– ?Acerca de ella y Trapp?
– Eso estaria muy bien.
Se fue a la sala de estar, conecto la television, puso los pies en alto y vio las noticias de la tarde. Al cabo de unos momentos ya estaba dormido. Y yo estaba recordando una instantanea en blanco y negro y pensando, a pesar de todo lo que el habia dicho, en Shirlee Ransom. Me fui a la biblioteca y llame a Olivia Brickerman.
– Hola carino -me dijo-. Ahora mismo acabo de llegar y he empezado a atender al Principe Alberto.
– Si te he interrumpido a mitad de algo…
– ?Como? ?Ahora a las ciruelas y los cereales hinchados con leche se les llama
Cuando volvio a ponerse al aparato dijo:
– Ya esta, ya le he preparado su comida.
– ?Como esta Al?
– Sigue siendo el alma de la fiesta.
Su esposo, un gran maestro y antiguo columnista especializado en ajedrez del
– Lo sigo teniendo en casa por el ardiente sexo que me da -anadio-. Y, dime, ?como estas tu, hermoso?
– Muy bien, Olivia. ?Y que me dices de ti? ?Aun sigues disfrutando de un trabajo en el sector privado?
– En realidad, en este momento me siento bastante abandonada por el sector privado. ?Te acuerdas como me meti en este grupo de privilegiados? ?Que el chico de mi hermana Steve, el psiquiatra, queriendo rescatarme del infierno del funcionariado me monto este trabajo como coordinadora de subsidios? Bueno, durante un tiempo estuvo bien, nada demasiado estimulante, pero la paga era buena, no habia borrachines vomitando sobre mi escritorio, y a la hora de la comida podia bajar caminando a la playa. Entonces, de repente, Stevie acepta un empleo en no se que hospital en donde curan a los drogadictos, alla en
– Bien.
– ?Que tal esta Robin?
– Muy bien -le dije-. Muy ocupada.
– Aun espero una invitacion, Alex.
– Un dia de estos.
– Conque un dia de estos, ?eh? Tu asegurate de echar el nudo, mientras yo aun este funcionando y pueda disfrutarlo. ?Quieres oir un chiste cruel? ?Que es lo que tiene de bueno la enfermedad de Alzheimer?
– ?Que es?
– Que cada dia tienes que conocer gente nueva. ?No es
– Probablemente.
– Eso era lo que me imaginaba. ?El muy hijo de puta…!
– Olivia, necesito que me hagas un favor.
– Y yo que pensaba que ibas tras de mi cuerpo…
Pense en el cuerpo de Olivia, que se parecia al de Hitchcock, y no pude evitar el sonreir.
– Eso tambien -le dije.
– ?Pura boquilla! ?Que es lo que necesitas, guapeton?
– ?Aun tienes acceso al archivo de Medi-Cal?
– ?Bromeas? Tenemos Medi-Cal, Medicare, Short-Doyle, Workman's Comp, CCS, AFDC, FDI, ATD… todos los archivos que puedas imaginarte, esto es una sopa de letras. Esta gente no se andan con chiquitas a la hora de hacer facturas: saben como sacarle hasta el ultimo dolar a una peticion legal. El cabron volvio a la Universidad tras su periodo como medico residente, y saco un Master en leyes.
– Estoy tratando de localizar a una antigua paciente: estaba impedida, necesitaba ayuda cronica, y estaba hospitalizada en una pequena clinica de rehabilitacion, en Glendale…, en el South Brand. El lugar ya no existe, y no puedo recordar su nombre. ?Te suena alguna campanilla?
– ?En Brand Boulevard? No. Hay montones de sitios que ya no existen. Las grandes empresas se lo estan comiendo todo… Estos mismos chicos listos se han vendido a uno de los gigantes, de Minneapolis. Bueno, si ella esta totalmente impedida, deberia estar en la ATD, si solo era parcial y trabajaba, podria ser en el FDI.
– La ATD -dije-. ?Podria estar tambien en la Medi-Cal?
– Seguro. ?Cual es el nombre de esa persona?
– Shirlee Ransom, con dos es. Treinta y cuatro anos de edad, nacida en mayo, el quince de mayo de 1953.
– ?Diagnosis?
– Tenia multiples problemas. Los principales probablemente fuesen neurologicos.
– ?Probablemente? ?Pensaba que era paciente tuya!
Dude.
– Es un asunto complicado, Olivia.
– Ya veo. No estaras metiendote otra vez en problemas, ?verdad?
– Nada de eso, Olivia. Solo sucede que en este tema hay compromisos de mantener la confidencialidad. Lamento no poder explicarte mas. Asi que si te es mucha molestia…
– Deja de ser tan buen chico. Al fin y al cabo, no me estas pidiendo que haga nada ilegal… ?no?
– No.
– De acuerdo, en lo que se refiere a hacerme con los datos, nuestro acceso directo se limita a los pacientes tratados en California. Si tu senorita Ransom sigue siendo tratada en algun lugar de este estado, yo podre obtenerte los datos de inmediato. Si salio del estado, tendre que contactar al archivo central, en Minnesota, y esto llevara tiempo, quizas incluso una semana. En cualquier caso, si esta recibiendo dinero del Gobierno, te conseguire una direccion.
– ?Asi de facil?
– Seguro, todo esta en los ordenadores. Todos estamos en la lista de alguien. Incluso algun cabron con un ordenador gigante tiene archivado lo que tu y yo hemos tomado para desayunar, carino.
– La intimidad, el mas caro de los lujos.
– Ya lo puedes decir -asintio ella-. Si supieras como empaquetarla y la pusieras en el mercado, te ibas a ganar un billon de dolares.
16
El viernes por la manana reserve una plaza en un vuelo del sabado para San Luis, en la Sky West. A las nueve de la manana me llamo Larry Daschoff, para decirme que habia localizado una copia de la pelicula porno.
– Me equivocaba. La hizo el mismo Kruse; debio de ser por algun tipo de compulsion privada. Si aun quieres verla, tengo una hora y media entre pacientes -me dijo-. Del mediodia a la una treinta. Reunete conmigo en este lugar, y tendremos una sesion de cine matinal.
Me recito una direccion de Beverly Hills. Era la hora de desenterrar a los antiguos cadaveres. Me sentia inquieto, sucio.
– ?D?
– Nos veremos alli.
La direccion era en North Crescent Drive, en los Beverly Hills Flats…, la pradera de lujo que se extendia desde el Santa Monica Boulevard hasta Sunset, y desde el oeste de Doheny al Beverly Hilton Hotel. Las casas que hay en los Flats van desde casitas de dos dormitorios, que no destacarian en un barrio de viviendas para obreros, hasta