sangre.
El contraataque de los automatas resulto tan descontrolado y devastador que se registraron mas muertes en medio ano que en todas las guerras habidas anteriormente en el mundo. A este periodo pertenece la Crisis del Congo. Como se sabe, en lo que era la antigua Republica Democratica del Congo se encuentra el 80% de las reservas de coltan, un mineral esencial en la fabricacion de todo tipo de componentes electronicos. La explotacion de las minas de coltan llevaba un siglo siendo el origen de diversos conflictos belicos convencionales, pero las Guerras Roboticas superaron los limites de violencia conocidos: toda la poblacion del Congo fue exterminada, a excepcion del presidente Nge Bge y las doscientas personas de su familia, que no se encontraban en el pais cuando la masacre y que hoy en dia siguen siendo copropietarios de las minas de coltan, junto con una empresa fantasma que en realidad esta secretamente controlada por tecnohumanos.
La llamada Crisis del Congo no fue el unico exterminio poblacional de las Guerras Roboticas, pero si el mas importante y conocido. Las grandes potencias mundiales radicalizaron rapidamente sus posiciones en torno a esta crisis y las clausulas de Ginebra parecieron cumplirse al fin al pie de la letra: en la soledad del devastado territorio congoleno, entre metales oxidados y amarillentos huesos, los robots se estuvieron destrozando mutuamente durante mas de un ano. Hasta que un dia los paises enterraron tacitamente la X Convencion de Ginebra y volvieron a mandar tropas al frente. A partir de entonces y hasta su fin, las Guerras Roboticas se dirimieron a la vez con automatas y con soldados, combinacion fatal que provoco una espantosa mortandad. Una carniceria de la que, curiosamente, se libraron los replicantes, ya que, practicando como siempre la desobediencia civil (todos los derechos pero ningun deber), se negaron a participar en los combates. Eminentes autores como el profesor Lumbre Ras, premio Nobel de Fisica, han denunciado un complot androide para diezmar a los humanos. Sostienen, con abundantes pruebas documentales, que detras del exterminio de los congolenos y de la vuelta a la guerra tradicional estan los manejos subterraneos de estas criaturas artificiales, que, estrechamente unidas en una logia secreta, constituyen un verdadero poder en la sombra cuyo unico fin es sojuzgar a los humanos.