visual era rojo, sus sentidos vivos, el baston fue abandonado horas atras. Con no mas frio que de costumbre, se habia deshecho del jersey de cuello alto, colgando las armas sobre su piel desnuda. Sentia todo el cuerpo, regodeandose con todo el poder de sus musculos y huesos. Y alli habia tambien otras cosas. Cosas que no habia experimentado en…

Dios, habia pasado una decada desde que se dejara llevar tan lejos, y por eso fue manipulado, un retroceso deliberado en la locura, se sintio con el control… lo cual probablemente era una falacia peligrosa, pero no le importaba una mierda. Se habia… liberado. Y queria luchar contra el enemigo con una desesperacion que era completamente sexual.

Tambien estaba frustrado como el demonio.

Se asomo por una de las ventanas de la biblioteca. Habia dejado bien abierta la puerta principal, para alentar a las visitas. Nada. Nada. Cero.

El reloj del abuelo sono doce veces.

Habia estado tan seguro de que el lesser se mostraria, pero nadie atraveso la puerta, o subio el camino hacia la casa. Y segun las camaras de seguridad de la periferia, los coches que habian pasado por la calle eran solo los autoctonos del vecindario: varios Mercedes, un Maybach, algunos Lexus SUV, cuatro BMW.

Malditos. Queria a ese asesino, lo suficientemente mal para gritar, y el deseo de luchar, para vehngar a su familia, proteger su territorio, tenia sentido. Su linaje descendia de la elite de guerreros por parte de su madre, y la violencia estaba arraigada en el; siempre la tuvo. Anadiendo a su naturaleza la colera por lo de su hermana y el hecho que habia tenido que sacar urgentemente a su mahmen de la casa en plena jodida luz del dia, era como un barril de polvora.

Penso en la Hermandad. Habria sido un buen candidato, si lo hubieran reclutado antes de su transicion… ?Excepto que quien infiernos sabia ya lo que ellos hacian? Habian pasado a la clandestinidad cuando la civilizacion vampiro se desmorono, convirtiendose en ese enclave escondido, protegiendose a ellos mismos mas que a la raza que habian jurado defender.

Demonios, no ayudaba el pensar que si ellos hubieran estado mas atentos en su trabajo y menos en si mismos podian haber impedido el secuestro de Bella. O encontrarla de inmediato.

Una nueva rafaga de colera lo atraveso, continuo paseando por la casa con un patron aleatorio, asomandose a las ventanas y puertas, comprobando los monitores. Finalmente decidio que la espera sin proposito era una tonteria. Iba a perder el juicio vagando por alli toda la noche, y tenia negocios que atender en el centro. Si conectaba las alarmas y ellos las hacian saltar, podria materializarse en un parpadeo.

Cuando llego a su habitacion, fue hacia el armario y se detuvo enfrente del armario cerrado al fondo. Ir a trabajar sin medicarse no era una opcion, incluso si significaba tener que utilizar una pistola en vez de un mano a mano con el lesser si el bastardo aparecia.

Rehv saco un vial de dopamina asi como una jeringuilla y un torniquete. Cuando preparo la aguja y envolvio la goma alrededor de su antebrazo, clavo los ojos en el claro fluido que estaba a punto de introducir en sus venas. Los charlatanes habian mencionado que con esa clase de dosis tan alta, la paranoia era un efecto secundario en algunos vampiros. Y Rehv habia duplicado la prescripcion desde… Jesus, desde que Bella habia sido raptada. Entonces quizas se habia vuelto loco.

Pero entonces penso en la temperatura del cuerpo de esa cosa que se habia parado enfrente de las puertas. Con cincuenta grados no estaba vivo. No los humanos.

Se inyecto esperando hasta la recuperar la vision y el cuerpo. Entonces se abrigo bien, agarro el baston y salio.

Zsadist estaba al acecho en ZeroSum, completamente consciente de la preocupacion silenciosa de Phury surgiendo amenazadoramente tras el como una niebla humeda. Buena cosa, encontro que su gemelo era facil de ignorar, o toda esa desesperacion le habria dejado seco.

Debil. Estas tan debil.

Sip, bien, tendria que ocuparse de eso.

