– Me estas diciendo… -Tuve que callarme-. ?Me estas diciendo que Bob cogio el dinero, Greta? ?Que robo dinero de la asociacion?
Su voz fue firme.
– Tomo el dinero prestado, Paul.
– Estas bromeando, supongo.
Greta aparto sus manos de las mias.
– Tu no lo entiendes.
– Explicamelo.
– Ira a la carcel -dijo-. Mi marido. El padre de Madison. Bob ira a la carcel. ?Lo entiendes? Nos destrozara la vida.
– Bob deberia haberlo pensado antes de robar dinero de una asociacion benefica.
– No lo robo. Solo lo tomo prestado. Lo ha pasado mal en el trabajo. ?Sabias que habia perdido sus dos cuentas mas importantes?
– No. ?Por que no me lo dijo?
– ?Que querias que te dijera?
– ?Y la solucion era robar?
– No… -Se callo a media frase y meneo la cabeza-. No es tan sencillo. Habiamos firmado los papeles y nos habiamos comprometido con la piscina. Cometimos un error. Nos extralimitamos.
– ?Y el dinero de tu familia?
– Tras la muerte de Jane, mis padres creyeron que lo mejor era ponerlo todo en un fondo. No puedo tocarlo.
Sacudi la cabeza.
– ?Asi que robo?
– ?Quieres dejar de decir eso? Mira. -Me dio unas fotocopias-. Bob tenia apuntado hasta el ultimo centavo que cogio. Estaba aplicando un seis por ciento de interes. Lo pensaba pagar todo cuando las cosas le fueran mejor. Solo era una manera de salir del apuro.
Eche un vistazo a los papeles, intente encontrar algo que pudiera ayudarles, demostrarme que realmente Bob no habia hecho lo que decian que habia hecho. Pero no habia nada. Eran notas escritas a mano que podian haberse escrito en cualquier momento. Se me encogio el corazon.
– ?Tu lo sabias? -pregunte.
– Eso no importa.
– Una mierda no importa. ?Lo sabias?
– No -dijo-. No me dijo de donde habia salido el dinero. Pero escucha, ?sabes cuantas horas ha dedicado Bob a JaneCare? Era el director. Un cargo que deberia merecer un sueldo a tiempo completo. De seis cifras al menos.
– Por favor, no me digas que vas a justificarlo asi.
– Lo justificare de todas las formas que pueda. Amo a mi marido. Tu le conoces. Bob es un buen hombre. Tomo prestado el dinero y lo habria devuelto sin que nadie se enterara. Estas cosas se hacen continuamente. Tu lo sabes. Pero por culpa de quien eres y de esa maldita violacion, la policia ha investigado esto. Y por culpa de quien eres, lo utilizaran para dar ejemplo. Destruiran al hombre que amo. Y si le destruyen, me destruiran a mi y a mi familia. ?Lo entiendes, Paul?
Lo entendia. Lo habia visto antes. Ella tenia razon. La familia pasaria un autentico calvario. Intente sobreponerme a mi ira. Intente verlo desde el punto de vista de Greta, intente aceptar sus excusas.
– No se que quieres que haga -dije.
– Estamos hablando de mi vida.
Me estremeci cuando dijo esto.
– Salvanos, por favor.
– ?Mintiendo?
– Fue un prestamo. Simplemente no tuvo tiempo de decirtelo.
Cerre los ojos y sacudi la cabeza.
– Robo a una asociacion benefica. Robo a la asociacion benefica de tu hermana.
– De mi hermana no -dijo-. Tuya.
Lo deje pasar.
– Ojala pudiera ayudarte, Greta.
– ?Vas a darnos la espalda?
– No os doy la espalda. Pero no puedo mentir por vosotros.
Se limito a mirarme, y ya no era un angel.
– Yo lo haria por ti y lo sabes.
No dije nada.
– Has fallado a todas las personas de tu vida -dijo Greta-. No vigilaste a tu hermana en el campamento. Y al final, cuando mi hermana estaba sufriendo mas… -Se callo.
La temperatura de la sala bajo diez grados. La serpiente dormida en mi estomago se desperto y empezo a arrastrarse.
La mire a los ojos.
– Dilo. Venga, dilo.
– JaneCare no tuvo nada que ver con Jane. Tuvo que ver contigo. Con tu sentimiento de culpa. Mi hermana se moria. Sufria. Yo estaba alli, en su lecho de muerte. Y tu no.
