—Dije que contuvieras la lengua. —La voz de Madre era como el hielo—. Para tu informacion, mi inteligente, sabio y maduro ninito, la razon por la que habia una escena con portico en la satira de Drotik, la cual vi, de paso, y esta tan mal hecha que ni me preocupa… la razon de la escena del portico es que mientras tu padre iba al consejo del clan yo estuve en el consejo de la ciudad, y cuando conte la historia inclui lo sucedido en este portico. ?Por que?, pregunta mi brillante hijo con expresion deliciosamente estupida. Porque lo unico que insto al consejo a tomar en serio la vision de tu padre es que Luet lo creyo y considero que las visiones de ambos congeniaban.
Madre lo habia contado. Madre habia expuesto la familia al ridiculo y la ruina. Increible.
—Ah —dijo Nafai.
—Pense que verias las cosas de otro modo.
—Veo que no fue un error incluir a Luet y Hushidh en la reunion familiar. Eras tu quien debia ser excluida.
Ella le abofeteo el rostro. Si apuntaba a la mejilla, erro, quiza porque el echo la cabeza hacia atras por reflejo. La una arano la mejilla, rasgando la piel, que le empezo a arder y sangrar.
—Olvidas tu lugar —dijo Madre.
No tanto como tu olvidas el tuyo, quiso responder Nafai. E incluso habia empezado a decirlo, pero en medio de la frase cayo en la cuenta de lo ocurrido. La sorpresa, el dolor y la humillacion de ese bofeton le arrancaron lagrimas.
—Lo lamento —dijo Nafai. Aunque en realidad queria decirle que no tenia derecho a pegarle, que el ya era mayor, que la odiaba. Pero no podia decir frases hirientes cuando lloraba como un bebe. Nafai aborrecia su facilidad para el llanto.
—Quiza la proxima vez me hablaras con el debido respeto —dijo Madre, aunque tampoco ella pudo mantener su tono severo e incluso mientras hablaba lo rodeo con el brazo, se sento junto a el y lo consolo.
Madre no entendia que ese abrazo solo agudizaba la humillacion y confirmaba su decision de considerarla una enemiga. Si Madre tenia poder para hacerle llorar porque el la amaba, entonces solo existia una solucion: dejar de amarla. Seria la ultima vez que ella le hacia esto.
—Estas sangrando —observo Madre.
—No es nada —dijo el.
—Dejame curarte… con un panuelo limpio, no con ese horrible trapo que llevas en el bolsillo, chiquillo absurdo.
Conque eso sere siempre en esta casa, ?verdad? Un chiquillo absurdo. Se aparto de ella, negandose a permitir que el panuelo le tocara la mejilla. Pero ella insistio, le enjugo la herida y la tela blanca quedo manchada de sangre. Nafai la cogio y se la apreto contra la herida.
—Creo que es profunda —murmuro.
—Si no hubieras movido la cabeza, mis unas no te habrian lastimado la mejilla.
Si no hubieras pegado, tus unas se habrian quedado en tu regazo. Pero contuvo la lengua.
—Veo que te preocupas por la situacion familiar, Nafai, pero tus valores estan algo trastrocados. ?Que importa esa satira? Todos saben que las grandes figuras de la historia de Basilica han sido ridiculizadas en un momento u otro, y habitualmente por las razones que les dieron grandeza. Podemos soportarlo. Lo que importa es que la vision de Padre fue una clarisima advertencia del Alma Suprema, con implicaciones inmediatas para las decisiones de nuestra ciudad. El bochorno pasara. Y entre las mujeres eminentes de esta ciudad, Padre es un hombre notable. Lo respetan cada vez mas. Asi que no te sientas avergonzado de que tu padre sea centro de atencion.
Los adolescentes son extremadamente sensibles a la verguenza, pero con el tiempo aprenderas que la critica y el ridiculo no siempre son malos. Ganarse la enemistad de gentes malignas puede hablar muy bien de ti.
No podia creer que ella lo subestimara tanto como para endilgarle ese sermon. ?De verdad creia que temia la verguenza? Si ella hubiera escuchado en vez de sermonearlo, Nafai le habria hablado sobre la advertencia de Elemak acerca del peligro que corria Padre, sobre su visita secreta a la casa de Gaballufix. Pero para ella solo era un nino. No tomaria su advertencia en serio. Quiza le soltara otro sermon diciendole que no se dejara abrumar por temores ni preocupaciones, sino que se concentrara en sus estudios y dejara que los adultos se preocuparan por los problemas reales del mundo.
