una rana. No puedo dejar que se ahogue.

– ?Y como piensas agarrarlo? Te hara pedazos -vio la expresion de su rostro y decidio estudiar la entrada al rio.

Quiza ella tuviera razon. Quiza era posible. El agua parecia lo bastante clara. Aparte de los troncos y las ramas que atrapaban al canguro no habia mucho mas donde poder engancharse, y el fondo del rio parecia de arena.

– Entrare yo -dijo el.

– ?No puedes!

– ?Por que no? -el estaba quitando la silla del caballo-. Necesitaremos las correas y la manta para sujetar al canguro. Ayudame.

– Si te ahogas, Trevor me matara. Millonario muerto por un canguro. No creo que le guste.

– No pienso ahogarme.

Ambos se miraron.

– Entraremos juntos -dijo Molly.

– No seas ridicula -Jackson se estaba quitando las botas.

– ?Quien es el ridiculo? Si entra uno, entramos los dos -dijo Molly, y se metio en el agua antes que el.

Jackson no la siguio. La observo y espero.

Sabia que no merecia la pena lanzarse sin mas. Lo habia aprendido durante su carrera profesional. Era mejor esperar y emplear la logica.

Molly parecia saber lo que estaba haciendo y, tras observarla, Jackson lo confirmo. Se habia metido en el agua y nadaba contra corriente para llegar al centro del rio antes que el canguro. Al ver que nadaba con fuerza y decision, Jackson se quedo tranquilo. Molly estaba a salvo. Se ato la manta y las correas a la cintura y se metio en el agua.

Molly era una buena nadadora, pero Jackson era mejor. Mientras ella tenia que atravesar la corriente en diagonal, el podia atravesarla en perpendicular.

El canguro seguia flotando rio abajo, hacia ellos. Y apenas se le veian las orejas y los ojos en la superficie. Las ramas sobre las que se encontraba se estaban rompiendo y cada vez estaba mas hundido.

Jackson llego hasta la mitad del rio primero, y Molly poco despues. Cuando llego junto a el, Jackson le tendio la mano y ella se agarro con decision. Segundos mas tarde, el canguro se dirigia hacia la barrera que ellos habian creado con los brazos.

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