hijos.

– ?Y tu marido, Nyssa? ?Tambien corre por sus fe-nas la ambicion de los Howard?

– Mi marido es un De Winter, majestad, y espero que de ahora en adelante se comporte como tal -respondio Nyssa-. En cuanto a nuestro matrimonio, Varian parece un buen hombre pero es.un completo desconocido. Espero aprender a amarle.

– A juzgar por como hablas de el, yo diria que ya has empezado a amarle. ?Le habias visto alguna vez?

– Baile con el el dia de vuestra boda.

– Quiza el arzobispo acceda a anular vuestra union cuando se haya solucionado el asunto de mi divorcio y Hendrick se haya casado de nuevo.

– No hay razon para anular este matrimonio, senora -confeso Nyssa-. El rey ordeno que fuera consumado inmediatamente y el duque de Norfolk se ofrecio a llevarle la prueba de que asi habia sido.

– Una vez me diguiste que el rey ser despiadado e implacable pero yo resisti a creerte porque a mi siempre me habia tratado bien. Sin embargo, su comportamiento en este asunto prueba que es hombre sin corazon.

– La escena que encontro era tan chocante que se puso furioso -replico Nyssa saliendo en defensa de su monarca-. Prometio a mi madre cuidar de mi como si fuera su propia hija y no sospecha que Thomas Ho-ward maquina a sus espaldas. Al ver que mi reputacion podia quedar manchada para siempre hizo lo que creyo mejor para limpiar el nombre de mi familia. Ordeno que el conde y yo nos casaramos inmediatamente y si insistio en que el matrimonio se consumara esta misma noche lo hizo para evitar una anulacion o un divorcio posterior. Recordad que soy una heredera.

– Esos Howard estan tan ambiciosos… -se lamento la reina.

– Asi es, senora.

– ?Cuando te vas?

– En cuanto su majestad se encuentre instalada en su nuevo hogar y no necesite de mis servicios -contesto Nyssa-. El rey me ha dado permiso para seguir a vuestro lado. No pienso dejaros cuando mas me ne cesitais. ?Habeis sido tan buena conmigo! -exclamo tomando la mano de lady Ana y besandola.

Aunque habia sido educada para ocultar sus sentimientos, la reina sintio que los ojos se le llenaban de lagrimas. Todos sus subditos y los nobles de palacio la habian recibido calurosamente pero Nyssa Wyndham era especial.

– Ja, -dijo estrechandole la mano carinosamente-. Te quedaras conmigo hasta que todo se haya solucionado, ?verdad? Sera mejor que llame al resto de las damas. A partir de ahora seras la encargada de mis joyas hasta el dia que Hendrick diga que ya no soy reina de Inglaterra.

Nyssa le hizo una reverencia y salio en busca de las damas encargadas de ayudar a su majestad a vestirse. Cuando estas hubieron desaparecido en el interior de la habitacion de la reina, las damas de honor se agolparon a su alrededor quitandose la palabra de la boca y acribillandola a preguntas sobre su precipitado matrimonio.

– Ya conoceis la version oficial -contesto Nyssa-. No puedo decir nada mas pero os pido que seais amables con mi marido. No es tan malvado como algunos pretenden hacer creer.

– ?Es un buen amante? -pregunto Cat Howard con una sonrisa maliciosa.

– El dice que si -contesto Nyssa muy seria.

– ?Y que dices tu? -insistio Cat-. ?Se te curvaron los dedos de los pies y gemiste de placer?

– Nunca habia estado con un hombre antes, asi que no puedo hacer comparaciones. No tengo mas remedio que creerle.

– Yo creo que ha estado enamorado de ti desde el dia que te conocio -intervino Elizabeth Fitzgerald-. Solia mirarte cuando creia que nadie le veia.

– Los irlandeses sois unos romanticos incurables -replico Nyssa-. Ademas, ?como sabes que no dejaba de mirarme? ?Le mirabas tu a el?

– Si-confeso Bessie enrojeciendo hasta la raiz del cabello-. Los hombres atractivos con un pasado dudoso me parecen cien veces mas interesantes que los que son simplemente atractivos. Dicen que nosotras, las irlandesas, sentimos debilidad por ese tipo de hombres.

– ?Vas a dejarnos? -pregunto la pequena Kate Carey.

– El rey me ha dado permiso para seguir sirviendo a la reina hasta que esta deje de necesitarme. A partir de ahora me encargare de sus joyas.

– Sospecho que muy pronto ninguna de nosotras estara aqui -repuso Kate-. Supongo que tu volveras al campo, ?verdad, Nyssa? Tengo la impresion de que no vas a echar de menos la vida de palacio.

