estaba lejos de resultar intimidante ya que el le sacaba una buena cabeza.
– No me gusta que me amenacen, que me mientan o que me manipulen. Harias bien en recordarlo -le dijo.
Le sonrio sarcasticamente.
– ?O que? ?Vas a lloriquearme?
Jesse arremetio contra el pero antes de que pudiera atacar, Xypher se volvio y lo sujeto por el cuello. Lanzando a Jesse contra el suelo, se echo hacia atras para golpearlo, pero se contuvo antes de completar el ataque.
Se alejo.
Jesse lo miro boquiabierto mientras se ponia de pie.
Simone estaba asombrada. A pesar de que Jesse podia mover cosas, nadie jamas habia podido tocarlo.
– ?Como es que puedes tocarlo?
Xypher cruzo los brazos sobre su pecho.
– Aun conservo muchos de mis poderes divinos, pero no todos, y los que aun tengo van y vienen de manera impredecible. Sin lugar a dudas, cortesia de Hades y su retorcido sentido del humor.
Jesse la miro fijamente con incredulidad.
– Creo que tendremos que creerle. Nadie habia sido capaz de tocarme desde la noche en que mori.
Tragando, Simone hizo un gesto de asentimiento. Lo que Xypher acababa de hacer era imposible e inexplicable.
– De acuerdo. Empecemos de nuevo. Tu eres un dios del sueno cuyos poderes estan jodidos, y estas aqui para asesinar a alguien. Estos… -Ella alzo el brazo en el que tenia el brazalete. -Son un desafortunado regalo.
El asintio.
– Por todo lo que se, estos pequenos juguetitos podrian explotar y asesinarnos. Tenemos que encontrar la forma de quitarnoslos.
– Bien. Creo que conozco a alguien que puede ayudarnos.
– ?Tu? -El se burlo. -Tu conoces a alguien. -El se rio.
Oh, eso la ofendio.
– Ey, resulta que conozco a muchas personas. La mayoria de ellos son realmente inusuales.
– Si, ?y acaso alguno de ellos tiene algun tipo de conexion con un dios Griego?
– Pues de hecho, si. -Lo miro pagada de si misma. -Sucede que trabajan para Artemisa.
Reacciono instantaneamente.
– ?Conoces a los Dark-Hunters?
– No personalmente, pero conozco a un Escudero.
– Llevame con el.
Esas palabras le cayeron como baldazo de agua fria a mitad de la noche.
– Eres un verdadero mandon HDP [2]. Quien se murio y te convirtio…
Simone se detuvo al darse de cuenta de que si decia la verdad, entonces el hombre era realmente un dios. Lo que respondia a su pregunta. Y explicaba bastante sobre su ego y prepotencia.
– Olvidalo. Sube al coche y vayamos a buscar a Tate. Si estas en lo cierto sobre estas cosas explotando, entonces necesitamos darnos prisa.
Aparecieron dentro del coche instantaneamente.
Simone sacudio la cabeza para despejarse mientras un extrano zumbido le susurraba en los oidos.
– Guau. ?Puedes llevarnos a lo oficina de Tate de esa forma?
– Solo si hubiera estado alli antes. Debo conocer el lugar al que me dirijo para perfeccionarlo. De lo contrario podriamos atascarnos en medio de una pared o aparecer en algun otro lugar de mierda.
“De mierda”, era malo. Definitivamente no queria eso. Ser implantada a una pared no mejoraria las cosas.
Jesse aparecio en el asiento trasero.
– Por cierto, ?Habeis notado que Gloria se desvanecio durante la persecucion? No tengo idea si considerarlo como algo bueno o como algo malo.
La tristeza la envolvio mientras ponia en marcha el coche.
– Estoy segura de que es malo. Pero nos preocuparemos por ella despues de hablar con Tate. A menos que puedas encontrarla en el otro plano, no hay mucho mas que podamos hacer por ella ahora.
El miedo destello en los castanos ojos de Jesse.
– Si, claro. ?Recuerdas lo que sucedio la ultima vez que hice eso? No es una experiencia que quiera volver a frontar.
Tampoco ella. El pobre Jesse casi habia sido devorado por un Daimon.
Simone condujo hacia la oficina de Tate y cogio el telefono. Marco el numero para asegurarse de que el estuviera dentro.
Atendio a la cuarta llamada.
– Hola, mi amor. Acabo de cortar con los Escuderos.
Deslizo su mirada hacia Xypher, que permanecia sentado luciendo adusto e irritable.
– Eso es genial, pero ahora mismo tengo un real y apremiante problema.
– ?Encontraste algo?
– Mas bien, algo me encontro a mi.
– ?A que te refieres? -pregunto, su voz denotaba miedo.
Simone considero cual seria la mejor manera de contarle lo que habia sucedido. No acostumbraba a andarse con rodeos. Ademas, si Tate trabajaba para los Dark-Hunters, tal vez estuviera al tanto de lo que era un Dream- Hunter.
– Mientras buscaba en los alrededores, un grupo de Daimons aparecio y tambien… un Skotos.
Se rio nerviosamente.
– Me estas tomando el pelo, ?no es cierto?
Xypher enarco una bonita ceja como si pudiera oir la conversacion.
– No, -le respondio, alargando la palabra-y me estoy jugando que sabes de que se trata.
– Absolutamente. ?Te han herido?
– Raspado, un poco. -Miro a la izquierda sobre el Canal-. Pero el meollo del asunto es que los Daimons me han abrochado algo en la muneca y tambien en la del Skotos. No sabemos lo que es y necesitamos encontrar a alguien que lo sepa.
– Necesitas un oraculo. -Tate hizo que eso sonara como algo tan facil.
Simone sacudio la cabeza.
– Si, y nos encontramos un poquito alejados de Delphi, carino.
– No tienes que ir a Grecia, nena. Conoces a Julian Alexander, ?cierto?
Fruncio el ceno ante el nombre tan familiar.
– ?El sexy profesor de historia?
– No es que lo considere sexy, pero si.
Ella ignoro el sarcasmo.
– ?No estaras realmente diciendome que el es un oraculo que habla con los dioses?
Tate rio con malicia.
– Preparate, nena. Es hijo de Afrodita.
Por supuesto que lo era… ?Por que deberia algo en este mundo tener sentido?
Dios santo, no es como si no estuviera sentada junto a uno de los hombres mas guapos del mundo que tambien era un dios. O que tuviera un tonto fantasma adolescente sentado en el asiento trasero de su coche, tarareando la letra de la cancion “Todos quieren dominar el mundo”, del grupo Tears for Fears.
Lo unico que tenia sentido era que el buenorro del departamento de historia era tambien, un semidios…
– Estaba segura de que no me gustaria la respuesta, -murmuro-. Y pensar que todo este tiempo, solo crei que se trataba de un profesor mono.
– Y todos tus alumnos creen que eres una excentrica porque pareces hablar sola, cuando te descubren teniendo una conversacion con Jesse.