de credito, tus cuentas bancarias y tu telefono y tu mail. Se que te dije que no te podia ayudar, pero despues de colgar empece a pensar en ello y me preocupe.
– ?Por que?
– Porque ves todo eso como un inconveniente, como una gran coincidencia que te ocurre justo cuando estas en la carretera, trabajando sobre este articulo sobre un presunto asesino que no tiene nada que ver con eso.
– No hay nada presunto en este tipo, pero ?estas diciendo que podria estar relacionado? He pensado en eso, pero no puede ser: el tio al que trato de encontrar no tiene ni idea de que voy tras el.
– No estes tan seguro, Jack. Es una tactica de caza clasica: separar y aislar a la presa para luego ir a por ella. En la sociedad actual, separar y aislar a alguien implica separarlo de su zona de confort, el entorno que conocen, y luego eliminar su capacidad de conectarse: telefono movil, Internet, tarjetas de credito, dinero.
Fue contando con los dedos.
– Pero ?como puede saber de mi este tipo? No tuve noticia de su existencia hasta anoche. Mira, Rachel, es genial verte y espero que te quedes esta noche. Quiero que estes aqui, pero no me trago esto. No me interpretes mal: aprecio tu preocupacion… De hecho, ?como demonios has llegado tan condenadamente deprisa?
– Tome un
– ?Joder! ?Por que no me has llamado?
– Porque no podia. Antes han transferido tu llamada a una localizacion externa donde trabajo. No hay identificacion en esas transferencias. No tenia tu numero y suponia que estabas en un numero prepago.
– ?Y que va a decir el FBI cuando descubran que lo dejaste todo y te subiste a un avion para salvarme? ?No aprendiste nada en Dakota del Sur?
Rachel dejo de lado esa preocupacion. Algo en el gesto me recordo el momento en que nos conocimos. Tambien sucedio en una habitacion de hotel; me puso boca abajo en la cama y luego me esposo y detuvo. No fue amor a primera vista.
– Hay un recluso en Ely que ha estado en mi lista de entrevistas desde hace meses -dijo-. Oficialmente, he venido a interrogarle.
– ?Quieres decir que es un terrorista? ?Es eso lo que hace tu unidad?
– Jack, no puedo hablar sobre esa parte de mi trabajo. Pero puedo decirte lo facil que ha sido encontrarte y por que se que no he sido la unica en rastrearte.
Me dejo helado con esa palabra: rastrear. Conjuraba cosas malas en mi imaginacion.
– Vale -dije-. Cuentame.
– Cuando me has llamado, me has dicho que ibas a ir a Ely, de modo que tenia que ser para entrevistar a un recluso. Cuando me he preocupado y he decidido hacer algo, he llamado a Ely y he preguntado si estabas alli. Me han dicho que acababas de irte. He hablado con el capitan Henry, quien me ha explicado que tu entrevista se habia pospuesto hasta manana por la manana, que te recomendo ir a la ciudad y quedarte en el Nevada.
– Si, el capitan Henry. He tratado con el.
– Bien. Le he preguntado por que se ha pospuesto tu entrevista y me ha dicho que tu hombre, Brian Oglevy, estaba incomunicado porque habia una amenaza contra el.
– ?Que amenaza?
– Espera, ya llego. El director de la prision recibio un mail que decia que la Hermandad Aria estaba planeando atacar a Oglevy hoy. Asi que como precaucion lo incomunicaron.
– Oh, vamos, ?y se lo tomaron en serio? ?La Hermandad Aria? ?Pero si amenazan a todos los que no son miembros! Ademas, Oglevy no es un apellido judio.
– Se lo tomaron en serio porque el mensaje llego de la propia secretaria del alcaide. Pero ella no lo escribio, sino alguien anonimo que logro acceder a su cuenta en el sistema penitenciario del estado. Un
– Vale, ?que mas? Sigue siendo muy inverosimil.
Estaba empezando a convencerme, pero me hacia el esceptico para conseguir que me contase mas cosas.
