Tienen tecnicas modernas, como analisis de ADN, analisis balisticos, estudios forenses de armas y diversos adelantos que solo conocemos por encima. He intentado hacerme una idea y recordar que entorpece las investigaciones. El fuego, por ejemplo, lo emborrona todo, pero no necesariamente destruye las pruebas forenses. El agua estropea las heridas y el ADN, asi como las huellas dactilares. Nuestro problema es que queremos cometer un crimen violento y dejar una pista. No una pista perfecta, pero si suficiente para guiarlos en la direccion que queremos. Si somos astutos, la policia hara el resto y no sera necesaria ninguna confesion por parte de O'Connell.

– ?Y si el guia a la policia en nuestra direccion?

– Tenemos que estar preparados para eso. Sobre todo, debemos hacer que parezca un crimen irracional, y eso es lo dificil. Pero debemos conseguir que la policia no crea nada de lo que O'Connell alegue. La policia querra respuestas sencillas a preguntas sencillas. Y debemos proporcionarselas.

Sally hizo una pausa y los miro.

– Pero no creo que lo haga -dijo.

– ?Hacer que?

– Guiar a la policia hacia nosotros. Si lo hacemos bien, O'Connell no sabra que hemos organizado todo el tinglado.

Scott asintio.

– Pero yo estuve en su barrio haciendo preguntas. Es probable que alguien me recuerde…

– Por eso en cierto momento clave tendras que estar a kilometros de distancia y en presencia de alguien que luego corrobore tu coartada. Por ejemplo, usando una tarjeta de credito y formulando una queja en un lugar donde haya una camara de video. Sin embargo, probablemente sea importante que estes tambien cerca.

Scott se reclino en su asiento.

– Lo comprendo, pero…

– Lo mismo tienen que hacer Ashley y Catherine. Aunque tengan que interpretar un papel.

Los otros dos permanecieron en silencio.

Sally tomo aliento.

– Lo cual nos lleva a la cuestion crucial: el crimen en si. He pensado al respecto, y creo que tendre que ocuparme yo.

– Yo conseguire el arma -dijo Hope-. Soy la que sabe donde esta y tengo la llave.

– Si, pero ya has estado alli antes. Tendras el mismo problema que Scott. No; otra persona tendra que coger el arma. Puedes decirme donde esta.

Hope asintio, pero Scott nego con la cabeza.

– Eso sera, claro, suponiendo que sigue donde la viste. Lo cual es mucho suponer.

Sally se aclaro la garganta.

– Si, pero en ese caso podemos esperar y elaborar un plan B para hacernos con el arma.

– De acuerdo. Si robamos la pistola y luego te la damos, ?sabras manejarla? ?En estas circunstancias?

– Tendre que hacerlo. Es mi deber, creo.

Hope sacudio la cabeza.

– No se, me parece que es demasiado peligroso… Al igual que tu, Sally, intento pensar como un policia. Si tu cometes el crimen, un poli podria hallarle mucho sentido: una madre protege a su hija. Pero dudo que ningun poli piense que lo hiciera la companera de la madre. En otras palabras, el hecho de que Ashley no sea mi hija, no sea de mi sangre, me protege de las sospechas, ?no crees? Y soy mas joven, mas rapida y mas fuerte, por si hay que acabar corriendo.

Scott y Sally la miraron. Ambos adivinaron lo que estaba a punto de decir, pero ninguno fue capaz de impedirlo.

Hope trato de sonreir entre las nubes de sus propias dudas.

– Esta claro -dijo lentamente-. Debo ser yo quien apriete el gatillo.

Esta vez oi la emocion en su voz.

– ?Te has preguntado alguna vez cuanto puede cambiar la vida en un segundo? Tantas cosas parecen pequenas, y de repente se convierten en grandes…

Era casi medianoche y me habia sorprendido con su llamada.

– ?Crees que tomamos mejores decisiones en la oscuridad, solos, cuando estamos acostados y tratamos de resolver nuestras preocupaciones? ?O es mas sabio esperar a la manana, cuando hay luz y claridad? Me pregunto que tipo de decision tomaron -dijo lentamente-. ?Decisiones nocturnas? ?Decisiones diurnas? Dime.

No respondi. Pense que en realidad no esperaba ninguna respuesta, pero insistio.

– Quiero decir, ?como lo explicarias? Tu eres el escritor. ?Fue inteligente? ?Estaban dando pasos dificiles pero necesarios? ?O actuaban impulsivamente? ?Cuales eran las posibilidades de exito o de fracaso? Eran personas muy razonables dispuestas a embarcarse en la menos razonable de las travesias.

No dije nada, y ella contuvo un sollozo.

– Tengo un nombre para ti -dijo, sorprendiendome-. Creo que te acercara un poco mas al meollo.

Espere, el boligrafo preparado, sin decir nada, imaginandolo todo.

– El fin -dijo-. ?Puedes verlo? Dejame expresarlo de esta forma: ?crees que estaban preparados para lo inesperado?

– No. ?Quien lo esta?

Ella rio, pero el sonido parecio un sollozo. Era dificil distinguirlo a traves del telefono.

41 Despliegue

Sally miro a Hope. Estaban en su dormitorio, y solo la lampara de la mesilla de noche proyectaba una tenue luz amarilla en la habitacion.

– No puedo permitir que lo hagas -dijo Sally.

– No tienes eleccion -contesto Hope encogiendose de hombros-. Creo que la decision esta tomada. De todas maneras, probablemente es lo menos peligroso de esta empresa. -Eso no era asi, pero Hope no sabia hasta que punto.

– ?Empresa?

– A falta de mejor palabra.

Sally sacudio la cabeza.

– Una bomba estalla en un mercado y hablamos de «danos colaterales». Una operacion quirurgica sale mal y hablamos de «complicaciones». Matan a un soldado y se convierte en una «baja». Vivimos a base de eufemismos.

– ?Y nosotras? -pregunto Hope-. ?Que palabra elegirias para tu y yo?

Sally fruncio el ceno y se acerco a un espejo. En otra epoca habia sido hermosa y vibrante. Ahora, apenas reconocio a la persona que le devolvia la mirada desde el cristal.

– Supongo que no sabemos que nos deparara el dia. Incertidumbre. Esa es la palabra.

Hope sintio un arrebato de emocion.

– Podrias decir que me amabas.

– Te amo -respondio Sally-. Es a mi a quien ya no amo.

Guardaron silencio mientras Sally observaba sus papeles.

– Cuando hagamos esto todo sera diferente. Lo sabes, ?verdad?

– Crei que el objetivo era hacer que todo volviera a ser como antes.

– Las dos cosas -dijo Sally, envarada-. Sera las dos cosas.

Cogio una serie de papeles manuscritos.

– Esto es lo que haran Ashley y Catherine. ?Quieres acompanarme a hablar con ellas? Mejor no, ?eh? Si no estas presente, no podran hacerte ninguna pregunta.

– Te esperare aqui -dijo Hope. Se tumbo en la cama, se metio bajo el edredon, y sintio un escalofrio en la espalda.

Sally las encontro en la habitacion de su hija.

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