Puedes dormir en la parte trasera. Yo conducire. Estaremos en Boston en cuatro o cinco horas.
– Te quiero, papa.
Sidney volvio a subir la ventanilla y, ya con la furgoneta en marcha, se alejo. Su asombrado padre corrio tras ella, pero la furgoneta desaparecio rapidamente de la vista.
– ?Santo Dios! -exclamo Sawyer, que miro por la ventanilla, con una visibilidad casi nula-. ?No podemos ir mas de prisa? -le grito al policia a traves de la ventanilla.
Ya habian visto los destrozos de la casa de los Patterson, en la playa, y ahora buscaban desesperadamente a Sidney Archer y a su familia por todas partes.
El policia le grito:
– Si vamos mas de prisa, terminaremos muertos en alguna zanja.
«Muertos. ?Es asi como estara ahora Sidney Archer?» Sawyer miro su reloj. Se metio la mano en el bolsillo, en busca de un cigarrillo. Jackson le miraba.
– Maldita sea, Lee, no empieces a fumar aqui. Tal como estan las cosas, ya es bastante dificil respirar.
Los labios de Sawyer se abrieron al tocar el delicado objeto que llevaba en el bolsillo. Luego, extrajo lentamente la tarjeta.
Cuando Sidney salio de la ciudad, decidio mantener controladas sus emociones y dejar que actuaran habitos adquiridos desde hacia mucho tiempo. Durante lo que le parecio una eternidad, no habia hecho sino reaccionar ante una serie de crisis, sin tener la oportunidad de pensar bien las cosas. Era abogada y se la habia formado para ver los hechos logicamente, para considerar los detalles y luego trabajar con ellos para formarse una imagen general. Desde luego, disponia de cierta informacion con la que empezar. Jason habia trabajado con los datos de Triton para alcanzar el acuerdo con CyberCom. Eso lo sabia con toda seguridad. Jason habia desaparecido en circunstancias misteriosas, y le habia enviado un disquete que contenia cierta informacion. Eso tambien era un hecho. Jason no vendia secretos a la RTG, no con Brophy formando parte del paisaje. Eso tambien lo tenia claro. Y luego estaban los datos financieros. Aparentemente, Triton se habia limitado a entregarlos. Entonces ?por que aquella escena en la reunion que hubo en Nueva York? ?Por que habia exigido Gamble hablar con Jason acerca de su trabajo con los datos, sobre todo despues de haberle enviado un mensaje electronico felicitandolo por un trabajo bien hecho? ?Por que tomarse tantas molestias para hablar con Jason por telefono? ?Por que colocarla a ella en una situacion como aquella?
Disminuyo la marcha y salio de la carretera. A menos que, ya desde el principio, el intento consistiera en situarla en una posicion insostenible. En hacerla aparecer como una embustera. Las sospechas la habian seguido desde ese mismo instante. ?Que habia exactamente en aquellos datos del almacen? ?Eran los mismos que estaban en el disquete? ?Se trataba de algo que Jason habia descubierto? Esa noche, la limusina de Gamble la habia llevado hasta su casa; evidentemente, deseaba algunas respuestas. ?Podria haber estado intentando acaso descubrir si Jason se lo habia contado todo a ella?
Triton habia sido un cliente desde hacia varios anos. Se trataba de una empresa grande y poderosa, con un oscuro pasado. Pero ?como se relacionaba eso con todas las demas cosas? Las muertes de los hermanos Page. Triton superando a la RTG en el acuerdo con CyberCom. Mientras Sidney pensaba una vez mas en aquel horrible dia en Nueva York, algo parecio conectarse en su mente. Ironicamente, tuvo el mismo pensamiento que Lee Sawyer habia tenido antes, pero por una razon diferente: una representacion.
«?Dios mio!» Tenia que ponerse en contacto con Sawyer. Puso la furgoneta en marcha y regreso a la carretera. Un repiqueteo estridente interrumpio sus pensamientos. Miro a su alrededor, en el interior de la furgoneta, buscando la fuente de la que procedia el sonido, hasta que vio el telefono celular colocado sobre una plancha magnetica, sujeta a la parte inferior del tablero de instrumentos. No lo habia visto hasta ese momento. ?Estaba sonando? Su mano descendio automaticamente para contestar y luego se aparto. Finalmente, tomo el telefono.
– ?Si?
– Creia que no tenia la intencion de ponerse a jugar -dijo la voz, encolerizada.
