de antiguedad, no merece la atencion ni siquiera de una deidad menor, y mucho menos del creador del universo.»

— Me esta confundiendo con algun otro predicador. Yo estoy preparado para un universo de millones de anos, pero lo que digo es que los cientificos todavia no lo han demostrado.

— Y yo sostengo que usted no ha comprendido la prueba. ?En que puede salir beneficiada la gente si la sabiduria convencional, las «verdades» religiosas son mentiras?

Cuando ustedes tomen plena conciencia de que el hombre es un ser adulto adoptaran otro estilo de predicacion.

Se produjo un breve silencio, subrayado solo por el eco de sus pasos.

— Perdoneme por ser demasiado vehemente.

— Le doy mi palabra, doctora, de que voy a reflexionar sobre lo que me ha dicho. Me ha planteado usted interrogantes para los cuales deberia tener respuestas, pero con el mismo espiritu, permitame hacerle yo unas preguntas. ?De acuerdo?

Ella asintio.

— Piense en la sensacion que le produce, en este mismo instante, el hecho de tener conciencia. ?Acaso siente los miles de millones de atomos en movimiento? Y mas alla de la maquinaria biologica, ?donde puede aprender un nino lo que es el amor?

En ese momento sono el receptor de mensajes de Ellie. Seguramente la llamaba Ken para darle la noticia que estaba esperando. Se fijo en los numeros que se formaban en el indicador: era, en efecto, el telefono de la oficina de Ken. No habia telefonos publicos en las inmediaciones, pero al cabo de unos minutos encontraron un taxi.

— Lamento tener que marcharme tan de prisa — se disculpo —. Fue un gusto conversar con usted y voy a pensar muy en serio en sus preguntas. ?Queria hacerme alguna otra?

— Si. ?Que precepto de la ciencia impide que los cientificos actuen con maldad?

Capitulo quince — Clavijas de erbio

La tierra, eso es suficiente

No quiero que las constelaciones esten mas cerca

Se que estan bien donde estan

Se que satisfacen a aquellos que pertenecen a ellas

WALT WHITMAN Hojas de Hierba, «Song of the Open Road» (1855)

Se demoraron anos; fue un sueno de la tecnologia y una pesadilla para la diplomacia, pero finalmente se logro construir la Maquina. Se propusieron varios neologismos para designar el proyecto, y nombres evocativos de antiguos mitos, pero como desde el principio todos le dijeron simplemente «la Maquina», esa fue la denominacion que se adopto. Las complejas y delicadas negociaciones internacionales constituian, para los editorialistas occidentales, la «Politica de la Maquina».

Cuando se obtuvo el primer calculo confiable del costo total de la obra, hasta los titanes de la industria aeroespacial se asustaron. La cifra rondaria los quinientos mil millones de dolares anuales durante varios anos, casi la tercera parte del presupuesto militar total — incluyendo armas nucleares y convencionales — del planeta. Se temia que la fabricacion de la Maquina acarreara la ruina de la economia mundial. Si se los analizaba con imparcialidad, los titulares del New York Times eran aun mas extravagantes de lo que habian sido los del extinto National Enquirer, una decada antes.

La historia sera testigo de que ningun profeta ni vidente, ningun adivino ni nadie que afirmara tener poderes precognoscitivos, ningun astrologo ni numerologo habia anticipado el Mensaje ni la Maquina, y mucho menos Vega, los numeros primos, Adolf Hitler, las Olimpiadas y todo lo demas. Muchos sostenian haberlo pronosticado, especialmente personas que previeron los acontecimientos pero se olvidaron de poner sus vaticinios por escrito. Las predicciones de hechos sorprendentes siempre son mas exactas si no se las escribe de antemano: se trata de uno de esos extranos casos habituales de la vida cotidiana. Algunas religiones correspondian a una categoria levemente distinta pues — se argumentaba —, mediante una lectura atenta de sus sagradas escrituras podia anticiparse claramente que habrian de suceder tales prodigios.

