Pia se encogio de hombros.
– Quiere formar parte de esto y a mi me gusto la idea de no estar sola.
– No estas sola -le dijo Montana-. Nos tienes a nosotras.
– Lo se y es genial… -vacilo.
Liz continuo por ella.
– Pero tener amigas con sus vidas no es lo mismo que tener a alguien que siempre estara a tu lado. Cuando me quede embarazada de Tyler, estaba asustada y confundida. Y tu vas a tener trillizos.
– Intento no pensar en el numero. Bueno, el caso es que Raul ha estado conmigo cuando he tomado la decision y me ha apoyado mucho. Y hoy, despues de que la ecografia confirmara que los tres embriones se habian implantado, me ha pedido que me case con el.
– Vas a tener los bebes de Crystal -dijo Liz con los ojos llenos de lagrimas-. Es una bendicion para los dos. Ella estaria emocionada.
Pia seguia confusa, pero sonrio de todos modos.
– Ahora estoy comprometida a hacerlo.
– Bebes -dijo Montana-. Y una proposicion de matrimonio. ?Ha sido bonito? ?Se ha puesto de rodillas?
– Montana, no estamos enamorados. Raul quiere casarse conmigo y formar parte de la vida de los ninos porque quiere ser padre. Cuando le he preguntado por que, me ha dicho que yo no soy la madre biologica y que nadie me esta cuestionando. Estoy dispuesta a tenerlos por mi amiga, porque es lo correcto. El quiere ser padre y que yo sea su mujer por Keith y porque es lo correcto.
Solo el hecho de pronunciar esas palabras ya era dificil… y mas lo era creerlas.
– Al principio no sabia si aceptar, pero puede ser muy convincente. Nos gustamos y nos respetamos. Es un buen hombre y confio en el. No habia podido decir eso de un hombre antes.
Liz la abrazo.
– Esto me da buena espina. Los matrimonios concertados han funcionado durante generaciones.
– Pero no estais enamorados -dijo Montana-. ?Es que no quieres estar enamorada?
– A veces hay que ser practico -le dijo Liz-. El amor puede surgir entre ellos.
Pia no habia pensado en eso.
– Puede que se enamore locamente de ti -le dijo Montana.
– No lo creo -dijo Pia con firmeza-. Hasta la fecha todos los hombres de mi vida me han enganado y prefiero saber la verdad de antemano. Raul ha sido sincero y se lo agradezco.
– Supongo -sin embargo, Montana no parecia muy convencida-. Pero es que no es nada romantico.
– Lo romantico puede ser muy doloroso -le recordo Pia.
Liz se recosto en la silla.
– Entonces, ?no esta permitido el amor?
– No hemos hablado de las reglas -admitio Pia-, pero se da por hecho.
– Pues entonces tendras que tener cuidado. El corazon es una bestia tramposa.
– Confia en mi. Tengo grandes planes de mantenerme emocionalmente entera. Por favor, ?podriais no decir nada sobre la razon por la que vamos a casarnos? No me importa que se lo digais a Charity, pero a nadie mas.
– Claro que no diremos nada -prometio Liz-. Ahora mismo esas especulaciones es lo ultimo que necesitas. Pero preparate. Todo el mundo acabara enterandose. Vas a ser una estrella.
– Puedo con ello -Pia habia sido el centro de atencion en el pueblo una vez y habia sido terrible. Ahora las razones eran distintas y estaba segura de que todo iria bien.
Raul le habia dado su palabra y ella habia optado por creerlo. Se quedaria con ella y con los bebes. Tal vez no estaban locamente enamorados, pero no pasaba nada. Habia muchas formas distintas de hacer feliz a una familia y ellos encontrarian la suya.
Capitulo 12
Pia evito ir al supermercado todo lo que pudo. Si habia un lugar en Fool’s Gold donde era mas probable encontrarse con gente que quisiera hablar sobre su matrimonio, era el lugar situado entre el pasillo de los productos de granja y de los congelados. Pero se habia quedado sin leche esa misma manana y no tenia nada en la nevera, asi que habia llegado el momento de apretar los dientes e ir a por ello.
Pensando que la tienda estaria mas tranquila a mediodia que despues del trabajo, aprovecho su hora del almuerzo para ir alli.
Durante el camino se topo con muchos hombres que no conocia; incluso uno le habia entregado un carro de la compra antes de que ella entrara en la tienda. Que extrano.
Paso por la zona de limpieza, por el mostrador de la carne y estaba a medio camino de la zona de lacteas cuando Denise Hendrix la vio.
– ?Pia! -grito la mujer dejando su carro a un lado-. Ya me he enterado. ?Cuanto me alegro!
Pia se preparo para un calido abrazo de parte de la matriarca de la familia Hendrix. Una mujer atractiva de cincuenta y pocos anos que habia perdido a su esposo unos diez anos atras. Era un miembro activo de la comunidad y madre de seis hijos, incluyendo a sus hijas que eran trillizas identicas.
Despues de abrazarse, Denise dio un paso atras.
– Vas a tener los bebes de Crystal. Es una bendicion.
– Gracias. Aun no me lo creo y estoy algo asustada.
– Claro que si, pero vas a hacerlo de todos modos. Estoy muy orgullosa de ti -sonrio-. Estoy a tu disposicion siempre que me necesites. Un parto multiple es completamente factible; solo tienes que planificarte.
– Eso he oido -la planificacion era importante, penso Pia. Y empezaria a hacerlo en cuanto asumiera la idea de tener trillizos-. Te agradezco tu ayuda. Seguro que tendre muchas preguntas, aunque ahora mismo no se cuales son.
– No te preocupes. No voy a ir a ninguna parte. Avisame cuando estes lista -Denise enarco una ceja-. Tambien he oido que hay que felicitarte por mas cosas. ?Ya tienes fecha?
– Aun no.
– Supongo que querras una boda pequena y tranquila. No tendras fuerzas para planear algo a lo grande, a menos que quieras esperar a que nazcan los bebes.
Lo de casarse era una cosa, penso Pia, pero ?celebrar una boda?
– Yo… eh… Aun no hemos decidido que vamos a hacer. Todo ha sucedido muy deprisa.
– Sabia que encontrarias a alguien maravilloso -le dijo Denise-. Siempre has sido una chica encantadora. Despues de todo lo que has pasado con tus padres… -se aclaro la voz-. Bueno, no hay necesidad de hablar de ello. El caso es que has encontrado la felicidad. Por lo que he oido, Raul es una persona muy especial. Y guapo. Es el rival de Josh.
Pia se rio.
– No creo que haya ninguna competicion.
– Pues eso es porque no has estado en la peluqueria de Julia ultimamente. La semana pasada se produjo una discusion muy acalorada sobre los dos.
Pia recordo la reunion del consejo en el Ayuntamiento cuando habian hablado de quien tenia el mejor trasero.
– Necesitamos algo mas en lo que pensar en este pueblo.
– Estan esos hombres. Eso es un tema de conversacion. ?Te has fijado que estan por todas partes? Justo ayer dos me silbaron -sono furiosa y complacida a la vez.
– No se que vamos a hacer con ellos.
– Creia que ya habia algo planeado.
– Algunas cosas, pero ?que van a hacer el resto del tiempo? ?Vagar por las calles en busca de conquistas?
Denise se rio y anadio:
– Lamento que no te emocione mucho la llegada de tantos hombres, pero eso es porque tu ya has encontrado