recordarle que no se aceptan despidos de las instalaciones del tipo de Rodeo. No solo porque Galac-Tech esta contractualmente obligada a proporcionar transporte a sus hogares a los despedidos, sino que ademas esta la cuestion de los gastos y de la perdida de tiempo que representa la importacion de sus reemplazantes. No, concluiremos de la siguiente manera. El capitan Bannerji sera suspendido de sueldo por dos semanas y recibira un castigo oficial por llevar armas no autorizadas en una mision oficial de la compania. El arma sera confiscada. El senor Graf tambien sera sancionado, pero volvera de inmediato a sus obligaciones, ya que no hay nadie que lo reemplace.
—?Pero a mi me obligaron! —protesto Bannerji.
—?Pero yo soy inocente! —grito Leo—. Es una confabulacion. Una fantasia paranoica…
—No pueden enviar a Graf al Habitat ahora —exclamo Van Atta—. Lo proximo que hara sera sindicalizar a los trabajadores…
—Considerando las consecuencias del fracaso del Proyecto Cay —dijo friamente la vicepresidenta de Operaciones—, creo que no lo hara. ?No es cierto, senor Graf?
Leo se estremecio.
—Si.
Ella sonrio sin satisfaccion.
—Gracias. Esta investigacion ha terminado. Las quejas que puedan surgir o las apelaciones de alguna de las partes deberan ser dirigidas a Galac-Tech en la Tierra.
Sus cejas parecieron agregar
Los animos en la lanzadera de regreso al Habitat eran, para decirlo de la manera mas suave posible, tensos. Claire, acompanada por una de las enfermeras del Habitat, quien habia tenido que acortar tres dias su licencia, estaba acurrucada en el fondo, con Andy en los brazos. Leo y Van Atta estaba tan distanciados entre si como lo permitia el espacio.
Van Atta hablo con Leo en una ocasion.
—Te lo dije.
—Tenias razon —contesto Leo.
Van Atta se enfurecio ante este ataque. Leo hubiera preferido atacarlo con un palo de metal.
?Tendria razon Van Atta? ?Su insistencia en obtener resultados instantaneos seria un signo de preocupacion por el bienestar de los cuadrumanos? ?Querria que sobrevivieran? Leo llego a la conclusion de que no. El unico bienestar que le preocupaba a Bruce era el suyo propio.
Leo se reclino hacia atras y miro por la ventana, mientras la aceleracion del despegue lo mantenia contra el respaldo del asiento. Un vuelo en una lanzadera todavia le producia cierto escalofrio, aun despues de los innumerables viajes que habia hecho. Habia gente —millones, la gran mayoria— que nunca habian despegado los pies de sus planetas en todas sus vidas. El era uno de los pocos afortunados.
Afortunado por conservar su trabajo. Afortunado por los resultados que habia logrado en tantos anos. La Estacion de Transferencia Morita probablemente habia sido la coronacion de su carrera, el proyecto mas importante en el que habia trabajado. Habia visto el lugar por primera vez cuando estaba completamente vacio, en pleno espacio, donde no podia haber nada de nada. El ano anterior habia estado alli, mientras hacia transbordo de una nave de Ylla a una nave dirigida a la Tierra. Morita tenia buen aspecto, realmente bueno. Viva, incluso despues de pasar por extensiones de sus instalaciones, varios anos antes de lo que todos habian esperado. Expansiones lentas. Los planes habian sido incorporados en los disenos originales. En ese entonces las llamaron expansiones demasiado ambiciosas. Ahora decian que eran expansiones visionarias.
Y tambien habia habido otros proyectos. Todos los dias, de un extremo del nexo del agujero de gusano al otro, se evitaban innumerables accidentes en la estructura porque el, y la gente que habia preparado, habian hecho bien su trabajo. El trabajo intenso de una semana habia prevenido a tiempo la propagacion de resquebrajaduras en las lineas de reactores en la gran fabrica orbital Beni Ra y se habian salvado, tal vez, tres mil vidas. ?Cuantos cirujanos pueden decir que salvaron tres mil vidas en diez anos de sus carreras? En ese memorable recorrido de inspeccion, que habia hecho una vez por mes durante anos. Los desastres invisibles que nunca llegaban a ocurrir, en general, no aparecian en los titulares. Pero el lo sabia, y los hombres y mujeres que trabajaban con el tambien lo sabian. Y eso era suficiente.
