— No son los libros. No puedo describir la cosa — Kruger se encontraba ya en la puerta al decir Dar sus ultimas palabras. Paro un momento mientras sus ojos se acostumbraban a la oscuridad; entonces vio lo que el pequeno piloto queria decir.
La cabana estaba vacia, excepto por una ruda mesa que habia en el centro, en la cual habia una especie de aparato. No tenia caja y contenia espirales y condensadores y lo que parecian haber sido tubos de vacio, todo a la vista. Kruger se dio cuenta de lo que tenia que ser casi instantaneamente, pero no le dieron ninguna oportunidad de expresar su opinion, pues el aparato que habia en la mesa hablo primero.
— Adelante, Nils Kruger. Te he estado esperando bastante tiempo. Tenemos mucho que decirnos el uno al otro.
X. ELUCIDACION
La voz era la de un Profesor; no habia duda. Tambien era indudable el hecho de que Nils Kruger iba a tener que revisar unas cuantas de sus ideas. Ni siquiera la raza que tenia su cuartel general en el casquete polar y ciudades dispersas por la mayoria del planeta tenia radios, por lo que sabia. ?Podia este ser haber aprendido mas sobre electricidad de lo que parecia posible, a deducir por la ciudad desierta?
— ?Por que me estaba esperando? — pregunto el chico —. Yo mismo no esperaba volver.
?O es que piensa usted que necesito un encendedor con tanta urgencia para dejarlo demasiado tiempo abandonado?
— Estaba seguro de que Dar Lang Ahn volveria a por sus libros; conozco demasiado a su gente para dudarlo. Despues supe que tu vendrias con el.
— ?Como lo supo?
— Me lo dijeron. Te explicare esto en su debida forma. Puede ser que no me creas, pero a pesar de todo lo hecho por mi de lo que tu puedas resentirte, no soy enteramente tu enemigo. Estoy deseando permitirte vivir tanto como tu naturaleza te deje, satisfechas unas ciertas condiciones.
— ?Y si no se satisfacen? — Kruger, naturalmente, se resentia de las palabras del oculto ser.
— Entonces seguiran sucediendo accidentes. No podras escapar a todos.
Poco a poco, el significado de esto empezo a asustar al chico.
— ?Quiere decir que los desprendimientos de tierra en la ciudad y en el agujero fueron hechos a proposito?
— Efectivamente. Tambien quiero decir que una cierta puerta no se cerro por accidente y que una trampilla fue dejada sin guarda y sin cerrar con un proposito, y que un cierto geiser expulso su contenido en lugar de emitir solo calor. Se sensato, Kruger; sabes muy poco sobre este planeta y yo demasiado.
— Pero usted no podia… — Kruger no siguio; el hecho de que esta cosa supiera los sucesos en las Murallas de Hielo hacia ridicula su objecion. Cambio de conversacion —.
?Como se entero? ?Es usted uno de los Profesores de alli?
— Hablo con ellos a menudo.
— Entonces, ?causaron ellos estos accidentes a peticion suya, o querian librarse de mi ellos solos? ?O lo hizo usted a pesar de ellos?
— Fueron provocados a una orden mia. No querian que fueras destruido; desde un punto de vista puramente personal tampoco yo. Por desgracia, cooperas demasiado.
— ?En que sentido? ?Y por que tenia que ser ese un factor en contra mia?
— Te hice muchas preguntas mientras que eras un prisionero aqui, no solo acerca de ti, sino acerca de los conocimientos tecnicos que posees. Las respondiste todas diciendo la verdad y, por lo que puedo saber, correctamente. Yo no soy electricista, pero se lo suficiente para seguir la mayor parte de lo que dijiste.
— ?Cual es su objecion a eso?
— Si me lo dices a mi, en quien no tienes ninguna razon para confiar, se lo diras presumiblemente tambien a la gente de Dar Lang Ahn. No tengo ninguna objecion al estado de civilizacion en el cual se encuentran ahora, pero hay buenas y suficientes razones por las que no queremos que igualen la tecnologia de su gente.
