mientras intentaba dar con las palabras correctas. Apreto los labios frustrado y luego le pregunto-: ?Habla frances?
– Me temo que pesimamente.
– Es una lastima. -Parecia ligeramente contrariado por su deficiencia-. Yo lo hablo con mas mmmm…
– ?Fluidez? -ofrecio ella.
– Si. En Rusia se habla mucho. En muchos circulos incluso mas que el ruso.
Olivia encontro eso sumamente curioso, pero le parecio poco educado hacer comentarios al respecto.
– ?Ha recibido esta tarde mi invitacion?
– Si, la he recibido -respondio ella-. Es para mi un honor aceptar.
No lo era. Bueno, quiza se sintiese honrada pero desde luego contenta no estaba. Como era de esperar, su madre le habia insistido en que aceptaran ir y Olivia se habia pasado tres horas de pruebas para hacer con urgencia un nuevo vestido. Acabo siendo de seda azul clara, el color exacto de los ojos del principe Alexei, cayo ella de pronto en la cuenta.
Confiaba en que el no pensara que lo habia hecho intencionadamente.
– ?Cuanto tiempo pretende quedarse en Londres? -le pregunto Olivia esperando parecer mas ilusionada que desesperada.
– No es seguro. Depende de… muchas cosas.
Como el principe no parecia dispuesto a desarrollar su criptico comentario, ella sonrio (no con su verdadera sonrisa, estaba demasiado nerviosa como para ser capaz de dedicarsela). Pero el no la conocia bastante para calarla.
– Se quede el tiempo que decida quedarse, espero que disfrute de su estancia -dijo ella encantadora.
El asintio majestuosamente, rehusando hacer comentario alguno.
Bordearon otra esquina. Olivia podia ahora ver a sus padres, que seguian al otro lado de la sala. La estaban mirando, como todos los demas. Habian dejado incluso de bailar. La gente estaba hablando, pero en voz baja. Parecian insectos zumbando por ahi.
?Dios! ?Como deseaba irse a casa! Puede que el principe fuese un hombre sumamente agradable. Es mas, esperaba que lo fuese. La historia tendria mas miga si el era una persona encantadora, encerrada en una carcel de ceremonias y tradicion. Y si tan simpatico era, ella no tenia inconveniente en conocerlo y hablar con el, pero no asi, ?por Dios!, delante de
?Que pasaria si tropezaba? ?Si daba un traspie mientras bordeaban la siguiente esquina? Podria arreglarlo discretamente con una pequena reverencia o exagerarlo y caerse al suelo estrepitosamente.
Seria espectacular.
O espantosamente terrible. Pero daba igual lo que fuera, porque en cualquier caso no tenia el valor de hacerlo.
«Solo unos minutos mas», se dijo. Estaban en la recta final. El principe la devolveria con sus padres o quiza tendria que bailar, pero ni siquiera eso seria tan horrible, porque no estarian solos en la pista de baile. Seria demasiado descarado, incluso para esta gente.
Solo unos minutos mas y luego todo habria acabado.
Harry observo a la bonita pareja acercandose todo lo que pudo, pero la decision del principe de dar una vuelta a la sala le dificulto mucho el trabajo. No era imprescindible permanecer junto a ellos. Era poco probable que el principe hiciera o dijera nada que el Departamento de Guerra encontrase relevante, pero el no estaba dispuesto a perder a Olivia de vista.
Probablemente solo fuera porque sabia que Winthrop sospechaba de aquel personaje, pero a el le habia caido mal nada mas verlo. No le gustaba su postura arrogante, le daba igual que los anos pasados en el ejercito le hubieran dejado una espalda increiblemente erguida. No le gustaba su mirada ni la forma en que sus ojos parecian entornarse cada vez que se topaba con alguien. Y no le gustaba la forma en que movia la boca al hablar, arqueando el labio superior en una perpetua mueca de disgusto.
Harry habia conocido a gente como el principe. No a miembros de la realeza, es verdad, pero si a grandes duques y demas que iban por Europa pavoneandose como si fueran los amos del lugar.
Y supuso que si les pertenecia, pero en su opinion no por ello dejaban de ser una panda de burros.
– ?Oh, estas aqui! -Era Sebastian, quien sostenia en la mano una copa de champan practicamente vacia-. ?Ya te has cansado?
Harry siguio pendiente de Olivia.
– No.
– ?Que curioso! -musito Seb. Apuro su champan, dejo la copa en una mesa cercana y luego se inclino hacia Harry para que este pudiera oirlo-. ?A quien buscas?
– A nadie.
– No, espera, lo he dicho mal. ?A quien estas mirando?
– A nadie -dijo Harry dando un pasito a la derecha para intentar esquivar al conde sumamente corpulento que acababa de bloquearle la vista.
– ?Vaya! Entonces me estas ignorando por… ?por que motivo?
– No te ignoro.
– Pero sigues sin mirarme.
Harry tuvo que darse por vencido, su primo era terriblemente tenaz y el doble de pesado. Miro a Sebastian directamente a los ojos.
– Ya te he visto otras veces.
– Y, sin embargo, nunca deja de ser una delicia mirarme. Peor para ti, si no me miras. -Sebastian le dedico una sonrisa forzada-. ?Quieres que nos vayamos ya?
– Aun no.
Sebastian arqueo las cejas.
– ?Hablas en serio?
– Me lo estoy pasando bien -contesto Harry.
– Te lo estas pasando bien. En un baile.
– Tu lo consigues.
– Si, pero yo soy yo. Y tu eres tu. A ti no te gustan estas cosas.
Harry vislumbro a Olivia por el rabillo del ojo. Ella capto su mirada, el capto la suya y, entonces, ambos apartaron la vista a la vez. Ella estaba ocupada con el principe y el con Sebastian, que estaba resultando mas pesado de lo habitual.
– ?Lady Olivia y tu acabais de intercambiar miraditas? -inquirio Sebastian.
– No. -Harry no era el mejor de los mentirosos, pero si no pasaba de los monosilabos resultaba bastante creible.
Sebastian se froto las manos.
– La velada se pone interesante.
Harry lo ignoro. O lo intento.
– Ya la llaman princesa Olivia -anuncio Sebastian.
– ?
Sebastian parpadeo asombrado.
– ?Cuando te prometiste?
– Eso mismo me pregunto yo -practicamente le espeto Harry-. Y ella no se casara con ese idiota.
– Pareces casi celoso.
– No seas absurdo.
Sebastian sonrio con complicidad.
– Antes me ha parecido verte con ella.
Harry no se molesto en negarlo.
– Ha sido una conversacion de cortesia. Es mi vecina. ?No me dices siempre que sea mas sociable?
– Dime, ?ya habeis aclarado todo el asunto ese del espionaje desde su ventana?