– Bien, muy bien -le aseguro Fabia, enterandose de Cara y Barney en la pregunta de su madre. El debia estar mejor-. Queria solo saludarte.
– ?Que dulzura de tu parte! siempre has sido asi -y sin saberlo hizo que Fabia se sintiera culpable por estarlos enganando-. ?Esta Cara alli?
– Ahorita no -Fabia se estremecio.
– Bueno, mandale un beso de nuestra parte. ?Se estan divirtiendo?
– ?Muchisimo! -exclamo con entusiasmo.
– Cuanto me alegro -dijo la senora Kingsdale contenta-, ?adonde estan?
– Todavia en Marianske Lazne -respondio, luego charlo con su madre unos minutos mas, hasta que esta le dio otra preocupacion:
– Bueno, las esperamos en una semana entonces. Ya ansiamos…
– Sabes, mama -Fabia la interrumpio al entender que para regresar a su casa el miercoles siguiente tendria que salir de Marianske Lazne a mas tardar el jueves, suponiendo que su auto estuviera listo y era muy dudoso.
– ?Que, querida? -dijo la senora.
– Es que este es un sitio tan encantador, que pensabamos que quiza nos quedariamos unos dias mas -invento de prisa, sabiendo que su madre se moriria de preocupacion si supiera la verdad y que ademas su auto estaba descompuesto-. Solo si tu y mi papa estan de acuerdo…
– ?Claro que si, carino, eso ya lo sabes! -Norma acepto seguir haciendo su trabajo sin inmutarse-. ?Y Cara tambien se quedara?
Santo cielo. Fabia, que odiaba tanto decir mentiras, estaba atrapada y tuvo que seguir mintiendo.
– Bueno… eso… eso depende de que Barney este ocupado o no -invento mientras hablaba y por un momento pudo respirar mientras su madre comentaba sobre cuanto trabajaba Barney, y que en caso de que el no pudiera tomar sus vacaciones para cuando planeaba, seria una buena idea que Cara siguiera el viaje con ella y quiza despues volara desde Checoslovaquia a los Estados Unidos.
– ?Pero podras regresar tu sola manejando?
– Claro que si -dijo Fabia con un tono confiado para tranquilizarla-. Puede ser que no tenga que hacerlo. Solo queria saber si me podia tomar unos dias mas de vacaciones, por si acaso.
Fabia colgo el auricular despues de haber prometido a su madre que le volveria a llamar para avisarle si regresaria a Hawk Lacey el siguiente miercoles. ?Estaba asombrada! pero de repente no tenia el menor deseo de abandonar Marianske Lazne.
Cuando se acosto esa noche a dormir se sentia tan abatida como cuando se habia levantado. La unica buena noticia que habia recibido ese dia era que Barney debia estar mejor de salud. Aparte de eso, todo estaba como antes, y peor. Porque despues de haber llamado a su casa, tenia nuevas preocupaciones. Tenia que decidir antes de ver de nuevo a sus padres si debia confesarles toda la verdad. Aunque no habia disculpa alguna para el hecho de que los habia enganado deliberadamente, ni siquiera porque lo habia hecho por buenos motivos para que no se preocuparan. Suspiro profundamente al comprender que o confesaba la verdad, o lo que era peor, tendria que seguir mintiendo al tener que inventar, cuando le preguntaran, que era lo que habia hecho ella y Cara durante esas vacaciones en Checoslovaquia.
Y todavia no habia resuelto el problema de que es lo que iba a hacer para conseguir la maldita entrevista que le habia encomendando su querida hermana. Fabia se cubrio la cabeza con la almohada y trato de dormir.
El jueves amanecio igual de nublado que el dia anterior y se levanto y siguio la rutina diaria de banarse, vestirse y bajar a desayunar con una falta total de entusiasmo y de apetito.
Acababa de regresa a su habitacion cuando sono el telefono y entonces salio el sol para ella.
– Ven Gajdusek -anuncio una voz fuerte y templada que reconoceria siempre-. ?No estoy molestando?
– De ninguna manera -respondio sintiendose de inmediato alegre y entusiasmada-. Siempre me levanto temprano -anadio-, hace mucho que estoy despierta.
– ?Que bueno! -comento haciendola sentir mas contenta que nunca, le anuncio-. Tengo que manejar esta manana a Karlovy Vary y me preguntaba que, ya que esta en tu itinerario, quiza te gustaria acompanarme.