– Tienes razon, Kate. Me ha gustado servir a la reina y me alegro de haber hecho tan buenas amigas pero, al igual que mi madre, soy una mujer del campo. El rio Wye separa las tierras de Varian de las mias y doy gracias a Dios porque no tendre que separarme de mi familia.

– ?Crees que con el tiempo aprenderas a amar a tu marido? -pregunto Bessie.

– Poco importa si le amo o no -replico Nyssa poniendose seria de repente-. La cuestion es que estamos unidos en matrimonio hasta que la muerte nos separe. Pero no temais por mi, mis queridas amigas. Reservad vuestra compasion para otras menos afortunadas que yo.

– Me gustaria hablar con Nyssa a solas -intervino Cat Howard-. Sera mejor que vayais a atender a la reina antes de que el resto de las damas empiece a preguntarse donde estamos y salga a curiosear.

Bessie y Kate se apresuraron a obedecer.

– ?Que quieres ahora, Cat? -pregunto Nyssa cuando estuvieron solas-. ?No crees que ya he hecho suficiente por ti?

Catherine Howard tuvo la decencia de ruborizarse al recibir el amargo reproche de su amiga.

– Ya conoces a mi tio -se defendio-. ?Te atreverias a desafiarle? Es un adversario temible y yo no tengo el poder ni el valor necesarios para desobedecerle. Quiere a otra Howard en el trono de Inglaterra y esa Howard soy yo.

– Podias haberte negado, pero no lo hiciste porque en el fondo te atrae la idea de ser reina -la acuso Nyssa-. Enrique Tudor no es precisamente un marido de fiar: se divorcio de la reina Catalina, decapito a tu prima Ana, lady Jane murio tras dar a luz a su hijo y esta a punto de anular su matrimonio con lady Ana. ?Quien te asegura que no encontrara la manera de deshacerse de ti cuando se canse de tus carantonas o una mujer mas joven y bonita que tu le robe el corazon? Te has metido en la boca del lobo y me temo que ya es demasiado tarde para escapar.

– ?Estas celosa, Nyssa?

– ?Celosa, yo? -exclamo Nyssa, incredula-. ?No digas tonterias, Cat! Si me hubieran dicho que el rey estaba interesado en mi, habria salido corriendo. Tu tio cometio un error, querida: el rey no estaba enamorado de mi. Era amable y carinoso conmigo porque prometio a mi madre tratarme como a una hija pero la ambicion cego al duque y con su malvado pian ha conseguido casarme con un hombre a quien no amo. Y no, mi querida amiga, no estoy celosa. Te quiero como a una hermana y temo por ti.

– El rey esta enamorado de mi -aseguro Cat-. El mismo me lo ha dicho. Ya se que podria ser mi padre, pero estoy dispuesta a aprender a amarle. Su pierna enferma ya no me da asco y he aprendido a vendarsela.

Dice que mis caricias le hacen mas bien que las medicinas. ?Se que puedo ser una buena esposa! Conseguire que cada dia me quiera mas y no me aparte nunca de su lado. No temas por mi, Nyssa, todo saldra bien.

– Espero que asi sea -suspiro Nyssa-. ?Y que me dices de tu primo Thomas Culpeper? Asegura estar enamorado de ti y has estado coqueteando con el durante meses. ?Que dira cuando sepa que vas a casarte con otro hombre?

– Tom es un tonto -replico Cat con un mohin de fastidio-. No le intereso como esposa. ?El muy descarado solo quiere seducirme! Las Navidades pasadas trato de comprar mi afecto con un retal de terciopelo para un vestido nuevo. Esperaba a cambio un revolcon en mi cama pero le envie a paseo con viento fresco. ?Que le parta un rayo! Me importa un comino lo que piense o haga. Apuesto a que no tardara en encontrar a otra damita que acceda a sus caprichos.

Nyssa se dijo que el discurso de Cat resultaba demasiado vehemente para ser verdad. Quiza la joven estaba enamorada de su primo pero no estaba dispuesta a permitir que un hombre sin oficio ni beneficio se interpusiera en su camino hacia el trono. ?Y que hay de mi?, se pregunto apesadumbrada. ?Quien es el hombre con el que me he casado? Cuando finalice el breve reinado de lady Ana tendre toda una vida para averiguarlo, suspiro resignada.

Вы читаете El Honor De Una Dama
Добавить отзыв
ВСЕ ОТЗЫВЫ О КНИГЕ В ИЗБРАННОЕ

0

Вы можете отметить интересные вам фрагменты текста, которые будут доступны по уникальной ссылке в адресной строке браузера.

Отметить Добавить цитату