— ?Como sabe usted cual es nuestro nivel tecnico?
— Me dijiste lo suficiente con el simple hecho de estar aqui.
— ?Cual es su objecion a que aprendan nuestra tecnologia, si usted tambien la aprende?
— Principalmente porque no queremos que abandonen este planeta. Los necesitamos aqui.
Kruger empezo a tener una fuerte sospecha en este punto y formulo una pregunta para comprobarlo.
— ?Que pasa con esa gente que estaba aqui en el pueblo? ?Se opondria a que la aprendieran ellos?
— Mucho. Son mas faciles de controlar asi.
— ?Como es que se atreve a decirme todo esto con Dar Lang Ahn escuchando la conversacion?
— Sus Profesores ya lo saben. No querian ayudarme a librarme de ti, pero yo podia aguantar una cierta presion. Cuando fracasaron sus intentos hice que te mandaran a ti para persuadirte si fuera posible y destruirte en caso contrario.
Kruger, convencido de que su idea era correcta, se inclino hacia adelante y hablo con mas miedo del que nunca en su vida habia tenido.
— Eso concuerda. No son ustedes de la misma raza que la gente de Dar o que la gente que vivia en este poblado. Hacen que los habitantes del poblado trabajen en labores cotidianas cuanto ustedes desean, e incluso tambien en asuntos mas complicados. No se si son ustedes o ellos los habitantes originarios de este mundo, pero veo claramente por que no quieren que se vayan de el ahora. ?Tendrian ustedes que hacer parte de su propio trabajo! ?No es eso? — Kruger estaba tan furioso en el momento que acabo su discurso que resulto extrano que el oculto ser le pudiera entender, pero al parecer lo hizo.
— Tienes parcialmente razon — respondio con calma.
— ?Parcialmente! Tengo razon de los pies a la cabeza. ?Le reto a que me deje verle!
— Me temo que eso no es ahora posible.
— ?Por que? ?Teme que le quite su sitio?
— No es eso. Sin embargo, si nos encontraramos bajo las mismas condiciones uno de los dos moriria. Yo no puedo sobrevivir en tu medio ambiente y estoy seguro de que tu tampoco en el mio; al menos Dar Lang Ahn no podria.
— Entonces es el y no usted uno de los nativos de este mundo. ?Ustedes vinieron y lo conquistaron!
— No se lo suficiente sobre el pasado para refutar esa creencia, pero tengo razones para dudarlo.
— Es suficientemente claro.
— Sacas una conclusion extremadamente positiva con realmente muy pocos datos. ?Me prometerias no revelar ningun conocimiento a la gente de Dar Lang Ahn, excepto lo que aprobemos nosotros…?
— ?No!
— Dejame terminar… ?Hasta que hayas aprendido lo suficiente sobre nosotros para formarte una opinion equilibrada?
— ?Quien decide si mi opinion es equilibrada?
— Estaria de acuerdo en librarte de tu promesa cuando lo pidieras, dando por entendido que yo podria entonces encontrar oportuno o necesario acabar contigo.
— ?Como sabe que me sentire atado por una promesa obtenida bajo semejantes condiciones?
— No te aconsejaria que hicieras o dijeras algo que me diera motivo para dudar del valor de tu palabra. Estoy seguro que entiendes la razon.
— ?Que pasa con Dar?
— Como dije, puede decir lo que quiera mientras viva. No sabe nada que me oponga a que comparta con su gente.
— Me oyo hablar con usted sobre electricidad.
— Lo recuerdo.
— De acuerdo, no dire nada sin advertirle previamente; pero le aseguro que sera dificil convencerme — algo muy parecido a un suspiro de alivio vino del que preguntaba.
— Mucho mejor asi — fue la respuesta —. Lo creas o no, me gustaria estar en las Mismas relaciones contigo