Para otros, la Maquina traeria aparejada un periodo de bonanza en la industria aeroespacial, que atravesaba una etapa de declinacion desde que se implantaron los Acuerdos de Hiroshima. Se estaban desarrollando muy pocos sistemas nuevos de armamento estrategico. Si bien se notaba un incremento en el negocio de los habitat en el espacio, eso de ninguna manera compensaba por la perdida de estaciones orbitales de laser y otros inventos del sistema estrategico de defensa con que sonara un gobierno anterior. Asi, los que se preocupaban por la seguridad del planeta si alguna vez llegaba a fabricarse la Maquina, se tragaron sus escrupulos al tomar en cuenta los beneficios, que se traducirian en un mayor numero de empleos, mas ganancias y un gran adelanto profesional.

Unos pocos personajes influyentes sostenian que no habia panorama mas alentador para las industrias de alta tecnologia que una amenaza proveniente del espacio. Seria preciso contar con sistemas de defensa, poderosisimos radares de exploracion y eventuales puestos de avanzada en Pluton. Esos visionarios no se acobardaban ni siquiera frente a las objeciones respecto de la disparidad militar entre terrestres y extraterrestres. «Aun si no pudieramos defendernos de ellos, ?por que no quieren que los veamos venir?», preguntaban. Se habian invertido billones de dolares en la construccion de la Maquina, pero eso seria solo el comienzo, si sabian jugar sus cartas.

Se formo una insolita alianza politica para propiciar la reeleccion de la presidenta Lasker, lo que en efecto se transformo en un referendum sobre si debia, o no, fabricarse la Maquina. Su adversario hablaba de Caballos de Troya y del fin del mundo, y del seguro desaliento de los norteamericanos al tener que verselas con seres que ya habian «inventado todo». La Presidenta expreso su confianza en que la tecnologia nacional sabria enfrentar el desafio, y dejo implicito — aunque no lo dijo con palabras — que el ingenio norteamericano alcanzaria el mismo nivel que el que existia en Vega. Resulto reelecta por un respetable, aunque no abrumador, margen de sufragios.

Un factor decisivo fueron las instrucciones mismas. Tanto en la cartilla vinculada con el lenguaje y la tecnologia basica, como en el Mensaje especifico sobre la fabricacion de la Maquina, no quedo ningun punto sin esclarecer. En ocasiones, se explicitaban tediosos detalles de pasos intermedios que parecian obvios, como por ejemplo cuando, en los fundamentos de la aritmetica, se demuestra que si dos por tres es igual a seis, luego tres por dos tambien da el mismo resultado. Se estipulaba la verificacion de cada etapa de la fabricacion: el erbio producido por ese proceso debia poseer un noventa y seis por ciento de pureza. Cuando se completara el componente 31 y se lo introdujera en una solucion de acido fluorhidrico, los restantes elementos estructurales debian presentar el aspecto que indicaba el diagrama de la ilustracion adjunta. Cuando se montara el Componente 408, la aplicacion de un campo transversal magnetico de dos megagauss deberia hacer girar el rotor a tantas revoluciones por segundo antes de regresar por si solo a un estado de inmovilidad. Si alguna de las pruebas fracasaba, se rehacia el proceso entero.

Al cabo de un tiempo, uno se habituaba a las pruebas y esperaba poder pasarlas.

Muchos de los componentes subyacentes, construidos por fabricas especiales — disenadas segun las instrucciones de la cartilla —, constituian un desafio para el entendimiento humano. No se entendia muy bien como podian funcionar, pero lo concreto era que funcionaban. Aun en tales casos, podian contemplarse los posibles usos practicos de las nuevas tecnologias. De vez en cuando aparecian nuevos conceptos, sobre todo en el campo de la metalurgia y de los semiconductores organicos. En ocasiones se proponian varias tecnologias alternativas para producir un mismo componente; al parecer, los extraterrestres no sabian con certeza que sistema resultaria mas sencillo para la tecnologia de la Tierra.

Cuando se terminaron de levantar las primeras fabricas y se produjeron los primeros prototipos, disminuyo el pesimismo acerca de la capacidad del hombre para reconstruir una tecnologia extrana, escrita en un lenguaje

Вы читаете Contacto
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату
×