El sufrimiento interminable. Los dias se convirtieron en semanas, las semanas en meses. Yo estaba alli, lo observaba todo. Al menos casi todo. Observaba marchitarse a la mujer que adoraba, mi pilar de fortaleza. Observaba como la luz se fundia en sus ojos. Olia la muerte en ella, en la mujer que olia a lilas cuando le hice el amor al aire libre una tarde lluviosa. Y hacia el final, no pude soportarlo mas. No pude observar como se apagaba la ultima luz. Me desmorone. El peor momento de mi vida. Me desmorone y hui y mi Jane murio sin mi. Greta tenia razon. Habia fallado no quedandome de guardia. Otra vez. Nunca lo superare, y es verdad que fue la culpa lo que me impulso a fundar JaneCare.
Greta sabia lo que habia hecho, evidentemente. Tal como habia dicho, ella era la unica que estaba alli al final. Pero nunca habiamos hablado de eso. Ni una sola vez me habia echado en cara mi mayor verguenza. Siempre habia querido saber si Jane habia preguntado por mi al final. Si supo que no estaba alli. Pero nunca lo pregunte. Pense en preguntarlo entonces, pero ?de que serviria? ?Que respuesta me satisfaria? ?Que respuesta me merecia?
Greta se puso de pie.
– ?No nos ayudaras?
– Os ayudare, pero no mentire.
– Si pudieras salvar a Jane, ?mentirias?
No dije nada.
– Si mentir hubiera salvado la vida a Jane, si mentir te devolviera a tu mujer, ?lo harias?
– Esa es una hipotesis sin sentido.
– No es verdad. Porque es mi vida la que esta en juego. No mentiras para salvarla. Esto es muy tipico de ti, Cope. Estas dispuesto a hacer lo que sea por los muertos. Pero con los vivos no eres tan bueno.
Capitulo 26
Muse me habia mandado por fax un resumen de tres paginas sobre Wayne Steubens.
Muse era fantastica. No me habia mandado todo el expediente. Lo habia leido y me habia dado los puntos esenciales. La mayoria ya los conocia. Recuerdo que, cuando arrestaron a Wayne, muchos se preguntaron por que habia decidido matar a los campistas. ?Habia tenido alguna mala experiencia en un campamento de verano? Un psiquiatra explico que, a pesar de que Steubens no habia hablado con el, creia que habia sido victima de abusos sexuales en un campamento de verano en su infancia. Sin embargo, otro psiquiatra conjeturo que se trataba solo del placer de matar: Steubens habia matado a sus cuatro primeras victimas en el campamento PACE y habia salido impune. Asociaba ese subidon, esa excitacion, a los campamentos de verano, y por eso repitio la pauta.
Wayne no trabajaba en los demas campamentos. Por supuesto habria sido demasiado evidente. Pero las circunstancias habian sido su perdicion. Un gran criminologo del FBI llamado Geoff Bedford le habia atrapado de esta manera. Wayne habia sido uno de los sospechosos por los primeros cuatro asesinatos. Cuando el chico de Indiana fue asesinado, Bedford se puso a investigar a todos los que pudieran haber estado en todos esos lugares en el momento en cuestion. Lo mas evidente era empezar por los monitores del campamento.
Incluyendome a mi, por supuesto.
En principio Bedford no encontro nada en Indiana, el lugar del segundo asesinato, pero se habia producido una retirada de dinero en un cajero a nombre de Wayne Steubens a dos pueblos de distancia del lugar del asesinato del chico de Virginia. Ese fue el punto de inflexion. Bedford siguio investigando. Wayne Steubens no habia retirado dinero en ningun cajero de Indiana, pero si en Everett, Pensilvania, y otra vez en Columbus, Ohio, lo que conformaba una pauta que sugeria que habia ido en coche desde su casa en Nueva York siguiendo ese camino. No tenia coartada y al final descubrieron al dueno de un pequeno motel cerca de Muncie que le identifico positivamente. Bedford siguio investigando y solicito una orden de registro.
Encontraron recuerdos enterrados en el jardin trasero de Steubens.
No habia ningun recuerdo del primer grupo de asesinatos. Pero la teoria era que aquellos habian sido probablemente sus primeros asesinatos y que, o bien no habia