silencio.
– Bien, olvidemonos de Friarsgate por un momento. ?Que otra cosa te gustaria hacer ademas de vivir en la corte y servir a la reina?
– Tener lo suficiente para pagarle a mi doncella.
– ?Acaso no piensas casarte?
– Luego de haber hablado con mama las ultimas semanas, me di cuenta de que nunca estuve enamorada de nadie, y menos de Giles FitzHugh. Si me hubiese propuesto matrimonio, lo habria aceptado sin vacilar y me habria considerado una mujer feliz. Tal vez por unos pocos anos, o tal vez para siempre. ?Quien sabe, tio? SI algun dia aparece un hombre que me ame y a quien yo ame, podre ofrecerle al menos una dote decente. Hay muchas personas como yo en la corte, y lo sabes muy bien, tio. MI padre, por ejemplo. Gracias a su matrimonio con mama, dejo de ser un oscuro servidor del rey para convertirse en un gran terrateniente. Tal vez haya en la corte un caballero que sea propietario de una casita y pueda ser feliz con una esposa como yo. No descarto la posibilidad del matrimonio, tio.
– Sin embargo, tu eres una persona muy vanidosa. Me pregunto si en realidad te gustara llevar una vida tan sencilla.
– ?Que otra alternativa tengo? -le pregunto con absoluta franqueza.
– Veremos, querida mia. Ahora promete que confiaras en mi y que no pelearas mas con tus hermanas. Banon es mi heredera y no permitire que nadie la agreda. Bessie es la preferida de tu padrastro, pues es la unica muchachita de Claven's Carn. Si quieres que interceda en tu favor, deberas dejar que resuelva el asunto a mi manera.
– ?Y volvere al palacio, tio? -inquirio con ansiedad.
– Si, y disfrutaras de las fiestas navidenas, te lo prometo. Ahora, tesoro, dame tu mano y sellemos nuestro pacto. -Lord Cambridge extendio la mano y Philippa coloco la suya encima.
– Confiare en ti, tio Tom, y tratare de portarme bien.
– ?Excelente!
– ?Puedes decirme cual es tu plan? -pregunto la joven, impaciente.
– Es muy pronto todavia, primero debo arreglar ciertos asuntos.
Desde la otra punta del salon, Rosamund observaba como su hija y su primo conversaban seriamente. ?Cual seria el plan de Tom? Debia apresurarse a ponerlo en practica, pues Logan ya estaba insistiendole en que regresara a Claven's Carn. Era dificil decirle que no cuando la miraba con esos ojos tan azules que siempre la habian cautivado. Ya lo habia puesto al tanto de la situacion.
– Tu hija ha tenido un gran disgusto y no sabe lo que dice -opino Logan-. Dejemos que vuelva a la corte y veras como recupera la razon muy pronto.
Aunque hubiese preferido no mencionar el tema, Rosamund se vio obligada a contarle el escandaloso episodio de la Torre Inclinada. Y Logan reacciono tal como ella suponia.
– Conozco muchos jovenes fuertes y saludables, hijos de mis amigos, que estarian encantados de desposar a la proxima dama de Friarsgate. Esa muchacha tiene que casarse lo antes posible.
– No, mi amor. El problema es mas complicado. Tom dice que puede resolverlo si le damos entera libertad. Y le creo, porque en las situaciones dificiles sus decisiones siempre resultaron acertadas.
El senor de Claven's Carn asintio.
– A decir verdad, a pesar de que Philippa es solo una nina, es tan decidida y obstinada que aterrorizaria al hombre mas salvaje. Si Thomas Bolton dice que tiene una buena solucion al problema, estoy dispuesto a escucharlo. Y luego nos iremos a casa.
– Quedate unos dias, mi querido. Todavia faltan unas semanas para que empiece la caza del urogallo - bromeo Rosamund-. Despues, ya no tendre fuerzas para viajar hasta que nazca el bebe. Me siento mucho mas pesada y extenuada que en los otros embarazos. Me gustaria ponerle el nombre de mi primo, Thomas, si estas de acuerdo. Es una forma de agradecerle su extremada bondad conmigo a lo largo de los anos. ?Que te parece, mi amor?
– Por supuesto. Pese a sus extravagancias, Tom es un hombre muy bueno.
– Entonces me esperaras, ?si?
