Y otros.

El doctor Sol Hertzel, el mas reciente psicoanalista a punto de ser elevado a la categoria de 'guru' por parte de las mas jovenes componentes del ambiente cinematografico gracias a su nueva Terapia Dinamica, que consistia en escucharte y despues acostarse contigo.

En resumen, un Rasputin de via estrecha con un titulo.

Joan Dewer, la nueva actriz, la Duse de la contracultura, una muchacha pecosa de veintidos anos que habia tenido tres hijos fuera del matrimonio y que hablaba incesantemente de ellos con la prensa, y habia estado en Argelia y Pekin, y era tan pesada que te daban ganas de echarte a gritar.

Scani Burton, con su apostura de cirugia estetica, el soltero profesional y abogado preferido del mundo cinematografico, que llevaba tanto tiempo dedicado a los asuntos legales cinematograficos que probablemente pensaba que un agravio era un nuevo bar mexicano.

Y los demas -ahora ya estaban desenfocados-, todos ellos copias xerografiadas de algun original, todos iguales, todos con la misma brillantez y el mismo conocimiento del ambiente; los ingeniosos, con sus modales recalentados a lo Wilson Mizner; los entendidos, con sus conversaciones centradas en Luis Bunuel, Sergei Eisenstein y Satyajit Ray: los atacantes y los defensores, los elegantes sin querer parecerlo, en los periodicos, todos tan finos, tan previsibles, tan pesados, tan absolutamente irreales y tan nada.

Cuerpos arracimandose. Cuerpos alejandose. Y pensar, reflexiono Sharon, que hacia tiempo, alli en Virginia Occidental, y los primeros meses transcurridos en Nueva York y los primeros anos transcurridos en Hollywood, su unica ambicion habia sido la de llegar a ser tan famosa como para poder ingresar en el club y codearse con aquellos seres legendarios.

Ahora que formaba parte de dicho club, y que probablemente ocupaba su centro, deseaba dimitir.

Pero no podia. Tenias que pertenecer a el de por vida, a no ser que perdieras la fama o el dinero, o bien acabaras hecha un cascajo en el Asilo de Ancianos de los actores. Ahora comprobo que estaban empezando a desfilar en serio.

Sharon se movio y cruzo rapidamente el salon -mientras el mar Rojo se abria a su paso-para ocupar su puesto de anfitriona y despedir a los invitados, junto a la escultura de Henry Moore y frente a la enorme y sombria pintura al oleo de Giacometti. Se estaban yendo, yendo, y pronto se habrian largado todos.

Extendio con firmeza la mano, fue estrechando sus manos una tras otra, se inclino en caso necesario hacia adelante para ofrecer la mejilla y para escuchar las muestras de dudosa sinceridad y agradecimiento -'has estado simplemente deslumbrante esta noche, Sharon', 'una fiesta estupenda, carino', 'tendre que pasarme un mes haciendo regimen para librarme de todo lo que me he comido en tu mesa, encanto', 'buen viaje, Sharon, nena', 'se que tu pelicula va a ser alli un exito tan grande como el de aqui, cielo', 'que nos envies una postal de Soho, encanto', 'estas preciosa, nina', 'si te hace falta un poco de hierba, tengo a montones, nina prodigio', 'que vuelvas pronto, carino'; carino, carino, carino.

Al final noto que los frios dedos de Felix Zigman le acariciaban la barbilla.

– ?Te has aburrido, verdad? Y, sin embargo, todo el mundo se lo ha pasado muy bien. Ahora procura descansar un poco. Te llamare manana.

– No me llames, Felix -dijo ella sonriendo debilmente-, ya te llamare yo. Me quedare en casa todo el dia. Tengo que hacer muchas maletas y eso no puede hacermelo nadie. Gracias por haberme librado de ellos. Eres un tesoro, Felix.

Y Felix se fue. Estaba sola. Escucho el rugido del motor del ultimo vehiculo al ponerse en marcha y alejarse.

– Nellie, ?has abierto la verja? -pregunto mirando hacia el comedor.

Nellie Wright regreso al salon con una copa de conac en la mano.

– Ya hace mucho rato. ?Por que no subes a acostarte? Necesitas dormir. Me quedare levantada hasta que todos se hayan ido. Despues cerrare la verja y dejare puesta la alarma una vez Patrick haya sacado fuera todas las botellas y la basura.

– Gracias, Nell. Que asco de fiesta, ?verdad?