– Le he consultado al capitan Henry si alguien habia llamado preguntando por ti. Me ha dicho que si, que ha telefoneado el abogado para el que presuntamente estas trabajando, William Schifino, y le han contado lo mismo: que la entrevista se retrasaba y que probablemente pasarias la noche en el Nevada.
– Entendido.
– Me he puesto en contacto con William Schifino. El no ha hecho esa llamada.
La mire un rato largo mientras sentia un largo escalofrio en la espalda.
– Tambien le he preguntado a Schifino si alguien habia llamado pidiendo por ti y me ha contestado que si. Un tipo que decia ser tu redactor (uso el nombre Prendergast) le ha llamado, le ha dicho que estaba preocupado y que queria saber si habias ido a ver a Schifino. Este le ha confirmado que habias pasado por ahi y que estabas de camino a la prision en Ely.
Sabia que Prendergast no podia haber hecho la llamada, porque cuando lo llame el no habia recibido mi mensaje y no tenia ni idea de que habia ido a Las Vegas. Rachel tenia razon: alguien me estaba rastreando y lo estaba haciendo bien.
Mi mente destello al pensar en el Patillas: habia subido con el en el ascensor y luego me habia seguido por el pasillo hasta la habitacion.
Si no hubiera oido la voz de Rachel, ?habria seguido caminando o me habria empujado al interior de la habitacion?
Rachel se levanto y anduvo hasta el telefono de la habitacion. Marco el numero de recepcion y pregunto por el gerente del hotel. Espero un momento antes de que atendieran la llamada.
– Si, soy la agente Walling. Todavia estoy en la habitacion 410. He encontrado al senor Mc Evoy y esta a salvo. Queria saber si podria decirme si hay algun huesped en las habitaciones siguientes del pasillo. Creo que deben de ser la 411, 412 y la 413. -Espero, escucho y le dio las gracias al director-. Una ultima pregunta: hay una puerta de salida al final del pasillo; supongo que sera la de las escaleras. ?Adonde van?
Escucho, volvio a darle las gracias y colgo.
– No hay nadie registrado en esas habitaciones. Las escaleras van al parking.
– ?Crees que ese tipo de patillas era el?
Se sento.
– Posiblemente.
Pense en las gafas envolventes, los guantes de conducir y el sombrero de vaquero. Las pobladas patillas le cubrian la mayor parte de las mejillas y apartaban la atencion del resto de facciones reconocibles. Me di cuenta de que si tenia que describir al hombre que me habia seguido solo podria recordar el sombrero, el pelo, los guantes, las gafas de sol y las patillas: los elementos de usar y tirar e intercambiables de un disfraz.
– ?Dios mio! No puedo creer lo estupido que he sido. ?Como me ha descubierto y como ha podido encontrarme? Hace menos de veinticuatro horas de todo, ?y estaba sentado a mi lado en las tragaperras!
– Vamos abajo, ensename la maquina en la que estaba. Podriamos encontrar huellas.
Negue con la cabeza.
– Ni hablar: llevaba guantes de conducir. De hecho, ni siquiera las camaras cenitales te ayudaran, iba con sombrero de vaquero y gafas de sol; todo su atuendo era un disfraz.
– Sacaremos el video de todas formas. Quizas haya algo que pueda ayudarnos.
– Lo dudo. -Negue con la cabeza otra vez, mas para mis adentros que para Rachel-. ?Lo he tenido al lado!
– Ese truco con el correo electronico de la secretaria del alcaide demuestra ciertas habilidades. Creo que seria sensato considerar en este momento que tus cuentas de correo han sido violadas.
– Pero eso no explica como supo de mi para empezar. Para poder entrar en mi mail, tenia que saber de mi. -Di un manotazo en la cama y asenti con la cabeza-. No se como supo de mi, pero yo mande mensajes de correo anoche a mi redactor y a mi companera en el articulo, contandoles que todo estaba cambiando y que iba a seguir una pista a Las Vegas. He hablado con mi redactor hoy y ha dicho que no lo recibio.
Rachel asintio con complicidad.
– Destruir las comunicaciones de salida forma parte del aislamiento del objetivo. ?Tu companera recibio su