– Hasta fines de septiembre, y despues iras a casa y te quedaras alli -dijo Logan con una sonrisa.
Tras la conversacion con lord Cambridge, Philippa modifico totalmente su actitud. Ignoraba cuales serian los planes de su tio, pero sabia que la beneficiarian. Comenzo a ser mas gentil con sus hermanas, aunque Bessie se empenaba en seguir irritandola y buscando pelea. Banon, en cambio, tenia una personalidad diferente y enseguida hizo las paces con ella. Las dos hermanas mayores renovaron su amistad y trataban de evitar a Bessie y sus sucias artimanas.
A Banon le encantaba escuchar las historias de la corte.
– Supongo que ire, al menos por un corto periodo -dijo un dia de septiembre, mientras conversaban animadamente sentadas en el jardin. Las margaritas se habian adelantado al Dia de San Miguel y mostraban sus primeras flores. Los abejorros zumbaban entre las plantas, mientras extraian el polen de los delicados pimpollos.
– ?Te encantara la corte! -aseguro Philippa con entusiasmo.
– Es posible, pero no olvides que Otterly, como Friarsgate, queda en el norte del pais y tendre que casarme con un hombre de la region. De todos modos, una breve estadia al servicio de la reina mejorara mi reputacion, ?verdad, hermanita? -Banon no dejaba de mirar a Philippa, quien, aun vestida con un sencillo traje de campo, parecia una dama sofisticada. Philippa habia encargado una serie de atuendos apropiados para la vida rural, tal como le habia aconsejado el tio Tom. A Banon le encantaba visitar a la costurera con lord Cambridge, pues siempre la ayudaba a elegir las telas y el diseno de los vestidos. Era un hombre de un gusto exquisito-. Es el peinado, creo -dijo Banon de pronto-, lo que te da ese aire tan encantador.
– En general, uso el cabello suelto como las demas, pero me gusta este rodete frances que Annie le enseno a hacer a Lucy hace mucho tiempo. Es muy elegante.
– Tio Tom piensa que soy demasiado joven para usar un peinado asi. ?Tu que opinas?
– No seas impaciente, Banon -aconsejo Philippa-. Ya tendras tiempo de sobra para parecer mayor. Es eso lo que quieres, ?verdad?
– ?Como lo sabes?
– Porque me paso lo mismo cuando fui a la corte por primera vez. Pero Lucy me recomendo que usara el cabello suelto para parecer mas joven y evitar que los hombres me acosaran. Decia que primero debia aprender los usos y costumbres de la corte y que eso requeria cierto tiempo. Tenia razon, sin duda. Pero cuando vayas a la corte, no estaras sola: yo te cuidare. Y mis amigas tambien.
– Estas ansiosa por regresar.
– ?Ay, si!
– ?Cuando sera?
– No lo se. El tio Thomas prometio resolver la situacion.
Septiembre llegaba a su fin y el 29, Dia de San Miguel, Logan anuncio que partiria con toda su familia el 1° de octubre.
– Tu tambien puedes venir, Philippa -dijo el senor de Claven's Cara.
La joven miro con desesperacion a lord Cambridge.
Llego la hora, penso Tom, y comenzo a hablar:
– Tengo la solucion a todos los problemas que los FitzHugh, sin querer, han ocasionado a esta familia.
– ?Dilo de una buena vez! -reclamo Rosamund.
– Tal vez no complazca a todos, pero, sin duda, le agradara a Philippa, cuya felicidad es lo unico que debe preocuparnos en este momento, prima querida. ?Estas de acuerdo? -Los ojos de Tom la miraban implorantes. Rosamund se dio cuenta de que no iba a gustarle su propuesta, pero asintio de todos modos-. Philippa ha sido muy firme en su posicion: no desea cargar con el peso de Friarsgate. Hemos discutido el tema infinidad de veces en las ultimas semanas y su decision es definitiva.
– ?Como es posible que rechace estas tierras? ?Esta absolutamente loca! -exclamo Logan, enojado y tambien apenado, porque sabia que esa decision lastimaria a su amada Rosamund. ?Que diablos le ocurria a Philippa? Debio haberse encargado el mismo de buscarle un marido y casarla sin tantos rodeos.
– ?A que conclusiones has llegado, Tom? -pregunto Rosamund, con un hilo de voz y el rostro palido.