Para ella aun tengo seis anos, siempre los tendre.
—Lo siento, Madre. No volvere a hablarte asi. —Mas aun, creo que jamas en mi vida te hablare de asuntos serios o importantes mientras viva.
—Acepto tus disculpas, Nafai, y espero que aceptes la mia por haberte pegado en mi furia.
—Desde luego, Madre. —Aceptare tu disculpa… cuando me la des y cuando yo crea que hablas en serio. Sin embargo, querida y amada progenitora, en ningun momento te has disculpado sinceramente. Solo has expresado tu esperanza de que yo acepte una disculpa que no has llegado a pronunciar.
—Espero, Nafai, que reanudes tus estudios y no permitas que estos acontecimientos alteren tu vida normal. Tienes una mente aguda, y no hay razones para que permitas que estas cosas te impidan aguzarlas, aun mas.
Gracias por tu cuota de alabanza, Madre. Me has dicho que soy pueril, que soy esclavo de mi lascivia y que mis opiniones merecen ser silenciadas, no escuchadas. Escuchas cada palabra de esa bruja, pero no valores en nada mis opiniones.
—Si, Madre. Pero prefiero no regresar ahora a clase, si no te importa.
—Claro que no. Lo entiendo perfectamente. Querida Alma Suprema, impide que me ria.
—No puedo consentir que andes merodeando por las calles, Nafai. Supongo que lo entiendes. La vision de Padre ha llamado tanto la atencion que alguien dira algo que te enfurecera, y no quiero que pelees.
Conque te preocupa que yo me pelee, Madre. Por favor, recuerda quien golpeo a quien.
—?Por que no pasas el dia en la biblioteca, con Issib? El ejercera una sana influencia sobre ti… siempre es tan sosegado.
?Issib, siempre sosegado? Pobre Madre, no sabes nada de tus hijos. Las mujeres nunca entienden a los hombres. Desde luego, los hombres tampoco entienden a las mujeres, pero al menos tampoco pretenden entenderlas.
—Si, Madre. La biblioteca esta bien. Ella se levanto.
—Entonces ve alla ahora. Quedate el panuelo.
Se marcho del portico, sin esperar a ver si el obedecia.
Nafai se levanto, rodeo el biombo, enfilo hacia la balaustrada y miro el Valle de la Grieta.
No se veia el lago. Una densa nube cubria las zonas mas bajas del valle, pero las paredes eran tan abruptas que quizas el lago fuera invisible desde alli, aun sin la niebla.
Nafai solo veia la nube blanca y el verdor exuberante del bosque que orillaba el valle. Aqui y alla brotaba humo de una chimenea, pues habia mujeres que vivian en las laderas. El ama de llaves de Padre, Truzhnisha, era una de ellas. Tenia una casa en Bancal Oeste, uno de los doce barrios de Basilica donde solo podian vivir o entrar mujeres. Los Distritos de Mujeres estaban menos poblados que los veinticuatro distritos donde los hombres podian vivir (aunque no poseer propiedades), pero en el consejo de la ciudad gozaban de gran poder, porque sus representantes siempre votaban en bloque. Conservadoras, religiosas: sin duda esas eran las consejeras mas impresionadas por la confirmacion de Luet. Si estaban de acuerdo con Padre en el tema de los carros de guerra, se requerian los votos de otras seis consejeras para empatar, y siete votos para actuar contra los planes de Gaballufix.
Las consejeras de los Barrios de Mujeres, durante miles de anos, habian rehusado permitir una subdivision de los densamente poblados Barrios Abiertos, otorgar votos a los barrios de allende las murallas, o cualquier otra cosa que pudiese diluir o debilitar el dominio de las mujeres en Basilica. Ahora, al mirar ese valle secreto, Nafai, enfurecido con su madre, no veia la belleza de ese lugar rebosante de misterio y vitalidad, solo veia que habia muy pocas casas.
?Como dividen esto en una docena de barrios? Debe de haber algunos distritos donde las tres mujeres que lo habitan se turnan para ser consejeras.
Y fuera de la ciudad, en los diminutos pero costosos cubiculos donde debian vivir los hombres sin companera ni familia, no habia recursos legales para exigir un trato mas equitativo, para promover leyes que