Pero el parecio comprender lo que ella estaba pensando.

– Si tu no me hubieras ayudado, yo todavia estaria gordo. Las personas son buenas en distintas cosas. Yo siempre fui bueno estudiando y ahora me toca a mi hacerte un favor. Confia en mi. No te tratare ni la mitad de mal de lo que tu me has tratado a mi.

Ella lo habia tratado mal. Y a Georgie tambien. Chaz estiro las piernas. Su piel era palida como la de un vampiro y, ademas, vio que se habia saltado un trocito de piel al depilarse.

– Lo siento.

No debio de parecer que lo decia de corazon, porque el no se rindio.

– Tienes que dejar de tratar tan mal a las personas. Crees que asi pareces dura, pero solo das lastima.

Chaz se levanto de golpe.

– ?No vuelvas a decirme eso!

Aaron levanto la vista hacia ella, que lo miro con furia, con los brazos colgando rigidos a los lados y los punos apretados.

– ?Deja de decir chorradas, Chaz! -La voz de Aaron sono cansada, como si se estuviera hartando de ella-. Ya va siendo hora de que empieces a actuar como un ser humano decente. -Se levanto con calma-. Tu y yo somos muy buenos amigos, pero la mitad del tiempo me averguenzo de ti. Como cuando he oido las gilipolleces que le has soltado antes a Georgie. Cualquiera que tenga ojos puede ver lo mal que se siente. No tenias por que hacerle sentirse peor.

– Bram se siente tan mal como ella.

– Eso no justifica tu forma de hablarle.

Parecia que Aaron estuviera a punto de considerarla un caso perdido. Chaz sintio deseos de llorar, pero antes se suicidaria, asi que se quito el albornoz y lo dejo sobre la arena. Se sintio desnuda, pero Aaron solo la miraba a la cara. Cuando vivia en las calles, los hombres apenas la miraban a la cara.

– ?Estas satisfecho? -le espeto.

– ?Lo estas tu? -replico el.

Chaz no estaba satisfecha con casi nada de ella misma, y estaba harta de sentir miedo. Salir de la casa de Bram la ponia nerviosa. Tenia miedo de obtener el titulo de graduado escolar. ?Tenia miedo de tantas cosas!

– Si soy amable con los demas, se aprovecharan de mi -dijo.

– Si se aprovechan de ti -contesto Aaron con suavidad-, deja de ser amable con ellos.

A Chaz se le puso carne de gallina. ?De verdad tenia que ser todo o nada? Penso en todo lo que Aaron le habia dicho, en lo de que ahora tenia amigos que cuidarian de ella. Ella odiaba depender de los demas, pero eso quiza se debia a que nunca habia podido hacerlo. Aaron tenia razon. Ahora tenia amigos, pero ella seguia actuando como si estuviera sola en su lucha contra el mundo. No le gustaba que Aaron pensara que trataba mal a los demas. Tratar mal a los demas no la salvaria de nada. Chaz examino sus pies.

– No me consideres un caso perdido, ?de acuerdo?

– No puedo hacerlo -contesto el-, siento demasiada curiosidad por saber en que te vas a convertir cuando madures.

Chaz lo miro y vio que tenia una extrana expresion en la cara. No miraba su cuerpo, ni siquiera la miraba fijamente, pero ella fue consciente de el de una forma que le hizo sentir… picor, sed… o algo.

– ?Quieres ir a nadar o piensas quedarte aqui todo el dia psicoanalizandome? -le pregunto.

– Voy a nadar.

– Ya me lo parecia a mi.

Chaz corrio hacia el agua sintiendose casi libre. Quizas aquella sensacion no le durara mucho, pero, de momento, resultaba agradable.

Georgie editaba pelicula durante el dia y merodeaba por las calles mas pobres de Hollywood y West Hollywood durante la noche, con solo su camara y su famosa cara como proteccion. La mayoria de las muchachas a las que abordaba la reconocian y se mostraban muy dispuestas a hablar para la camara.