– Dame veinte minutos -le dijo a Phury-. Luego te reunes conmigo en el callejon.

Sin perder tiempo. Escogio a una puta humana que tenia el pelo recogido en un mono, le dio doscientos dolares, y practicamente la empujo fuera del club. No parecia preocupada por su cara, su tamano o por la manera en que la llevaba. Tenia la vista perdida, estaba tan colocada.

Cuando estuvieron en el callejon, reia demasiado alto.

– ?Como lo quieres? -dijo, haciendo un pequeno baile en sus altisimos talones. Tropezo, entonces puso las manos sobre su cabeza y se desperezo en el frio-. Me parece que rudo. Lo cual esta bien para mi.

La volteo de cara a los ladrillos y la sujeto en el lugar por la nuca. Cuando rio nerviosamente y fingio luchar, la domino, pensando en las innumerables humanas que habia chupado durante anos. ?Cuan limpias habria dejado sus memorias? ?Se despertaban con pesadillas sobre el cuando su subconsciente se removia?

Adicto, penso. Era un adicto. Igual que la Mistress.

La unica diferencia era, que el no tenia eleccion.

?O si? Podia haber usado a Bella esta noche, ella lo deseaba. Pero si no se alimentaba de ella, era solo porque iba a ser mas duro para ambos el dejarla marchar. Y hacia alli se dirigian.

Ella no queria ser vehngada. No podria descansar mientras ese lesser ocupara un espacio en la tierra…

Mas que eso, no podia soportar mirar a Bella destruyendose tratando de amar a un macho que no le convenia. Tenia que obligarla a alejarse de el. Queria que estuviera feliz y a salvo, queria mil anos suyos despertandose con una tranquila sonrisa en su cara. La queria bien emparejada, con un macho del que pudiera sentirse orgullosa.

A pesar de la union que tuvo con ella, queria que conociera mas alegria de la que tendria con el.

La prostituta se contoneo.

– ?Lo haremos o que, papito? Porque estoy algo excitada.

Z descubrio los colmillos y levanto la cabeza, preparandose para el golpe.

– !Zsadist… no!

La voz de Bella vino a su cabeza. Estaba de pie en medio del callejon, a unos quince pasos aproximadamente. Sus ojos estaban horrorizados, la boca abierta.

– No -dijo roncamente-. No… lo hagas.

Su primer impulso fue llevarla de vuelta a la maldita casa y gritarle por salir. El segundo fue que tenia la oportunidad de cortar los lazos entre ellos. Seria una maniobra quirurgica, con mucho dolor involucrado, pero ella se curaria de la amputacion. Aunque el no.

La puta miro por encima, entonces rio, un gorgorito alto y feliz.

– ?Va a mirar? Porque eso te costara cincuenta pavos mas.

Bella se puso la mano en la garganta cuando Zsadist sujeto a la humana entre su cuerpo y la pared de ladrillos del edificio. El dolor en su pecho era tan grande que no podia respirar. Verlo tan cerca de otra hembra… una humana, una prostituta ademas… ?y con el proposito de alimentarse? ?Despues de todo lo que habian compartido la noche anterior?

– Por favor -dijo-. Utilizame. Tomame. No hagas esto -giro a la hembra hasta que quedaron frente a frente, entonces coloco un brazo a traves del pecho de la mujer. La prostituta rio y se ondulo contra el, restregando su cuerpo en el suyo, las caderas moviendose en un sinuoso serpenteo.

Bella tendio las manos en el aire helado.

– Te amo. No tuve la intencion de insultarte frente a los Hermanos. Por favor, no hagas esto en represalia.

Los ojos de Zsadist miraron los suyos. El sufrimiento se proyectaba en ellos, una absoluta desolacion, pero dejo al descubierto sus colmillos… entonces los hundio en el cuello de la mujer. Bella chillo mientras el tragaba, la hembra humana reia otra vez con un sonido ritmico y salvaje.

Bella se tambaleo hacia atras. Mientras sus ojos no se apartaron de los de ella, incluso cuando reposiciono el mordisco y bebio mas. Incapaz de mirar ni un minuto mas, se desmaterializo en el unico lugar en el que podria pensar.

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