– Pues no tanto -dijo Nellie encogiendose de hombros-. Mas o menos como siempre. Han devorado todo el pato asado y la salsa de naranja, y no han dejado ni una cucharada de arroz. Pero me alegro de que hayamos hecho eso en lugar del asado de vaca. En cuanto a la fiesta, no te preocupes ha estado bien.

– ?Por que lo hacemos? -pregunto Sharon. No esperaba mas respuesta que la suya propia-. Supongo que por hacer algo.

– ?Has visto al doctor Hertzel intentando hipnotizar a Joan Dever para quitarle el vicio de fumar?

– Es un imbecil -dijo Sharon dirigiendose hacia la escalera-. Hasta manana, Nell.

– ?Por que no te quedas durmiendo hasta un poco tarde?

– No, creo que no -repuso Sharon deteniendose-. Las primeras horas de la manana son las mejores del dia. Es cuando me siento autenticamente viva y cuando me vibran todos los corpusculos.

– Tal vez te sientas mucho mas viva cuando llegues a Londres y hayas arreglado las cosas con tu senor Clay.

– Pudiera ser. Ya veremos. Tal como dicen en el enigmatico Oriente, sera lo que tenga que ser. En realidad, en estos momentos me siento bien, Nell. En cuanto me he visto libre del ejercito de Coxey he empezado a sentirme bien, a sentirme de nuevo un ser humano y no un robot.

Sharon se quito un zapato y despues el otro y paseo descalza recorriendo un circulo y siguiendo un dibujo de la alfombra.

– Cuando estoy sola -dijo-siempre me sorprendo volviendo a descubrirme a mi misma. Siempre hemos estado de acuerdo en que es extraordinario eso de volver a descubrirte, de averiguar quien eres y que eres realmente. Muchas personas no consiguen averiguarlo en toda su vida. Gracias a ti yo lo estoy consiguiendo, Nell.

– Yo no he tenido nada que ver con eso -dijo Nellie-. Has sido tu.

– Pero tu me has alentado. Es algo muy serio eso de descubrir el propio yo. Es como clavar una bandera en un territorio nuevo.

Ya no me hace falta la aprobacion ni el amor de nadie. Que alivio. Me bastara saber que yo me quiero, lo que soy, lo que siento, y lo que verdaderamente puedo llegar a ser como persona y no como actriz, simplemente como persona. -Se sumio brevemente en sus pensamientos-. Tal vez necesite a otra persona. Tal vez necesite todo el mundo. Tal vez no. Ya lo averiguare. Pero no me hara falta ni esta corte ni estos adornos. Dios mio, a veces experimento el deseo de dejarlo todo, de huir irme de repente a algun lugar donde nadie sepa quien soy, donde a nadie le importe quien soy, estar sola durante algun tiempo, vivir en paz, vestirme como quiera, comer cuando me apetezca, leer o meditar o pasear entre los arboles o bien haraganear sin experimentar sentimiento alguno de culpabilidad.

Largarme a algun sitio donde no hubiera manecillas del reloj, ni calendario, ni citas anotadas en la agenda ni telefono. Una tierra de nunca jamas sin pruebas de maquillaje, sin sesiones fotograficas, ensayos ni entrevistas. Yo sola, independiente, libre, perteneciendome exclusivamente a mi.

– ?Y por que no, Sharon? ?Por que no lo haces algun dia?

– Es posible que lo haga. Si, es posible que pronto este dispuesta a hacerlo.

La senorita, Thoreau viviendo en los bosques y formando una comuna con las hormigas. La senora Swami Ramakrishna en lo alto de una colina dedicada a la busqueda interior.

Es posible que emprenda un vuelo animico no programado y vea donde aterrizo y que me sucede. -Suspiro-. Pero antes tengo que ver de nuevo a Roger.

Me esta esperando.

Tengo que averiguar si puede dar resultado. En caso afirmativo, estupendo. Abandonare el papel de solista y probare a interpretar un duo.

Si no se produce el acuerdo, tiempo habra para probar otro tipo de vida. -Ladeo la cabeza mirando a su secretaria-. Por lo menos pienso como es debido, ?no?

– Desde luego.

– Soy libre de elegir. Se abren ante mi muchas opciones y alternativas. Y eso es una ventaja. La mayoria de las personas no disponen de ninguna.

Tengo buena estrella. ?Quieres desabrocharme, Nell? Nellie se le acerco por detras -y empezo a desabrocharle la espalda de la blusa blanca.

Sharon siguio hablando en tono nostalgico.

Вы читаете Fan Club
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату