– No, si lo mencionara no lo habrian publicado. El autor fue con mucho cuidado al escribir el libro. Con todo, la historia de la vida de Shang era mas que sugerente. Mao podria haber elegido a cualquier pareja de baile, en cualquier momento, en cualquier lugar, pero Shang contaba con el favor imperial. Todo el mundo la envidiaba. Sin embargo, acabo pagandolo muy caro: a principios de la Revolucion Cultural llego una escuadra especial enviada desde Pekin que la aislo y la sometio a un interrogatorio, eso la llevo al suicidio.
– ?Por que? Quiero decir, ?por que la aislaron y la sometieron a un interrogatorio?
– Segun el libro, la escuadra especial intentaba coaccionarla para que confesara «haber conspirado contra nuestro gran lider Mao y haberlo difamado». Sin embargo, en el libro no se menciona ningun comportamiento sospechoso, salvo que, despues de su primer baile con Mao, Shang le comento a una amiga: «El presidente Mao es grande, en todos los sentidos».
– Venga, senor Fei, «grande» puede significar sencillamente «magnifico». La gente siempre decia que Mao era un lider magnifico -afirmo Chen, acariciandose de nuevo la barbilla-. Entonces, ?por que la persiguieron?
– ?Todavia no lo entiende? La senora Mao estaba furiosa. Shang era mas joven y mas guapa que ella, ademas de ser la favorita de Mao, al menos durante algun tiempo. Cuando se volvio poderosa gracias a la Revolucion Cultural, la esposa de Mao envio a aquella escuadra de investigacion especial a Shanghai como venganza. Esta es la autentica historia detras de la historia de Qian que relata el libro.
Era una historia que cualquier lector medio podia imaginarse facilmente, pero no explicaba el repentino interes de las autoridades de Pekin por Jiao. Chen decidio volver a tentar la suerte.
– Hablando de Mao, ?tiene el libro que escribio su medico particular?
– Si encontraran ese libro aqui, me cerrarian la libreria de la noche a la manana. Usted no sera un poli, ?verdad?
– No, se lo preguntaba por curiosidad, porque estabamos hablando del tema.
– No, no lo vendo y no lo he leido, pero un amigo mio si. Esta lleno de historias sobre la vida privada de Mao, e incluye detalles sordidos y muy graficos que nunca aparecerian en ninguna publicacion oficial.
– Ya entiendo.
– Deje que le busque
Chen escogio un libro sobre la historia de la industria cinematografica de Shanghai y otro sobre intelectuales y artistas durante la Revolucion Cultural. Puede que estas obras, ademas de
Fei volvio con un libro en la mano. Tenia una fotografia de Qian en la portada, con un recuadro en el que aparecia otra fotografia, la de Shang, descolorida y casi perdida en el fondo.
Mientras Chen sacaba la cartera frente al mostrador, a Fei parecio ocurrirsele algo.
– Mirela -dijo, senalando la imagen de Shang-. ?Que tragedia! A veces me pregunto si murio asesinada.
– ?Asesinada!
– Muchas figuras celebres se suicidaron durante aquellos anos, pero muchas otras fueron acosadas o golpeadas hasta la muerte. El suicidio, sin embargo, no era culpa de nadie, solo del muerto, una conclusion mas que conveniente para el Gobierno del Partido.
– ?Ah! -exclamo Chen con cierto alivio. El comentario de Fei no hacia sino reflejar lo que todos sabian sobre lo sucedido en aquella epoca.
– En cuanto a la escuadra especial de Pekin, existe otra posible interpretacion -siguio explicando Fei. Chen era el unico cliente en la tienda, y Fei no parecia dispuesto a dejarlo marchar-. Puede que Shang conociera algun secreto terrible, por lo que la silenciaron para siempre. ?Recuerda el juicio a la Banda de los Cuatro? La senora Mao fue acusada de perseguir a las estrellas de cine con las que se relaciono en la decada de los treinta.
Aquello era cierto. Las actrices habian sufrido el acoso de los Guardias Rojos porque conocieron a la senora Mao cuando esta era una actriz de poca monta. Sin embargo, Shang habria sido demasiado joven en aquella epoca.
