simplemente me escapare otra vez. Se como hacerlo.
El pequeno acto de rebelion de Riley lo tomo por sorpresa, pero a Blue no la sorprendio. Esa era la nina que habia logrado llegar desde Nashville hasta la granja de su hermanastro en plena noche. Dean se puso rigido. Blue le acaricio la espalda con la yema de los dedos.
Jack cerro el telefono.
– Mira, Riley, entiendo que todo esto esta siendo muy duro para ti, pero las cosas mejoraran.
– ?Como?
El estaba como pez fuera del agua, pero hizo un esfuerzo.
– El tiempo lo cura todo. Despues de unos meses ya no te dolera tanto. Se que querias a tu madre, y…
– ?No la queria! -grito Riley-. ?Pensaba que yo era fea y estupida, a ella solo le gustaba Trinity!
– Eso no es cierto -dijo Jack-. Ella te queria mucho.
– ?Como lo sabes?
Jack vacilo.
– Lo… se, eso es todo. No quiero seguir escuchandote. Ya has causado demasiados problemas, haras lo que yo te diga.
– No, no quiero. -Con los ojos llenos de furia, cerro los punos-. ?Me matare si me haces volver! ?Lo hare! Se como hacerlo. Cogere las pildoras de mi madre. Y tambien las de la tia Gayle. Me las tomare todas. Y… y me cortare las venas como la hermana mayor de Mackenzie. ?Luego me morire!
Mad Jack se quedo paralizado. Dean palidecio y April se toqueteo las pulseras de plata. Riley gimoteo y se abalanzo sobre ella.
– ?Por favor, April! Por favor, deja que me quede contigo. -April la rodeo instintivamente con los brazos.
– April no puede hacerse cargo de ti -dijo Jack bruscamente-. Tiene cosas que hacer.
Las lagrimas rodaban por las mejillas de Riley. Sin apartar la mirada del nudo de la camisa de April se dirigio a su padre.
– Entonces quedate tu. Quedate y hazte cargo de mi.
– No puedo hacerlo.
– ?Por que no? Puedes quedarte dos semanas. -En un despliegue de coraje, miro a April con ojos suplicantes-. Eso estaria bien, ?verdad, April? ?Verdad que puede quedarse dos semanas? -Miro vacilante a su padre-. No tienes conciertos hasta septiembre. Te oi decir que querias pasar algun tiempo fuera para componer nuevas canciones. Podrias venir aqui. O a la casita de invitados. La casa de April es muy tranquila. Podrias escribir alli tus nuevas canciones.
– La casita de invitados no es mia, Riley -dijo April con suavidad-. Es de Dean. Esta casa es suya.
A Riley le temblo la barbilla. Desvio la mirada de April al pecho de Dean. Blue sintio como le ardia la piel a traves de la camiseta,
– Se que estoy gorda y todo eso -dijo Riley en voz baja-. Y se que no te gusto, pero no hare ruido, y papa tampoco lo hara. -Levanto esos ojos desconsolados para mirar a Dean directamente a la cara-. No presta atencion a nadie cuando compone. No te molestara. Yo incluso podria ayudar por aqui. Podria… podria barrer, o fregar los platos. -Dean se quedo paralizado mientras las lagrimas de Riley casi ahogaban sus siguientes palabras-. O si necesitas que alguien entrene contigo…, yo podria intentarlo.
Dean cerro los ojos con fuerza. Parecia haberse quedado sin respiracion. Mad Jack volvio a abrir su telefono.
– No quiero oir mas tonterias. Te vienes conmigo.
– ?No, no voy!
Dean se deshizo del brazo de Blue, y con la voz ronca, como si se rompiera una presa en su interior, exclamo:
– ?No puedes ofrecerle a la nina ni siquiera dos jodidas semanas de tu asquerosa vida?
Riley se quedo callada. April levanto la cabeza lentamente. Jack no se movio.
– ?Su madre acaba de morir, por el amor de Dios! Te necesita. ?O tambien vas a abandonarla como hiciste conmigo? -Dean se dio cuenta de lo que habia dicho y se dirigio hacia la puerta. La ventana del fregadero traqueteo cuando salio dando un portazo.
Un musculo comenzo a palpitar en la mandibula de Jack. Se aclaro la garganta, y cambio el peso de un pie a otro.
– Bueno, Riley, tienes una semana. Una, no dos.
Riley agrando los ojos.
– ?De veras? ?Puedo quedarme aqui contigo?
– Primero iremos a Nashville para hacer las maletas. Y tienes que prometerme que no volveras a escaparte nunca mas.
– ?Lo prometo!
– Estaremos de vuelta el lunes. Y sera mejor que cumplas tu promesa, porque si vuelves a hacer algo asi, te mandare a un internado en Europa, o algun lugar de donde sea imposible escaparse. Lo digo muy en serio, Riley.
– ?No volvere a hacerlo! Te lo prometo.
Jack se metio el movil en el bolsillo. Riley miro la cocina como si la viera por primera vez. April se acerco a Blue.
– Ve a ver si esta bien -le dijo en voz baja.
13
Blue localizo finalmente a Dean entre la maleza detras del granero. Tenia las manos en las caderas y miraba el esqueleto oxidado de una camioneta roja. A traves del hueco donde una vez habia estado la puerta del acompanante, ella podia ver como sobresalia el relleno de la tapiceria. Un par de libelulas revoloteaban sobre la madera podrida, las llantas desgastadas y otros restos no identificables de maquinaria agricola que habia en la parte trasera de la camioneta. Siguio el camino que el habia abierto entre la maleza. Cuando se acerco mas, vio los restos de un nido en el volante.
– Si estas pensando en deshacerte del Vanquish ahora que has visto esto, olvidalo -dijo ella-. Me niego rotundamente.
Dean dejo caer las manos a los costados. Tenia una mirada desolada.
– ?No te parece que esto se pone cada vez mejor?
– No hay nada como un pequeno drama familiar para descargar adrenalina. - Resistio el deseo de volver a rodearle la cintura con el brazo-. Jack le dijo a Riley que se quedarian una semana - dijo con suavidad-. Pero se la lleva a Nashville el fin de semana. Ya veremos si vuelven.
Dean torcio el gesto.
– ?Como cono ha pasado esto? Llevo anos manteniendome alejado de el, y ahora, en unos segundos, lo mando todo a la mierda.
– Yo creo que estuviste genial -dijo ella-. Y te lo dice alguien a quien le gusta encontrarte defectos.
Blue apenas pudo reprimir la sonrisa. El pateo el guardabarros oxidado.
– ?Crees que le he hecho un favor a Riley?
– Si. La has defendido.