– Me encantaria -acepto ella, dejando pasar uno o dos minutos para que no notara su ansiedad.
Fabia todavia tenia esa amplia sonrisa en su rostro poco despues de haber colgado el auricular. Pero era natural, se dijo, si esta vez se lo proponia, lograria pedirle una fecha y la hora para la quiza no tan maldita entrevista.
Estaba lista y estupenda cuando la llamaron de la recepcion para avisarle que habia llegado el senor Gajdusek. Vestida con una falda amplia de fina lana, una blusa, un sueter, y con el saco en el brazo, y demasiado impaciente para esperar el elevador, bajo corriendo las escaleras.
– Hola -exclamo al verlo, casi sin aliento y, asombradamente, sintio de nuevo timidez.
– Una dama no hace esperar a un hombre -comento el con aprobacion, y alegrandose de haber estado a tiempo, lo siguio al auto, donde se quedo pensando mientras el arrancaba que ella nunca habia sido timida. Quiza estaba nerviosa, ya que debia estar alerta si no queria que esa salida terminara siendo tan infructuosa como las anteriores. ?Y ella no necesitaba tampoco su aprobacion, por amor de Dios!
Un momento despues, cuando dejaban atras Marianske Lazne, Fabia se pregunto por que demonios estaba tan preocupada. ?Cualquiera diria que la estaba amenazando; con un demonio!
Sintiendo que nadie la estaba presionando, ni nada por el estilo, decidio que esa vez iba a conseguir que Ven Gajdusek le respondiera una o dos preguntas cuando menos. O, para ser mas exacta, cincuenta cualesquiera de las cien que tenia en la lista.
– Gracias por recordar que yo queria conocer Karlovy Vary -le dijo con sinceridad.
– Lastima que llovera -respondio el mirando las nubes grises en el cielo.
– Tiene que llover a veces -senalo la chica con cordialidad y le fascino cuando, aparentemente divertido por su respuesta filosofica, el solto una carcajada.
Su boca era todavia mas soberbia cuando reia, decidio Fabia, y fijo la vista al frente, no recordaba haberse percatado antes de la boca de un hombre. Parecia conveniente pensar en otra cosa.
– ?Tiene usted hermanos o hermanas? -pregunto ella, sin saber como, sintiendose sorprendida de si misma.
Aunque cuando volvio la cabeza para verlo noto que si estaba sorprendido no lo demostraba. Luego tuvo el presentimiento de que no le iba a contestar de todas maneras, ya que no decia nada. No hasta que paso una curva peligrosa, luego no viendo razon para callar, dijo:
– Tengo un hermano que vive en Praga.
?Es mas joven o mayor que el? ?Casado? ?Soltero? Fabia tenia muchas preguntas. Pero entonces, un camion en la carretera los distrajo y la joven decidio que no era justo bombardearlo con preguntas cuando el preferia que le permitiera concentrarse en la conduccion del auto.
El pavimento estaba mojado cuando cerca de una hora despues llegaron a Karlovy Vary, pero habia dejado de llover. Ven se detuvo un momento a dejar un paquete en una de las tiendas del pueblo, seguro, el motivo de su viaje.
– ?Te gustaria tomar cafe antes de recorrer el pueblo? -le pregunto despues y Fabia de inmediato se entusiasmo al comprender que no seria un viaje apresurado.
– Me parece una magnifica idea -acepto y le empezo a fascinar Karlovy Vary, tambien con sus calles bordeadas de arboles y sus pintorescos alrededores.
Tomaron cafe en un hotel elegante y, mirando el relajado checoslovaco, Fabia no pudo contener su orgullo por estar con el. Sin embargo, alejo la mirada cuando Ven la sorprendio mirandolo y tuvo una sensacion de culpa porque le parecia que desde el momento en que lo conocio habia sido presa de extranos sentimientos e ideas.
'Hora de recordar el motivo de estar alli', penso Fabia con firmeza, mientras descartaba cualquier nocion alocada de que Ven era responsable de los inquietos latidos de su corazon; luego descubrio que todavia tenia los ojos puestos en ella.
– ?Lubor debe estar trabajando de nuevo en su oficina? -dijo para iniciar de nuevo una conversacion, pero de inmediato deseo no haberlo dicho, pues la expresion de Ven cambio y cuando levanto una ceja, un gesto aristocratico, ella comprendio que habia desaparecido la cordialidad.
– ?Tienes algun interes especial en mi secretario? -pregunto con tono agudo y arrogante.