– Asi era. Y usted se olvido de mencionar que habia colocado un dispositivo de seguimiento en mi bolso, y que solo esperaba saltar sobre mi.
– Esta bien. Hablemos del futuro. Queremos el disquete y nos lo va a traer. ?Ahora mismo!
– Lo que voy a hacer es colgar. ?Ahora mismo!
– Yo, en su lugar, no lo haria.
– Mire, si lo que trata de hacer es mantenerme al telefono para localizarme, no le va a…
La voz de Sidney se interrumpio y todo su cuerpo se puso en tension al escuchar la voz que sono al otro lado de la linea.
– ?Mama? ?Mama?
Con la lengua tan grande como un puno, Sidney no pudo contestar. El pie se aparto del acelerador; los brazos muertos ya no tenian fuerzas para dirigir la furgoneta. El vehiculo perdio velocidad y se deslizo hacia un monton de nieve, en la cuneta.
– ?Mama? ?Papa? ?Vais a venir? -pregunto la voz, que parecia terriblemente asustada.
Sidney, con nauseas en el estomago y todo su cuerpo temblandole incontrolablemente, consiguio hablar.
– Aa… my, carino.
– ?Mama?
– Carino, soy mama. Estoy aqui.
Un rio de lagrimas recorrio las mejillas de Sidney. Oyo que alguien tomaba el telefono.
– Diez minutos. Ahora le doy las indicaciones.
– Deje que hable de nuevo con ella…, ?por favor!
– Ahora la quedan nueve minutos y cincuenta segundos.
A Sidney se le ocurrio un pensamiento repentino. ?Y si se trataba de una cinta grabada?
– ?Como se que la tienen realmente ustedes? Eso podria ser una grabacion.
– Muy bien. Si quiere correr ese riesgo, no venga.
El que asi hablaba parecia estar muy seguro de si mismo. No habia modo alguno de que Sidney estuviera dispuesta a correr ese riesgo. Y la persona que estaba al otro lado de la linea tambien lo sabia.
– Si le hacen algun dano…
– No nos interesa la nina. Ella no puede identificarnos. Una vez que todo haya terminado, la dejaremos en un lugar seguro. -Hizo una pausa, antes de anadir-: Usted, sin embargo, no se unira a ella. Sus lugares de seguridad se han agotado.
– Dejela en libertad. Se lo ruego. Solo es una nina.
Sidney temblaba tanto que apenas si podia mantener el telefono apretado junto a la boca.
– Sera mejor que anote la direccion que le voy a dar. No querra perderse, ?verdad? Si no aparece, no quedara ningun trozo de su hija que pueda identificar.
– Ire -dijo con voz ronca, y la comunicacion se interrumpio.
Regreso a la carretera. Un pensamiento repentino cruzo por su mente. ?Su madre! ?Donde estaba su madre? La sangre parecia estar congelandose en sus venas, mientras mantenia las manos aferradas al volante. Otro sonido de repiqueteo invadio el interior de la furgoneta. Con mano temblorosa, Sidney tomo el telefono, pero alli no habia nadie. De hecho, el repiqueteo era diferente. Volvio a salir de la carretera y busco desesperadamente por todas partes. Finalmente, su mirada se detuvo sobre el asiento situado junto a ella. Miro su bolso y, lentamente, introdujo la mano y extrajo el objeto. Escrito sobre la pequena pantalla del busca aparecia un numero de telefono que no reconocio. Se dispuso a apagar el dispositivo. Probablemente, era un numero equivocado. No podia imaginar que alguien de la empresa de abogados o un cliente trataran de ponerse en contacto con ella; acababa de abandonar la asesoria legal. ?Podria tratarse de Jason? Si era Jason, el momento elegido para llamarla seria el peor de todos. El dedo permanecio situado sobre el boton de borrado. Finalmente, se coloco el busca sobre el regazo, tomo el telefono celular y marco el numero que aparecia en la pequena pantalla.
La voz que broto desde el otro extremo de la linea fue suficiente para que contuviera la respiracion. Por lo visto, aun podian ocurrir milagros.
El edificio principal de la mansion de vacaciones estaba a oscuras y su alejamiento parecia todavia mas intenso gracias a la muralla de frondosos arboles de hoja perenne que habia por delante. Cuando la furgoneta entro en el largo camino de acceso, dos guardias armados surgieron ante el camino de entrada para salir a su encuentro. La ventisca habia disminuido considerablemente su intensidad durante los ultimos minutos. Por detras