Chen dio las gracias a Fei y se fue con sus libros hacia el restaurante que servia empanadillas.
Cuando llego a la esquina, sufrio una decepcion al encontrar una
Chen sabia de otro restaurante que abria hasta muy tarde y no quedaba demasiado lejos, pero el inspector jefe habia perdido las ganas de cenar fuera. Decidio volver a casa andando, cargado con los libros.
De vuelta en su piso, Chen empezo a leer con el estomago vacio. A lo lejos, una sirena perforo el aire nocturno. «Absurdo», penso, pasando una pagina. «Es imposible ofrecer un relato racional de la existencia humana.» Chen no tardo en adentrarse en la trama y en la historia que se contaba entre lineas.
Al cabo de unas dos horas, el inspector jefe termino de leer por encima
La historia no era muy distinta de lo que habia imaginado. Trataba sobre el sufrimiento de una mujer hermosa, y reproducia un tema arquetipico sobre la «suerte fina como una hoja de papel» que tiene una mujer bella. El escritor era astuto y centraba la narracion principalmente en Qian, dejando a Shang en un segundo plano. Como en la pintura de un paisaje chino tradicional, el libro invitaba a los lectores a adivinar lo que ocultaban sus elipsis.
Sin embargo, apenas se hacia mencion a Jiao. Cuando Qian murio, Jiao solo tenia dos anos, por lo que esta omision parecia comprensible dada la estructura del libro.
Chen se levanto y se puso a deambular por la habitacion. Tras encender un cigarrillo, creyo tener una idea aproximada sobre la relacion de Shang con Mao, aunque no se le ocurrio que podia haberle entregado Mao a Shang.
No tardo en hacerse otra pregunta: ?podria Mao haber sabido algo sobre la escuadra especial de Pekin? Despues de todo, Shang no era solo una de las «artistas negras». Tal vez las cosas fueran mas complicadas de lo que habia afirmado el ministro Huang.
?Que podia hacer el inspector jefe Chen?
Le seria imposible negarse a participar en el caso. Aun asi, podria intentar llevar a cabo la investigacion con cierta rebeldia, de forma que tuviera sentido para el, aunque no lo tuviera para los demas.
Como casi todos los de su generacion, Chen no se habia tomado demasiado en serio las cuestiones relacionadas con Mao. De nino habia idolatrado a Mao, pero la Revolucion Cultural le hizo perder la fe en el presidente, particularmente despues de la temprana muerte de su padre. A partir de entonces, su vida cambio de forma drastica. Ahora, como miembro de la «elite triunfadora» en la sociedad actual, Chen intentaba convencerse a si mismo de que su fe en el Partido le proporcionaria seguridad. Por esa razon no estaba en condiciones de pensar demasiado en Mao, y su trabajo como inspector jefe era la excusa para no hacerlo. Mientras los periodicos del Partido seguian ensalzando a Mao, en la practica muchas cosas estaban cambiando. Asi que ?para que iba a molestarse?
Chen habia oido diversos rumores sobre la vida privada de Mao. Despues de la Revolucion Cultural, guardaespaldas y enfermeras de Mao habian publicado sus memorias, que, en cierto modo, volvian a resaltar el lado mas humano de Mao al referir, por ejemplo, su peculiar pasion por el tocino o su aversion malsana a lavarse los dientes. Estos libros se vendieron bien, debido posiblemente al interes de la gente en lo que se escondia detras de esas anecdotas. Existian tambien otras historias que no se publicaron pero que fueron muy comentadas. Dado que el archivo de Mao continuaba cerrado y clasificado como confidencial, Chen ni creia ni dejaba de creer las «otras» historias.
Ademas, Chen pensaba que Mao era una figura historica demasiado compleja para juzgarla. Al fin y al cabo, el no era historiador, solo era un poli que tenia que investigar un caso tras otro. En anos recientes, sin embargo, cada vez le parecia mas dificil -incluso como policia- evitar la historia de la nacion durante el regimen de Mao. En China, numerosos casos y situaciones tenian que verse desde una perspectiva historica, y la sombra de Mao aun era alargada.
Habia llegado el momento de investigar un caso relacionado con Mao: el caso Mao. Al menos tendria una perspectiva historica mas rigurosa gracias a la investigacion.