Lamentaba haber golpeado a Bruce. La alegria del momento ciertamente no compensaba el haber arriesgado su empleo. Los dieciocho anos de beneficios de pension acumulados, las opciones de acciones, la antiguedad, si, tal vez. Al no tener que mantener una familia, Leo podia decidir arrojarlas al viento si queria. Pero, ?quien se ocuparia de la proxima Beni Ra?
Cuando regresaran al Habitat, cooperaria. Se disculparia correctamente ante Bruce. Duplicaria sus esfuerzos de capacitacion, aumentaria el cuidado. Se morderia la lengua, hablaria solamente cuando le dirigieran la palabra. Seria cortes con la doctora Yei. Diablos, incluso haria lo que ella le pidiera.
Cualquier otra actitud seria inutilmente arriesgada. Alli arriba habia cientos de ninos. Tantos, tan variados, tan jovenes. Cien chicos de cinco anos, ciento veinte de seis anos, que llenaban las guarderias, que jugaban en el gimnasio de caida libre. Ningun individuo podia hacerse responsable por arriesgar todas esas vidas en algun intento aventurado. Seria interminable. Imposible. Criminal. Insano. ?A donde podria llevar eso? Nadie podia prever todas las consecuencias. Leo ni siquiera podia prever lo que sucederia a continuacion. Nadie podia. Nadie.
Atracaron en el Habitat. Van Atta hizo pasar a Claire, Andy y la enfermera por la escotilla, mientras Leo desabrochaba el cinturon del asiento.
—Oh, no —oyo decir Leo a Van Atta—. La enfermera llevara a Andy a la guarderia. Tu regresaras a tu antiguo dormitorio. Sacar a ese bebe de aqui fue un acto criminal e irresponsable. Es obvio que no estas capacitada para hacerte cargo de el. Te puedo garantizar que tambien quedaras fuera de la lista de reproduccion.
Los sollozos de Claire eran tan debiles que resultaban apenas perceptibles.
Leo cerro los ojos de dolor.
—Dios —pregunto—, ?por que yo?
Cuando termino de desabrocharse, no pudo evitar pensar en su futuro.
7
—?Leo! —Silver sujeto con una mano la puerta del ala donde estaban los dormitorios de los ingenieros y con las otras tres la empujo con cuidado—. ?Leo, rapido! ?Despiertese! ?Ayudeme! —Apoyo la mejilla en el plastico frio, amortiguo su grito—: ?Leo? —No se atrevia a chillar mas fuerte, por si la oia alguien mas.
La puerta finalmente se abrio. Leo llevaba una camiseta y shorts rojos. Iba descalzo. Su saco de dormir colgaba en la pared del fondo, como un capullo abierto. Estaba completamente despeinado.
—Silver, ?que diablos…?
Tenia una expresion somnolienta.
—Venga rapido. ?Vamos, de prisa! —dijo Silver, cogiendolo de la mano—. Es Claire. Ha intentado salir por una esclusa de aire. Yo trabe los controles. No puede abrir la puerta externa, pero tampoco puede abrir la interna y esta atrapada alli. Nuestro supervisor volvera pronto y entonces no se lo que nos haran…
—Hijo de… —dijo mientras Silver lo conducia por el pasillo. Regreso a su cabina para coger las herramientas—. Bien, vamos, adelante.
Se apresuraron por los laberintos del Habitat, mientras saludaban a los cuadrumanos y terrestres que pasaban junto a ellos por el pasillo. Finalmente la puerta familiar de Hidroponia D se cerro tras ellos.
—?Que ha sucedido? ?Como ha pasado? —le pregunto Leo, cuando pasaban junto a los tubos de cultivo, hacia el otro extremo del modulo.
—Anteayer no me permitieron ir a ver a Claire, cuando regreso con usted en la nave, a pesar de que las dos estabamos en la enfermeria. Ayer nos habian puesto en dos grupos de trabajo diferentes. Pienso que lo hacen a proposito. Hoy he llegado a un acuerdo con Teddie. —La voz de Silver estaba colmada de desesperacion—. Claire dijo que ni siquiera le habian permitido ir a la guarderia a ver a Andy en su turno libre. Yo fui a buscar