– ?Que prueba?
– Ya la veras. Te quedaras atonita, chica, atonita. -Su rostro cambio mientras hablaba, hasta ganar en animacion.
– Estupendo -respondio Alex, que se sentia como perdida.
– La prueba irrefutable de que Darwin tenia razon.
– O sea que has podido recrear los origenes del universo en un experimento de laboratorio repetible.
– Hay bastante de ironia en tus palabras. Pero hasta cierto punto, puedo decir que si, claro que si, Dios mio. Lo he conseguido. El ADN, chica, partiendo de dos moleculas de polvo.
– ?Y de donde venia ese polvo?
– Del aire, puro aire, chica -contesto triunfante.
Un camarero presento el lenguado de Dover, que le habia pedido Alex, en busca de su aprobacion antes de ponerse a filetearlo.
De repente el tono de voz de Philip se hizo amable y carinoso.
– ?Estuvo tu marido a tu lado durante estas ultimas semanas?
– ?Que quieres decir?
Alex se dio cuenta de que se ruborizaba y vio el leve movimiento del camarero, ocupado en trinchar el lenguado, que empezaba a interesarse por la conversacion.
– ?Te ayudo?
– Si, fue un gran apoyo.
– Muy bien -dijo sin demasiado entusiasmo.
Alex enrojecio de nuevo y miro al camarero, que estaba teniendo problemas con el lenguado.
– ?Te ha pedido que vuelvas con el?
– Yo, eh… -empezo a decir balbuceando. Miro su reloj digital y pulso el boton de la fecha. 5.4, aparecio en el dial. Lo observo con extraneza. ?Cuatro de mayo?
– ?A que dia estamos?
Volvio a mirar de nuevo su reloj de pulsera.
– ?Alex? ?Alex…! -Oyo las palabras que resonaban como un eco en su cabeza y trato de descubrir de donde venian; vio el rostro al otro lado de la mesa, la boca de Philip que se abria y se cerraba-. Alex, Alex… ?te encuentras bien?
El rostro frente a ella se desenfoco y volvio a aparecer de nuevo.
– Si -respondio por fin-, si, estoy bien.
– Te has puesto muy blanca.
– Lo siento. -Volvio a bajar los ojos para mirar de nuevo su reloj y fruncio el ceno-. ?Que hora es?
– Las dos menos veinte.
Su reloj marchaba perfectamente.
– ?Sabes si hubo tormenta la noche pasada?
Main miro con aire de sorpresa al lenguado que el camarero puso delante de el, tras haberlo abierto y limpiado.
– Fue una dura pelea, ?eh? -le dijo al camarero con voz fuerte y dura.
– ?Una pelea, senor?
– Parece como si hubiera sido masacrado.
– Lo siento, senor. -El camarero vacilo y se retiro.
– ?Una tormenta? -Reanudo la conversacion con Alex.
– Si, con aparato electrico.
– Es posible. Anoche habia mucha humedad en el ambiente.
De pronto Alex se sintio liberada.
– ?Y eso puede afectar a relojes electronicos como este?
Philip la miro extranado.
– Posiblemente. Puede producir alteraciones en la corriente electrica.
Ella guardo silencio un momento, pensativa.
– ?Podria afectar a instrumentos alimentados por bateria solar?
El afirmo con la cabeza, lentamente:
– Posiblemente. ?Por que?
– Oh, por nada.
Philip bajo los ojos y miro malevolamente al pescado, despues volvio a beber un trago de vino y se seco el bigote con la servilleta.
– ?Que opinas de los mediums, Philip?
– ?Mediums?
– Una amiga me aconsejo que visite a una.
El hombre tomo una cucharada de zanahorias de la fuente con la guarnicion y parecio sentirse incomodo.
– Toma un poco de zanahorias -le recomendo-. Aqui las preparan muy bien.
Alex se sirvio.
– No me has contestado.
– Supongo que hay personas que encuentran ayuda en ellas.
– ?Quienes? ?Gentes que no pueden aceptar la muerte de un ser querido?
Philip se encogio de hombros.
– ?Eres cristiana?
– Creo que si.
– Entonces crees en la vida eterna.
– Hace ya tiempo que no estoy segura de lo que creo.
– Un excelente ejemplo de la evolucion, el lenguado de Dover. -Tomo un trozo de pescado con el tenedor y lo mantuvo levantado, en vertical-. Solia nadar de lado, en posicion vertical. -Agacho el tenedor pero mantuvo la mano alzada-. No empezo a nadar tumbado, plano, hasta despues de haber decidido irse a vivir al fondo del mar. Se dio cuenta de que asi seria menos visible.
– Muy inteligente.
– Pero tenian un problema con los ojos. Tenian uno a cada lado de la cabeza, lo cual estaba muy bien cuando nadaban de lado, pero al nadar plano, resultaba que uno de sus ojos miraba al fondo del mar y el otro al cielo. Hasta que un dia… ?zas! Los dos ojos aparecieron arriba en el mismo lado de la cabeza.
– ?Y eso que tiene que ver con los mediums?
– ?Es que no lo ves? La evolucion nos dice como trabaja la naturaleza. Podemos probar que Dios no hizo al hombre. Pero ?que hay si le damos la vuelta a la cuestion y la vemos desde otro angulo?
– Esa es una discusion muy antigua.
– No, chica, es nueva. Muy nueva, recientisima.
– ?La posibilidad de que sea el hombre quien invento a Dios?
Mantuvo el trozo de pescado a la altura de su boca, examinandolo cuidadosamente.
– No, muchacha, no inventarlo. Hacerlo. ?Hacerlo! Si todo el mundo animal ha evolucionado a partir de dos motas de polvo y un rayo electrico, ?por que no pudo ocurrir lo mismo con el mundo espiritual?
– Estas loco.
– Soy mas inteligente que este lenguado.
– ?Como lo sabes?
– Porque si fuera al reves seria el quien me estaria comiendo a mi.
Alex sonrio.
– Al menos me estas dando animos.
– Si, claro, todos necesitamos, de vez en cuando, que alguien nos anime.
Alex comio un trozo de su lenguado.
– Es muy bueno, aun cuando se trate de un animal que sobrevive desde tiempos tan lejanos.
Philip dejo su tenedor sobre el plato y se ruborizo ligeramente.
– Yo… Me pregunto si me permitiras que te invite a cenar una noche. No en estos momentos, pero quizas algo mas adelante.