Bosch levanto el tercer dedo y en ese mismo momento levanto la pierna derecha y la descargo en la puerta. Era una puerta hueca. Cedio facilmente y se abrio con un crujido. El impulso de Bosch lo llevo al interior del dormitorio. Alzo la pistola y se volvio hacia la cama.
Stoddard no estaba alli.
Bosch continuo volviendose, atisbando a Stoddard en el espejo. Estaba de pie en la esquina, del otro lado de la puerta. Tenia el canon de una pistola en la boca.
Bosch oyo que Rider gritaba y su cuerpo atraveso el umbral a toda velocidad y se lanzo hacia Stoddard.
El estampido de un disparo sacudio la habitacion cuando Rider y Stoddard cayeron al suelo. El revolver cayo de la mano de Stoddard y repiqueteo en el suelo. Bosch se movio con rapidez hacia ellos y dejo caer su peso sobre Stoddard, al tiempo que Rider rodaba sobre su cuerpo para separarse de el.
– Kiz, ?te han dado?
No hubo respuesta. Bosch trato de mirar hacia ella mientras mantenia a Stoddard bajo control. Rider tenia una mano en el lado derecho de la cabeza.
– ?Kiz?
– ?No me ha dado! -grito-. Creo que estoy sorda de un oido.
Stoddard trato de levantarse, incluso con el peso de Bosch encima de el.
– ?Por favor! -dijo.
Bosch se sirvio del antebrazo para evitar que uno de los brazos de Stoddard le sirviera de punto de apoyo para levantarse. El pecho de Stoddard golpeo el suelo y Bosch rapidamente tiro del brazo hacia atras y le coloco una esposa. Despues de una resistencia minima, tiro del otro brazo hacia atras y completo la accion de esposado. Se inclino y le hablo a Stoddard.
– Por favor ?que?
– Por favor, dejeme morir.
Bosch se levanto y tiro de Stoddard para que este se pusiera en pie.
– Eso seria muy facil para usted, Stoddard. Eso seria como dejar que se escapara otra vez.
Bosch miro a Rider, que se habia levantado. Vio que tenia parte del cabello chamuscado por la descarga de la pistola. Le habia ido de un pelo.
– ?Vas a ponerte bien?
– En cuanto pare este zumbido.
Bosch levanto la mirada y vio el pequeno agujero de bala en el techo. Oia las sirenas que se acercaban. Cogio a Stoddard del codo y tiro de el hacia la puerta del dormitorio.
– Voy a bajar y pondre a este tipo en un coche. Lo llevaremos a Devonshire, lo retendremos alli hasta que presentemos los cargos.
Rider asintio, pero Bosch sabia que todavia estaba pensando en lo que acababa de ocurrir. El zumbido en su oido era un recordatorio de lo justo que habia ido.
Bosch cogio a Stoddard del brazo al bajar por la escalera. Cuando llegaron a la sala de estar, Stoddard hablo con un tono de desesperacion en la voz.
– Puede hacerlo ahora.
– ?Hacer que?
– Dispararme. Diga que trate de huir. Quiteme una de las esposas y diga que me solte. Quiere matarme, ?verdad?
Bosch se detuvo y lo miro.
– Si, queria matarle. Pero eso seria demasiado bueno para usted. Va a tener que pagar por lo que les hizo a esa chica y a su familia. Y matarle aqui mismo ni siquiera cubriria los intereses de estos diecisiete anos.
Bosch lo empujo con rudeza hacia la puerta. Salieron al jardin delantero justo cuando un coche patrulla se detenia y apagaba la sirena. Bosch vio por la barra de luz aerodinamico del techo que era uno de los modelos nuevos con equipamiento de primera. El departamento solo podia permitirse unos cuantos vehiculos asi en cada ciclo presupuestario.
El coche le dio a Bosch una idea. Levanto la mano e hizo un circulo en el aire con el dedo, la senal de que no habia problemas.
Al conducir aStoddard hacia el coche vio que Muriel Verloren caminaba por el centro de la calzada hacia su casa. Estaba mirando a Stoddard. Tenia la boca muy abierta como si fuera a gritar horrorizada. Echo a correr hacia ellos.
41
Bosch viajo con Stoddard en el asiento de atras del coche patrulla en el trayecto hasta la Division de Devonshire. Rider se quedo atras en la casa de los Verloren para calmar a Muriel y para que el personal medico la revisara. Cuando le dieran la autorizacion volveria en el coche de Bosch a la comisaria.
El trayecto hasta la division era de solo diez minutos. Bosch sabia que tenia que darse prisa si queria que Stoddard hablara. Lo primero que hizo fue leerle al director sus derechos. Stoddard habia hecho ciertas admisiones mientras estaba encerrado en el dormitorio de Rebecca Verloren, pero el hecho de que pudieran utilizarse en un juicio era cuestionable, puesto que no habian sido grabadas y el no habia sido advertido de sus derechos, entre los que se incluia el de guardar silencio.
Despues de leerle sus derechos de una tarjeta de visita que le habia pedido antes a Rider, Bosch simplemente pregunto:
– ?Quiere hablar conmigo ahora?
Stoddard estaba inclinado hacia delante porque todavia tenia las manos esposadas a su espalda. Tenia la barbilla casi en el pecho.
– ?Que hay que decir?
– No lo se. O sea, no necesito que hable. Le tenemos. Acciones y pruebas, tenemos todo lo que necesitamos. Solo pensaba que a lo mejor querria explicar las cosas, nada mas. En este punto mucha gente quiere explicarse.
Al principio, Stoddard no respondio. El coche se dirigia hacia el este por Devonshire Boulevard. La comisaria estaba a unos tres kilometros.
Antes, cuando habia hablado con los dos patrulleros en el exterior del coche, le habia pedido al conductor que fuera despacio.
– Es gracioso -dijo Stoddard al fin.
– ?El que?
– Soy profesor de ciencias, ?sabe? O sea, antes de ser director daba clases de ciencias. Era el jefe del departamento de ciencias.
– Aja.
– Y les ensenaba a mis alumnos lo que era el ADN. Siempre les decia que era el secreto de la vida. Descodificar el ADN era descodificar la vida.
– Aja.
– Y ahora…, ahora, bueno, se ha usado para descodificar la muerte. Por ustedes. Es el secreto de la vida. Es el secreto de la muerte. No lo se. Supongo que en realidad no tiene gracia. En mi caso es mas bien ironico.
– Si usted lo dice.
– Un tipo que ensena el ADN es atrapado por el ADN. -Stoddard se echo a reir-. Eh, es un buen titular -dijo-. No se olvide de contarselo.
Bosch se inclino y uso una llave para soltarle a Stoddard las esposas. Despues volvio a cerrarlas por delante del torso del detenido para que este pudiera incorporarse.
– En la casa ha dicho que la amaba -dijo Bosch. Stoddard asintio.
– La amaba. Todavia la amo.
– Bonita manera de demostrarlo, ?no?
– No estaba planeado. Nada estaba planeado esa noche. La habia estado vigilando, nada mas. Siempre que podia, la vigilaba. Pasaba en coche por delante de su casa muchas veces. La seguia cuando iba en coche. Tambien