Encontro un centro de asistencia sanitaria movil que ayudaba a los chicos de las calles. Una vez mas, ser famosa le resulto util y los sanitarios le permitieron ir con ellos noche tras noche ofreciendo pruebas del sida y de enfermedades de transmision sexual, asesoramiento ante las crisis, condones y educacion sanitaria preventiva. Lo que Georgie oyo y vio durante aquellas noches le afecto mucho. Se imaginaba a Chaz entre aquellas muchachas y se preguntaba donde estaria en aquellos momentos si Bram no hubiera intervenido para ayudarla.

Transcurrieron dos semanas y Bram no realizo ningun intento de ponerse en contacto con ella. Georgie estaba agotada hasta el punto de sentirse aturdida, pero no podia dormir mas que unas pocas horas antes de despertar sobresaltada, con el camison empapado de sudor y las sabanas enrolladas en su cuerpo. Anoraba vivamente al hombre que creia que era Bram, el hombre que albergaba un corazon tierno detras de su cinico exterior. Solo su trabajo y saber que habia hecho lo correcto al no vender su alma por una venganza, evitaban que cayera en la desesperacion.

Como los paparazzi no solian merodear por los vecindarios que ella visitaba, no aparecio ninguna fotografia de ella. Aunque le habia ordenado a Aaron que dejara de transmitir a la prensa del corazon historias sobre lo felices que ella y Bram eran en su matrimonio, el siguio haciendolo. Pero eso a ella ya no le importaba. Ya se encargaria Bram de aquella cuestion.

Un viernes, tres semanas despues de su ruptura con Bram, Aaron le telefoneo y le dijo que entrara en la pagina Web de Variety. Georgie le hizo caso y leyo el siguiente anuncio:

«El reparto de La casa del arbol, la adaptacion cinematografica de Bram Shepard de la exitosa novela de Sarah Carter, ya se ha completado. En una decision sorpresa de ultima hora, Anna Chalmers, una actriz del cine independiente practicamente desconocida ha firmado para representar a Helene, el complejo papel femenino protagonista.»

Georgie se quedo mirando fijamente la pantalla. Todo habia acabado. Ahora Bram ya no necesitaba convencerla de su amor eterno, lo que explicaba por que no habia vuelto a intentar hablar con ella. Georgie se puso a desgana las deportivas y se fue a dar un paseo por la playa. Estaba baja de defensas y se sentia agotada, de lo contrario no se habria dejado llevar por un escenario de fantasia en el que Bram se presentaba en la casa y caia de rodillas suplicandole su amor y su perdon.

Enfadada consigo misma, regreso a la casa.

A la manana siguiente, mientras estaba frente al ordenador, el telefono sono. Georgie salio de su estupor y miro con los ojos entornados el visor de su movil. Se trataba de Aaron, quien habia ido a pasar el fin de semana a Kansas para celebrar el sesenta cumpleanos de su padre. Georgie se aclaro la voz.

– ?Como va la reunion familiar?

– Bien, pero Chaz esta enferma. Acabo de hablar con ella y parecia estar realmente mal.

– ?Que le pasa?

– No ha querido decirmelo, pero creo que estaba llorando. Le he dicho que busque a Bram, pero no sabe donde esta.

En Malibu intentando recuperarme no, penso Georgie.

– Estoy preocupado por ella -continuo Aaron-. ?Crees que…?

– Ire a verla.

Mientras conducia por la carretera, la fantasia volvio a representarse en su mente. Georgie se vio a si misma entrando en casa de Bram, que estaba llena de globos. Habia docenas de globos flotando contra el techo, con cintas colgando. Y Bram estaba alli en medio, con una expresion dulce, tierna y ansiosa.

«?Sorpresa!»

Georgie apreto el acelerador y se obligo a volver a la realidad.

En la casa vacia y silenciosa de Bram no habia ni un solo globo, y el hombre que la habia traicionado no estaba por ningun lado. Como los paparazzi volvian a merodear por la entrada, Georgie aparco el coche en la casa de Rory y cruzo a la de Bram por la puerta del jardin. Dejo su bolso y llamo a Chaz. No obtuvo respuesta.

Cruzo la cocina hasta el pasillo trasero y subio las escaleras que conducian al apartamento de Chaz. No le

Вы читаете Lo que hice por amor
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату
×